Jackson Williams.
-Ja, la tengo loca.- dije hacia Emma.
-¿Para qué la quieres?- dijo enojada.
-Para lo que las quiero a todas.- dije simple.
-Eres un asco y ella no va a caer tan fácil.
-Eso lo veremos.
-Si no la quieres para algo bueno ¿Por qué no la dejas en paz?
-Porque me gusta, así de sencillo.
-No la conoces.
-Yo estoy diciendo que me gusta, pero no ella, sino su cuerpo y su carácter, no me importa conocerla si solo será una noche.
-Eres un imbécil de primera, ella es buena chica.
-Nah como quieras.- subí a mi habitación y me encerré allí.
Megan, me interesa de mala manera, pero me la pone muy difícil, será un reto para mi; solo una vez en mis dieciocho años, me he enamorado y no me interesa volver a hacerlo, la vida me enseño como es esto del amor y no me gustaría por lo más mínimo volver a sentir lo que sentí aquella vez o revivir mi pasado.
La secretaria de la directora es amiga de mi madre, así que por medio de ella, conseguí el número de Megan.
Yo.
Niñata... sinceramente, tus palabras me conmovieron.
No tardó mucho en responder.
Niñata.
No me digas...
Yo.
No fue mi intención alejar a tu bello novio.
Niñata.
Desde acá se siente tu sarcasmo, y no es mi novio... no conozco a nadie aquí.
Yo.
Puedo ser un comienzo.
Niñata.
No gracias idiota.
Se desconecto y me reí, esa chica... era todo lo que alguien quiere y no se si estoy mal por querer solo una noche con ella, pero... es lo que quiero.
Megan Ash.
-Amiga... por favor.- dijo preocupada Emma.
-Emma no soy estúpida.- replique.
-Lo se amiga, pero ese chico puede ser muy convincente, y...- le coloque una mano en la boca, cuando entró Jackson a mi cuarto.
-¿Hablando de mí?- Rodé los ojos y le quite la mano de la boca a Emma.- necesito del servicio de tu baño.- señalé una puerta y camino dentro de mi habitación, siguió derecho y entró al baño.
-¿Por qué lo dejas pasar?
-Solo hay dos baños.- recordé.
-Esto es mucho peor que vivir con mi hermano.- me reí.
-Es tierno.
-Claro... lo dices porque fueron novios, y aun se gustan ¿No?- negué.
-Es buen chico.
-Porque no es tu hermano.
-Los baños de chicas son muy extraños.- dijo Jackson saliendo de mi baño.- ¿Puedo hacer arreglos?
-No.- dije seca.- es mi baño.
-Entonces no dejes a la vista esto.- me mostro mis bragas de encaje negro y mi cuerpo se estremeció de la tremenda pena que me dio, Emma se levanto y se las arrebato.
-No puede ser.- dije en un susurro, Emma me las entregó y las guarde, la risa ronca de Jackson sonó por toda la habitación y lo miré mal.- ¿No tienes algo más interesante que hacer? Como por ejemplo follarte a alguien.- dije arrogante.
-Emmm, no, no tengo más chicas para eso.- dijo arrogante.- Tal vez... si tu quieres...- lo interrumpí con una cachetada.
-Juro que si vuelves a decir algo así, te rompo la cara, idiota.- dije enojada, me canse de esto.
-Pero chica.- dijo tocándose la cara.- Solo fue un comentario.
-Fuera.- ordene.- ve y cógete a una más fácil.- me miro.- escúchame, solo vas a venir a esta casa a dormir, a comer y a arreglarte para la escuela, de otra manera, no entraras a esta casa.- dije furiosa.
-¡Estoy pagando el doble!- grito.
-¡Eso a mi me la suda!- grité hacia él, Emma me tenía agarrada del brazo muy fuerte, sabía que en cualquier momento iba a destrozarle la cara.
-Te la suda.- dijo asintiendo con la cabeza varias veces, se acercó hasta mí y quitó la mano de Emma de mi brazo.- Bien niñata.- susurro muy cerca de mis labios, salió de mi cuarto y solté el aire pesadamente.
-Podemos quitarle las llaves.- susurro Emma, me tire en la cama y cerré mis ojos.
-Es un idiota, lo odio.- susurré, Emma salió de mi habitación y se encerró en la suya, necesitaba estar sola.
-Niñata.- la voz gruesa de Jackson sonó a través de la pared.
-Lo que me faltaba.- susurré enojada.- ¿Qué quieres?- dije alzando la voz.
-¿Quieres ir a una fiesta?- rodé los ojos.
-No me jodas Jackson, mañana tenemos escuela, y no gracias, contigo ni a la esquina.
-¿No sabes romper reglas?
-Jackson ya dije que no.
-Lastima.- abrió abruptamente la puerta y pegué un salto.- te llevaré arrastrada.- me agarro de los pies y me jalo hacia él, me moví, pero fue en vano, ese chico me doblaba en tamaño, me cargó como un costal de papas dejándome ver su tonificado trasero.- Que buena vista.- dijo bajando las escaleras.
-Si no te callas, te dejo sin huevos.- dije amenazante.
-Bien.- abrió la puerta y salió conmigo cargada.
-Se que pretendes hacer con que vaya a una fiesta Jackson, pero eso conmigo no funciona.- dije mientras él me metía en su auto, me coloco el cinturón y luego se subió él.
-¿Por qué no dejas de ser tan amargada y solo te diviertes?- rodé los ojos y mire por la ventana, Jackson emprendió el camino a no se donde, mientras yo tenía mi vista perdida en la calle.- ¿Bebés?-
-Soy menor de edad.- Jackson se burló.
-¿Es enserio?- asentí.
-Dentro de una semana soy legal.- le dije sin mirarlo.
-Ya... entonces esta será tu primera noche bebiendo.
-No pienso ponerme ebria.- lo mire y él sonrió.
-A mi nadie me dice que no.- eso no lo podía contradecir.- ¿Eres virgen?- lo mire mal.
-¿Y eso a ti que?- dije enojada.
-No lo sé... nos estamos conociendo.- me reí.
-No te diré nada.- mire hacia la ventana.
-A ver... yo no soy virgen, ya soy legal, y si bebo.- me reí más y lo mire.
-Dime algo que no sea obvio.
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Te odio idiota ®
RandomÉl... un fuckboy, con un buen físico, arrogante, sexy, galán; con lo que todas las chicas sueñan, todas desean tan solo una noche con él; tiene un pasado oscuro y lo oculta con lo que ahora es, nadie sabe de eso, solo sabe lo que él es, lo que quier...