ESCENA VI

49 2 2
                                    

Entran Olivia y Viola/Violo. 

OLIVIA: Bien, mi Violillo querido, yo ya he arriesgado mi honra y sé que fue un error. Pero este error no se deja enmendar. ¿Qué puedes pedirme tú que yo te niegue? 

VIOLA/VIOLO: Que ames al duque Orsino, mi señor. 

OLIVIA: ¿Cómo podría darle lo que a ti te pertenece? 

VIOLA/VIOLO: De eso yo te eximo. 

OLIVIA: ¿Volverás mañana? Adiós... dulce diablo. Seguirá mi alma tus pasos hasta el mismo infierno. 

Sale Olivia. Se acercan Toby y Fabián. 

TOBY: Ponte a la defensiva. Pronto. No sé qué fue lo que hiciste, pero tus días están contados. 

VIOLA/VIOLO: Usted se equivoca, señor. No sé de dónde.... 

FABIÁN: Cuídate pendejo que la bestia que te anda buscando tiene un prontuario que llenaría repisas completas. 

TOBY: Asesinatos, crímenes, descuartizamientos, ajustes de cuentas, homicidios, parricidios, fratricidios, femicidios, degollamientos... (se ahoga)

FABIÁN: Empotramientos... embotamientos...narcotráfico... halterofilia.... gimnasia rítmica. 

VIOLA/VIOLO: Pero si yo no he hecho nada. 

TOBY: Te equivocas, cachorrito.... te equivocas y si sigues haciéndote el desentendido tendrás que arreglártelas conmigo (le pone el cuchillo al cuello). 

VIOLA/VIOLO: Yo no soy lo que parezco... yo no soy. 

TOBY: ¡Silencio! Fabián, quedas a cargo voy por el ofendido. (Sale) 

VIOLA/VIOLO: Y usted... ¿puede decirme algo? 

FABIÁN: Muy poco, solo que el hombre es un académico ilustrado que maneja el lenguaje como nadie en toda Irilia. Dicen que se compara a un tipo de pato europeo.  Además, gusta de sacar las tripas de su adversario mientras piensa qué hacer con sus gónadas. 

VIOLA/VIOLO: ¡Pero qué tipo de hombre es ese? 

FABIÁN: I-ri-li-ano. De tomo y de lomo. ¿Quieres ir a su encuentro? En una de esas puedo negociar una muerte rápida para ti. 

VIOLA/VIOLO: De acuerdo. En todo caso si he de morir será con mi secreto en el pecho. (Salen) 

Entran Toby y Andrés. 

TOBY: Te aseguro que es el demonio vivo. Es un animal, una bestia, maneja el cuchillo como nadie. 

ANDRÉS: ¿Y si lo dejamos hasta aquí mejor? 

TOBY: El problema es que ahora es él quien no quiere apaciguarse. 

ANDRÉS: Mejor no le decimos nada, digo tal vez... No sé... Quizás se ofenda con el speech que se me ocurrió... 

TOBY: Ya es tarde (entran Fabián y Viola/Violo)(a Fabián) Está a punto de caer desmayado... 

FABIÁN: (a Toby) Este otro parece alma en pena...A disfrutar... 

TOBY: Bien, señores... Sangre y arena. (Se van a ir a los cuchillos cuando entra Antonio) 

ANTONIO: ¡Abajo esas armas! Si este joven y buen hombre te ha ofendido, me hago cargo y tomo su falta sobre mí.(a Viola/Violo) Más, si eres tú quien desafía déjamelo a mí. 

TOBY: ¿Y tú quien diablos eres? 

ANTONIO: (mirando a los ojos a Viola/Violo) Uno que por amor es capaz de matar. 

TOBY: ¡¡Ah, no!! Un cola enamorado... Eso es demasiado. (Todos sacan cuchillos y comienzan la pelea que para un oficial)

FABIÁN: (a Toby) Compadre, la policía... ¡Raspa! 

TOBY: (a Antonio) Estaré contigo en un momento. Se esconden. 

VIOLA/VIOLO: Guarda ese cuchillo, te lo ruego. 

ANDRÉS: Por supuesto... Obvio... Demás. 

OFICIAL: Antonio Jorge del Rayo de la Nueva Aurora Strozzi y Camasuttro. Queda usted arrestado por antiguas órdenes del antiguo alcalde Luiso Almendro Camasuttro y Severo. 

ANTONIO: (aparte) Mi tío Luiso... pensé que estaba muerto. Disculpe oficial, pero usted me toma por otro. 

OFICIAL: En absoluto.(al oído de Antonio) Podría reconocer esas piernas a kilómetros de distancia. Te conozco bien marinero.(a todos) Él sabe que lo conozco bien. 

ANTONIO: Obedeceré.(a Violo/Viola creyendo que es Sebastián) Y todo por seguir tus pasos. Pero, ¿qué va a ser de ti ahora que tendrás que devolverme el dinero que te pasé? 

OFICIAL: ¡En marcha! 

ANTONIO: Tengo que pedirte algo del dinero. 

VIOLA/VIOLO: ¿Qué dinero? Con suerte me quedan tres monedas... en fin ¡ahí te van dos! 

ANTONIO: ¡Me vas a negar ahora!¡ Es acaso posible que todos mis desvelos no te muevan a compasión! No te burles de mi desgracia, porque si lo haces, te juro que suelto la lengua y te tiro en la cara todo el amor que por ti he desplegado. 

VIOLA/VIOLO: ¿Cuál amor? 

ANTONIO: No me desafíes. 

VIOLA/VIOLO: ¿De que estás hablando? No te conozco. Odio, en todos los hombres, la ebriedad estúpida o cualquier otra seña viciosa de las que habitan en su enfermiza sangre. 

ANTONIO: ¡Oh por Dios!

OFICIAL: ¡Ya basta de pataleta! En marcha. 

ANTONIO: Una palabra más. A este jovencito lo rescaté de ser engullido por las fauces de la muerte, le devolví la vida y lo transformé en mi veneración. 

OFICIAL: Basta de perder el tiempo, en marcha. 

ANTONIO: No era un Dios, sino ídolo en corrupción. Tú solo, mi querido Sebastián, has degradado tu belleza. Eres bello, pero eres malo. Quien es bello y malvado a un solo tiempo, es como cofre vacío con adornos del diablo. 

OFICIAL: ¡Fuera! ¡Fuera de aquí a marchar!! Has enloquecido por completo. A una yegua entre los carros de un faraón yo te comparo. 

ANTONIO: Me voy. 

Salen

VIOLA: (aparte y en éxtasis profundo) No puede ser... No puede ser cierto. Oh ilusión, muestra tu verdad. ¡Muéstrate! Oh hermano, Oh mi Sebastián, nos han confundido... Ha nombrado a Sebastián. Así es, es exactamente así. Es mi reflejo, yo lo imito, imito sus gestos, sus adornos, sus colores. Oh Dios, no permitas otro espejismo. Si es verdad lo que presiento, buenas son las tempestades y las olas bravías. 

Se va

NOCHE DE REYESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora