Un Jodido Encuentro. (Bakugou x Lectora)

Un infierno en la tierra

¿LA DIRECCION QUE TOMO BAKUGOU.... FUE HACIA LA GUARNICION ATACADA?

Los galopes resonaban, a lo lejos un pequeño mar de llamas se podía ver, Todoroki apretaba los dientes mientras se acercaban, montones de cuerpos destazados, muchos de los soldados aun convida que agonizaban a la falta de una o varias extremidades de su cuerpo.

El pequeño grupo que se había dirigido a la guarnición bajaron de sus caballos, parecía el mismo infierno, los gritos de dolor de los soldados que aun seguían convida.

Todoroki avanzo con un pelotón de hombres que habían echo una formación en caso de un ataque, hasta que resbalo al pisar algo que ya hacia en el suelo y de esta manera el estaba posado en el suelo.

Un gran silencio y asco invadió al bicolor, se había resbalado al pisar las tripas de un hombre que estaba partido por la mitad y de esta misma manera se había llenado por completo de estas mismas, el olor era repugnante y fue imposible no vomitar en ese mismo lugar.

Los soldados trataban de resistir el repugnante olor para no terminar de la misma manera que el bicolor.

-Sigan caminando....- Todoroki apenas podía respirar con normalidad- si no nos apuramos es probable que no alcancemos a ese maldito

-SI SEÑOR- Los soldados soltaron en coro esas palabras para así seguir su camino

Realmente es un infierno, y los murmuros de parte de los soldados comenzaron

-Si un maldito lobo provoco esto.... porque no los devoro- 

-Solo quería jugar, es un maldito monstruo-

-Era algo de esperarse de alguien de su especie-

Las voces eran demasiado bajas pero aun así eran posibles de escuchar, el bicolor realmente mataría a ese maldito lobo, esta era la primera de todas las batallas que se desatarían ...

- Señor!- un grito se escucho a lo lejos

- quien eres- el bicolor contesto fríamente

- pertenezco al tercer pelotón, me han enviado para informar que no se a encontrado ningún rastro de la bestia- el hombre estaba respirando de una manera muy alterada, era obvio que había estado corriendo por mucho tiempo

-maldición ...- Todoroki exhalo mostrando su molestia ante todos sus hombres- denle agua que están esperando!

-busquen sobrevivientes- esa fue la ultima palabra que soltó el bicolor antes de subirse a su caballo y galopar hasta el bosque

Momentos después de su partida, un chico peliverde montado en un caballo blanco hizo aparición

-Todoroki-kun!- el chico estaba buscando al bicolor

-se retiro un momento, quien eres tu-

-soy un nuevo recluta, por favor dime hacia donde se dirigió ...- la falta de aire era muy notable

-por el lado oeste del bosque justo por ahí-

-gracias!-

El chico peliverde se retiro a una gran velocidad dispuesto a alcanzar a Todoroki, tenia una información importante que decirle y eso no podía esperar

.

.

.

En la tribu

En cuanto el rubio cruzo los arboles por los que se había retirado cayo al suelo, no solo estaba exhausto, tenia muchas heridas y estaba manchado de mucha sangre

-eh?- quedaste perdida en tus pensamientos en cuanto lo viste

Te levantaste del tronco en el que estabas sentada y corriste sin que te importara el dolor de tu pierna hacia el diciéndole a alguien que te ayudara

Todo el pueblo salió desconcertado y dos hombres ayudaron a llevar a Bakugou a su carpa, los seguiste y entraste  justo después de que ellos salieran ella.

-Traeremos hierbas medicinales-

Asentiste con la cabeza, volteaste a ver al rubio que estaba dormido, estaba muy herido y eso provoco que las lagrimas salieran por tus mejillas

Posaste tu mano en su mejilla, sentías su calidez, como era que se había herido de esa manera?, cerraste los ojos y las lagrimas seguían corriendo, a pesar de que no hablas mucho con el un dolor te había llenado el pecho y no sabias el porque.

Sentiste como algo se poso en tu cabeza y agito suavemente tu cabello abriste los ojos y viste al rubio observándote con el ceño levemente fruncido

-Deja de llorar con un carajo....- se quejaba a cada palabra que daba- no estoy muerto maldición

-Katsuki ....- tu rostro expresaba sorpresa, el te había mostrado afecto.....- te tapaste la boca, por un momento se te había olvidado que tenias prohibido el mencionar ese nombre- yo... lo siento...

-TSK, no importa idiota....- un leve sonrojo se marco en las mejillas de Bakugou 

-Traje las hierbas- el hombre se asomo levantando uno de los lados de la carpa, puso los cuencos con las hierbas ya preparadas en uno de los muebles, dejo vendas y paso a retirarse.

-Gracias....- estiraste tu mano hacia los cuencos y los tomaste con firmeza

El rubio se te quedo viendo sorprendido, observo cada uno de los movimientos que hacías

- bien... necesito que te quites la manta- tu mirada era demasiado seria

-yo lo puedo hacer idiota, dame eso- el rubio intento agarrar el cuenco y una mueca de dolor se marco en su rostro

-no, no puedes mírate apenas y logras moverte, así que al menos mueve la manta

- ha? crees que puedes darme ordenes extra?-

-tu no estas en posición para hacer lo que quieras en este momento... si quieres puedes ponerme un castigo por desobedecer, pero al menos deja que cure tus heridas

-tsk, tu castigo no será nada agradable...- esas palabras te hicieron recordar aquella habitación oscura

Agitaste la cabeza para despejarla y proseguiste a iniciar a poner el ungüento

-porque aun te quitas la manta- tiraste de ella mientras el rubio ponía una cara de desagrado

La manta toco el suelo, te habías paralizado... tu rostro se ruborizo y te tapaste el rostro inmediatamente, estabas muy avergonzada

-que sucede... no ibas a ponerlo tu?- una sonrisa picara se mostro en el rostro del rubio pues el sabia lo que pasaría desde un principio

-e-estas... desnudo.....- estabas muy nerviosa

-era claro idiota, si no vas a poner esa maldita cosa dámela, yo lo hare- intento arrebatarte el cuenco y volvió a quejarse del dolor

-n-no....- seguías sonrojada pero no querías darle el cuenco

-ha?, como que no con un demonio- su ceño se frunció demasiado

- dije que yo lo haría ... no puedo negarme ahora- tragaste saliva y te destapaste el rostro

Trataste de clamarte y observaste con cuidado la herida que se encontraba en la parte baja de su abdomen demasiado cerca para que pudieras observar esa zona que tanto evitabas, tomaste un poco del ungüento y lo empezaste a esparcir

El rubio gruño en un tono bajo, sentía dolor, observaste que la herida llegaba un tanto cerca del bello púbico del rubio, ocasionando que te ruborizaras de mas

Bakugou lo noto y sonrió de manera descarada

-Porque no empezamos tu maldito castigo ahora....- su respiración empezaba a sonar agitada

Lo miraste sorprendida, con un mal presentimiento al ver su sonrisa marcada en su rostro... pero que es lo que realmente va a pasar, no tenias ni idea.

"Cual será el castigo que te espera?..."