Te odio idiota ®

Capitulo 15

Después de largos minutos de sanación, Jackson estaba dormido en el mueble y yo estaba sentada a su lado intentando prender mi teléfono y pensando en lo que había hecho su padrastro.

La mano de Jackson se empezó a mover frenéticamente y se detuvo cuando la coloco alrededor de mi cintura, me agarró y me apretujo contra él, quede acostada en el mueble, abrazada por el chico y mi celular término en el suelo.

-Siéntete importante.- susurro en mi oído.

-¿Soy importante?- no respondió a eso, me quedé en silencio y cerré mis ojos.

Jackson Williams.

Esa chica tenía agallas, nadie venía a mi casa, y verla allí parada con cara de horror, me paralizó.

Todo lo que hizo y todo lo que dijo, me conmovió, ya no la quería para solo una noche, la quería solo y exclusivamente para mí, quería estar en las buenas, en las malas, en todos los momentos de su hermosa existencia y pensé que nunca lo volvería a decir.

Suena ridículo que solo en dos días ya tuviera medio claro lo que quería, pero así es, todo lo que ha hecho ella en dos días, fue lo que una persona nunca hizo por mi.

-Quiero tatuarme.- susurro adormilidamente.

-Si, definitivamente estás loca.- susurré en el mismo tono.

-Si, es cierto.- hizo una pausa y empezó a jugar de nuevo con mi mano, medía mis dedos con los de ella, mi mano con la de ella y hacía pequeños trazos en mi mano.- ¿Me llevaras?

-Como quieras.- se acurruco más hacia mi.- Pero primero tenemos que salir de aquí.

-Ya es tarde, no nos escucharan salir.- dijo simple.

-¿Eres suicida?

-Tal vez.- se rió por lo bajo.

-Bien.- me senté y la mire, estaba boca arriba con la mirada fija en mí, su pelo estaba despeinado y sus ojos brillaban en la oscuridad, se sentó y quedamos muy cerca, me acerque a ella y nuestras narices se juntaron, ella se acercó más y jugó con mis labios antes de unirlos en un suave y profundo beso, enrede mis manos en su delicada cintura y ella en mi cuello, comenzó a jugar con mi cabello mientras sus labios jugaban con los míos; después de mucho tiempo, no había besado con sinceridad.

Nos separamos y ella apoyó su frente con la mía.

-Tengo miedo.- susurro.

-¿De...?- susurré.

-De enamorarme de ti Jackson, no quiero ser una más.- subí una mano hasta su mejilla y la acaricie suavemente.

-No tengas miedo, ahora, es lo que más quiero.- sonrió sin abrir los ojos y la volví a besar, ella se separó de mí y me miró a los ojos.- Se que lo que sabes de mi no es muy convincente.- dije sobre sus labios haciendo un poco de cosquillas.- pero me esforzaré en que me creas.

¡Joder! ¡Me beso!

-¿Nos vamos?- susurro y asentí, nos levantamos y salimos de mi cuarto, caminamos lo más despacio y lo más silenciosamente posible, abrimos la gigantesca puerta y salimos.- dime que tienes otro auto.- dijo mirando la desolación en la calle.

-Si.- le agarre la mano y como si fuera electricidad, me paso un corrientazo por todo el cuerpo, me estremecí y camine hacia los autos de mi familia, busqué entre el suelo y encontré la piedra donde escondían las llaves, saque una y prendí un auto, para mi mala suerte era el de mi padrastro. -Mierda.- susurré y las volví a guardar, saque otras y prendí otra auto, Megan me jalo con todas sus fuerzas y nos escondimos detrás de un auto.- ¿Que?- colocó una mano en mi boca y señaló hacia la puerta de la casa, mi padrastro estaba saliendo de allí.

Megan empezó a temblar cada vez que él se acercaba, la abrace por la cintura y la cargue, camine hasta el auto que prendí y la escondí allí dentro, entre con ella y puse el seguro.

-Jackson...- dijo en un susurro lleno de miedo.

-Shhh.- dije abrazándola, ella se escondió en mi pecho, mientras yo miraba por la ventana y acariciaba su cabello.

Mi padrastro miró la piedra y contó las llaves, miró hacia todos los carros y volvió a colocar la piedra, se dio la vuelta y se fue lentamente.

-Ya.- susurre y ella se separo de mi, se peino un poco y miró por la ventana.