Una historia jamás contada del prisionero de Azkaban

8

Sentí que el aire me faltaba, todo me daba vueltas y mis ojos se movían rápido de Lupin a Black. Esto debía ser una jodida broma. Sentí la voz de Ron llamándome, pero se oía lejos, mis piernas temblaban y mis manos sudaban, iba a desmayarme, pero no lo hice, no podía, mis amigos me necesitaban. Me recargué en una pared y fui deslizándome hasta quedar junto a mi amigo pelirrojo.

-Lerry, hija -Dijo Black y caminaba hacía mi

- ¡No! No me llame hija y no se me acerqué -Le gruñí y se frenó. Pude ver como su cara cambio, su gesto mostraba que lo que le había dicho le dolía, pero no me importaba.

-Eres tan hermosa e inteligente como tu madre, ella...

-No hablé de mi madre -Le advertí- No tiene derecho.

-Tienes que creerme hija...

-Háblenme de Pettigrew ahora mismo -Exigió Harry de pronto, Black lo miró.

-El muy cobarde se cortó el dedo para que todos creyeran que había muerto -Dijo Black- Y los engañó a todos hasta que lo descubrí, vi un periódico donde salía él y está ahí -Señaló hacía Ron

- ¿Yo? -Preguntó Ron- ¿Por qué cree que yo soy?

-No tú -Dijo Black- Tu rata.

-Scabbers es inocente -Dijo Ron y la pegó a su pecho- ha estado en mi familia por... -Se calló de pronto

-Doce años ¿cierto? Una larga vida para una rata, además le falta un dedo

-Demuéstrenlo -Dijo Harry. Sirius Black se acercó y le arrebató a Ron su rata, aunque él trataba de impedirlo. Scabbers comenzó a chillar con desesperación -Dásela Ron -Le pidió Harry.

Ron soltó a Scabbers, Sirius la puso sobre un viejo piano y la rata comenzó a correr desesperada. El profesor Lupin le lanzaba hechizos con su varita y Sirius con la de Snape, pero ella corría esquivando los lanzamientos. Estaba a punto de meterse por un hoyo en la pared hasta que un ataque de Lupin le dio y la rata se convirtió en un hombre. Todos nos sorprendimos.

-Remus, Sirius -Dijo ese hombre con voz chillona- Mis queridos amigos -Trato de correr, pero ambos hombres lo tomaron por los hombros y lo aventaron contra la pared. Él corrió de nuevo y se acercó a Harry.

-Harry, conocí a tu padre, eres igual a él, fuimos grandes amigos -Dijo Peter

-No hables de su padre delante de él, como osas mencionar a James en su presencia -Le advirtió Black

-Eres una basura Peter Petigrew, vendiste a James y a Lily a Voldemort -Le gritó el profesor Lupin

- ¿Qué hubieras hecho tú Remus? ¿Qué hubieras hecho Sirius? -Dijo llorando

- ¡Hubiera muerto, antes que traicionar a mis amigos! -Gritó Black

-Yo no quería -Chilló Petigrew otra vez- Él me obligó, era muy malo

- ¡Eres un maldito cobarde! -Le gritó Lupin.

Peter Petigrew corrió por todos lados, mientras Lupin y Sirius lo seguían apuntándolo con las varitas. Petigrew se acercó a nosotros.

-Harry, tu padre no me mataría, me perdonaría, ayúdame, Harry -Suplicó Peter

-Debiste saber Peter -Le dijo Sirius mientras lo alejaba de Harry- Que, si Voldemort no te mataba, lo haríamos nosotros.

- ¡No! -Grito Harry y todos lo miramos- Sé lo que hizo, pero lo llevaré al castillo -Peter se arrodilló a agradecerle a Harry- Para que los dementores se lo lleven -Pettigrew chilló asustado.

-Harry ¿estás seguro? -El asintió.

Salimos de la casa de los gritos. Sirius y Harry ayudaron a Ron mientras Hermione y yo íbamos atrás y al final el profesor Lupin con Pettigrew agarrado de la camisa para que no intentará huir. Llegamos y miré el cielo.

-Ron, tú ayúdame, fui una buena rata, nunca te di problemas -Le dijo

-Niñas bonitas ayuda -Nos pidió a Hermione y a mi

-No te acerques a ellos -Dijo Lupin y lo tomó del cuello de su sucia camisa.

-Harry -Lo llamé y señalé el cielo, todos voltearon.

-Luna llena -Dijo Hermione. Todos miramos al profesor Lupin, soltó a Peter y comenzó a gruñir, Sirius se acercó a él.

-Remus, Remus... ¿Tomaste tu poción? No olvides quién eres -El profesor Lupin comenzó a transformarse en hombre lobo- ¡Corran! -Nos congelamos de miedo.

-Potter ¿Qué me hiciste? -Dijo Snape cuando nos alcanzó, después giro, vio a Sirius y a Lupin y trato de protegernos con su cuerpo.

- ¡Aléjense! -Gritó Sirius de nuevo y Lupin lo arrojó lejos.

El profesor Snape nos estaba cubriendo, todos estábamos tan asustados que se nos olvidó algo. Pettigrew se convirtió en rata y escapó.

- ¡No! -Harry corrió, pero Snape lo alcanzó y le impidió seguir a la rata.

Por perseguir a Harry, Snape se separó de nosotros. Hermione se abrazó a Ron quién estaba sentado en el piso. El hombre lobo se acercó y me tomó con sus garras.

- ¡AYUDA! -Estaba congelada, sabía que si no reaccionaba rápido me iba a morder y me convertiría en algo como él, pero no podía reaccionar, solo pude llorar y suplicar- Por favor, profesor Lupin, por favor no me lastime -Cerré los ojos esperando la mordida que llegaría en cualquier momento, pero no pasó, Sirius, en su forma animal, atacó al profesor Lupin y me lo quitó de encima.

-Lerry -Me llamó Hermione- Mi respiración estaba agitada, mis ojos estaban vidriosos, sentía la boca seca y comencé a llorar. Como pude me arrastré hasta mis amigos y los abracé,

-Lerry -Dijo Harry y me abrazó con fuerza- Sirius te salvó -Levanté mi rostro, lo miré y asentí.

De pronto escuchamos un chillido agudo de perro, el profesor Lupin en su forma de hombre lobo, estrelló contra un árbol a Black en su forma canina y él rodo colina abajo, el hombre lobo estaba por atacarlo de nuevo, pero se detuvo cuando escuchó un aullido y se fue.

-Sirius está herido, debemos ayudarlo -Le dije a Harry y ambos salimos corriendo, ignorando a Snape -No lo veo.

-Allá, cerca del lago -Harry corrió y lo seguí, pero ambos frenamos de pronto -Dementores -Me miró- No te acerques Lerry, yo iré -Negué- Escucha, cuando fueron a Hogsmeade la primera vez, el profesor Lupin me enseñó a atacar a los dementores, salvaré a tu padre, lo prometo -Y corrió.

"Salvaré a tu padre" Él era mi padre, la persona que siempre quise ver y estaba siendo atacada por dementores. Me quedé lejos del lago, pero podía ver todo. El cuerpo de Sirius estaba tirado en el medio del lago congelado mientras cientos de dementores lo rodeaban. Harry llegó hasta él y trato de despertarlo. Los dementores se acercaban a ambos y yo no pude quedarme lejos, sabía que no podía hacer nada, pero aun así me acerqué

-Harry -Los dementores bajaron hacía nosotros.

-Tonta, te dije que te quedaras lejos -Me regañó- Vete antes de que sea tarde.

Pero fue demasiado tarde, los dementores se acercaron a nosotros y empecé a sentir una tristeza inexplicable, no podía moverme tampoco y cuando un dementor se acercó a mi sentí que me absorbía algo. Mire a Harry y a Sirius, Harry trataba de luchar, pero Sirius no se movía. Escuché a Harry gritar mi nombre, vi una luz que alejó a los dementores y después ya no vi nada.