In your mouth | ChanBaek

Extra

Un brazo envolvió su cadera segundos antes de que alguien lo jalara levemente, logrando que su cuerpo chocara con otro. El movimiento no había sido agresivo, al contrario, había derrochado tanta suavidad que BaekHyun sonrió al instante, aún con los ojos cerrados, deseando estar lo suficientemente despierto para corresponder las caricias ajenas, pero con suerte logró removerse un poco, acercándose a su novio.

Se sentía un poco sofocado, incluso si ChanYeol no estaba sobre él, y notó que era culpa de su estúpido cabello cuando el mayor rozó su mejilla, quitando el largo flequillo que cubría gran parte de su rostro para reemplazarlo con sus tiernos labios, besando cuánto lugar encontró, apenas fue consciente de que estaba besando su frente cuando ya estaba en su nariz, en su mejilla, en su mentón…

Respondió instintivamente a sus labios, moviéndolos con excesiva agilidad aún si el resto de su cuerpo seguía sin obedecerlo, su novio lo guiaba con tanta destreza que no era necesario que se esforzara demasiado, correspondiendo sus roces por simple costumbre, aunque no con menos deseo.

Después de todo, no había cosa que disfrutara más que besar a su pareja.

—Channie —murmuró una vez que el mayor se alejó, casi en un quejido, acercándose un poco más al cuerpo desnudo que tanto anhelaba.

—Mmm —sonrió en seguida, usando el mismo tono infantil de su pequeño—. ¿Qué quieres, cariño?

—A ti —hizo un puchero al decir, todavía con los ojos cerrados, aferrándose al abrazo que su novio aún le daba—. Solo a ti.

—Eres más cursi en la mañana —se burló suavemente, usando el pulgar para acariciar su mentón, y luego sus labios, dejando un beso tan dulce y puro que BaekHyun simplemente lo correspondió, ocultando el sonrojo que lo invadió aún si seguía un tanto dormido.

Abrió los ojos una vez que se alejó, sonriendo ampliamente, sinceramente, juguetonamente, bastó con que pudiera mover sus brazos para que se impulsara sobre el cuerpo ajeno, aferrándose a las caderas de ChanYeol con sus piernas, fuerte, firme, demandante, completamente necesitado.

—Podemos cambiar eso —murmuró apenas, inclinándose lo suficiente para atrapar los labios del mayor, besándolos, mordiéndolos, pidiendo un poco más.

—Está bien, bebé, me gusta que seas cursi —sonrió de medio lado, fingiendo que sus manos no le cosquilleaban por tomar el trasero ajeno y masajearlo un poco.

¿Cómo era posible que BaekHyun causara tantas cosas en él?

—A mí no —frunció el entrecejo, aprovechando que ambos seguían completamente desnudos para besar su hombro derecho, su clavícula, su pecho, su estómago; aprovechando sus posiciones para bajar más y más, haciendo que ChanYeol temblara bajo sus labios—. Prefiero ser directo.

—Me gustas de ambos modos —asumió entonces, observando fijamente al muchacho que jugueteaba con su ombligo, vaya a saber Dios por qué, logrando que soltara un jadeo involuntario—. Después de todo, siempre has sido tsundere.

Tuvo que frenar su discurso una vez que BaekHyun bajó un poco más, prácticamente se ahogó con su saliva, un poco incrédulo, abriendo los ojos de una forma en que pocas veces lo hacía, pues su chico…

—Buenos días, dormilones.

No sabía qué había sido más rápido, si el modo en que el menor se alejó de su entrepierna o la manera en que él lo jaló de regreso a su lado, cubriendo sus cuerpos con las mantas antes de esconder su rostro sonrojado en el pecho de su novio, YiFan había llegado en el peor momento, sin siquiera tocar la puerta, invadiendo la privacidad que siempre habían tenido en el cuarto de BaekHyun.