HEATHER ☆JotaKak ☆

Nobody; Capitulo 2 ⋆｡˚ ⁀➷

A la mañana siguiente siguió la misma rutina y así fue durante toda la semana.
Kujo, estaba en su asiento prestando atención a la clase, mientras miraba de reojo a su compañero de banco.

— Deja de mirarme.— Comentó Kakyoin en tono gracioso. El peli negro solo trono sus labios así posando su mano en la cabeza del otro para darle pequeñas palmadas.

— Ni quien, te quisiese mirar.— Embozo una sonrisa de lado, volviendo a sus asuntos.

El chico de cabello pelirosado, todo los días trataba de entablar alguna conversación larga con su compañero, era en vano pues el ajeno no hablaba mucho y si hablaba eran solo cortas y secas.

Era la hora de receso, Noriaki comía solo detrás del tronco de un árbol de cerezo. No sabe como sucedió pero cuando despertó lo primero que miro fue a Jotaro tratando de recogerlo, noto un poco de sangre en su nariz.

—No te alteres, te desmayaste y tu nariz comenzó a sangrar.— Sacó de su bolsillo un pañuelo y se lo dio a su compañero para que pudiese limpiarse.

Por otro lado, Kakyoin se sentía desconcertado no sabía por qué se había desmayado pero todo había pasado, aunque se sentía apenado por haber llenado de sangre el pañuelo de Kujo aunque el se lo hubiese dado.
Al terminar las clases, Jotaro iba en camino a su casa cuando de frente se topó a su abuelo.— ¿Qué haces aquí, viejo?.— Joseph lo abrazo, algo que a su nieto no le gustaba, odiaba los afectos amorosos.

Se soltó del vergonzoso abrazo, ambos se dirigieron a casa, Holly los estaba esperando con una rica comida.

—JOTAROOOO.— Gritó Holly. Este enfadado solo frunció el ceño.— Cállate maldita escandalosa.—

El señor Joestar, solo miro mal a su nieto.— ¡HOLLY! no dejes que te hable así — El joven solo se subió a su habitación a estudiar.

Kakyoin al llegar a su casa, como era normalmente no había nadie a si que se dispuso a meter a la lavadora, el pañuelo que le habían prestado, lo colgó para que se secara.
Últimamente su cabeza daba vueltas y pensaba mucho en Jotaro Kujo aquel hombre misterioso que era tan reservado en todos los sentidos de alguna manera, el trataba de entablar una conversación con el chico.

Llegó la noche, hacia demasiado frío salió a comprar algo pues necesitaba sentirse tibio, encontró un mall cerca donde vendían café. Al girarse noto que justo ahí estaba el peli negro, sonrió pero se percató que no venia solo estaba acompañado.
Se colocó a lado de el.— ¿También, tienes frío?

El ajeno, solo se giró.— Deja de seguirme.— Holly le sonrío a Noriaki. El peli rosado noto como la familia se iban.
Parecía que la madre de su compañero lo quería demasiado, el por lo personal nunca había sentido un amor maternal carecía de eso y estaba acostumbrado, cree que es algo que no le afecta tanto.

Pago su café, antes de ir a casa decidió ir a un parque, aunque la noche era fría no pretendía ir a casa pues no había nadie y era mejor estar aquí que allí.

—¿Es tu amigo, Jotaro?.— Preguntó su madre con una sonrisa la cual era su característica más destacada de ella. El joven solo negó, solo habían cruzado unas cuantas palabras ¿Por qué lo consideraría su amigo?