ESCENA VI

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Entra Fabián a punta de balazos, mientras "entrena" a Olivia

FABIÁN: ¿No le gustó? 

OLIVIA: No. 

MARÍA: Señora, en la puerta hay un jovencito que insiste en hablar con usted. 

OLIVIA: ¿Quién lo recibió? 

MARÍA: Su pariente, el señor Tobías. 

OLIVIA: Dios mío, qué vergüenza, Tobías no dice más que tonterías. Malvolio, vaya usted por favor. Si es enviado del conde le dice que estoy enferma o que salí o lo que sea pero que se vaya (sale Malvolio).(a Fabián) Bien mi querido guardia personal, ya te habrás dado cuenta cuán pasada de moda está tu metralleta. (Entra Toby)

OLIVIA: (a Toby) Primo, ¿quién es el que está a la puerta? 

TOBY: Algo muy raro...¡¡Malditos los licores con leche!!(a Fabián) Fabián... ¿Qué se cuenta, compañero?

OLIVIA: ¿Cómo llegas tan temprano, ebrio y gritando? 

TOBY: Shhhhh! Sobrinita querida, hay alguien esperando. 

OLIVIA: Fabián, hazte cargo. Veremos si sirves de algo. (Salen. Entra Malvolio.) 

MALVOLIO: Señora este jovencito insiste en verla. 

OLIVIA: Dígale que no va a conseguir verme.

MALVOLIO: ¿Y usted qué cree que he hecho todo este rato? Es insufrible y le aseguro que en cualquier momento empieza a gritar. 

OLIVIA: Malvolio... ¿Qué tipo de hombre es? 

MALVOLIO: Amanerado y de malas maneras. 

OLIVIA: ¿Cuántos años tiene? Su aspecto, ¿cómo es? 

MALVOLIO: Para ser hombre le faltan años y para muchachito le sobran. Camina claramente entre dos aguas. Podríamos decir que todavía en sus labios le queda leche... De su madre claro.

 OLIVIA: Que pase. María, escucharemos, una vez más, al embajador de Orsino.

NOCHE DE REYESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora