Mi alma gemela {Narry Mpreg}

Almas gemelas

"Te amo para amarte y no para ser amado, puesto que nada me place tanto como verte a ti feliz." George Sand.

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Harry no recordó cómo encontró el camino de vuelta a su casa, pero se encontró parado en la puerta tocando con cuidado. Cuando Liam la abrió, su mirada castigadora fue sustituida por una mirada de preocupación.

"Creo que metí la pata." Harry murmuró por lo bajo, apoyado cansinamente en el marco de la puerta. "Creo que realmente metí la pata."

"¿Qué pasó?" Liam le hizo entrar en la casa. "¿Estás bien?"

"Había... había un muchacho, él era agradable... y..." Harry se frotó la cabeza dolorida. "Yo quería comer, pero era muy tarde y luego empecé a sentir este dolor..."

"¿Dolor?" Liam preguntó en un susurro.

A Harry se le nublo la vista de nuevo, y hubiera caído al suelo de no ser por Liam, quien le atrapo justo a tiempo. Harry enterró su rostro en su cuello.

"Cálmate." Liam le frotaba la espalda de manera reconfortante. "Estás en casa. Ahora estás bien."

"Nunca he estado tan cerca de perder el control." Susurró Harry, serpenteando sus brazos alrededor del cuello de Liam. "Sentí como si fuera a desmoronarme..."

"¿Cuándo?" Liam le pregunto a toda prisa. "¿Cuando te sentiste así?"

"No lo sé, él me dijo que lo mordiera, y entonces me volví loco. Mis colmillos luchaban por salir, y yo quería morderlo." Admitió.

"¿Qué? ¿Él sabe lo que eres?" Liam entro en pánico.

"No, no." Harry se apresuro a explicar. "Quiero decir, el quería que lo mordiera pero de una manera sexual."

"Harry, te dije que no..."

"¡Él era muy sexy! Lo único que quería hacer con él era alimentarme y luego volver a casa, pero después no sé, nunca me he sentido así antes." Harry se aferro aún más a Liam. "Por favor, no te enfades conmigo. Es lo último que necesito."

"No estoy enojado." Liam dijo en voz baja, mientras acariciaba su cabello rizado. "No estoy enojado contigo."

Liam sabía lo que había sentido Harry. Él mismo se había sentido de esa manera en el pasado. Y el hecho de que le estuviera pasando a Harry ahora, le hacía sentir más preocupado.

"Pensé que era sólo porque no me había alimentado en mucho tiempo, pero sucedió tan de repente... yo solo..."

"Lo sé." Liam le seguía frotando la espalda. "Lo sé, Haz."

Harry sollozaba en silencio. "Sólo me llamas Haz cuando lloro...o algo así."

"Tuviste una mala noche, cariño."

"Esa sensación." Harry susurro. "Como si pudiera romperme en cualquier momento, y simplemente... matarlo."

"Sólo cálmate, ¿de acuerdo?" La voz de Liam era suave y calmada. "Ve a acostarte. Louis ha estado esperando por ti."

"Estoy tratando." La voz de Harry era desigual, en su intento de dejar de temblar.

"Estás bien." Liam le hizo callar.

"¿Louis está en la habitación?" Harry preguntó, descansando su frente contra el pecho de Liam.

"Sí." Liam asintió lentamente. "Él ha estado allí toda la noche."

"Entonces voy a dejar que él cuide de mí." Murmuró Harry, inclinándose para darle beso en la mejilla. "Gracias, papá." Sonrió débilmente ante la mención del apodo que Liam odiaba.