《$ιํກøρຮιํຮ》
Naruto, un chico que parece normal, pero que en realidad se comporta como un completo anormal, tiene dieciséis años de edad. Vivía de la vida como una fiesta a pesar de ser huérfano y ser excluido por todos por no ser como los demás. Na...
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» Izuku«
Naruto me había besado... Una vez más.
No sabía qué hacer y solo me llevé por mis emociones siguiéndole el ritmo. No debería de gustarme, pero reaccioné de una manera inexplicable. Sus labios me atrapaban, me hacían delirar como si estuviera drogado. Me sentí preso de sus... ¿Labios? Suena muy raro, hasta a mí me parece extraño. No sé que esperaba con Naruto porque otra vez fui besado por él, ¡Se supone que solo deberíamos ser amigos para que yo no tenga carga de consciencia!
Ya no importaba todo lo que pensara, porque ahora estoy siendo besado continuamente por Naruto. Por más que me queje, no puedo moverme. Me siento muy nervioso y me da miedo que esto me esté gustando. Debería preocuparme por eso. Si Tōshii me viera de esta forma tan vergonzosa me acosarían durante el resto de mi vida. La pregunta principal es; ¿Por qué siempre tiene que pasar algo raro entre nosotros? Somos hombres, yo no soy una chica, ¿Por qué le gusto yo? ¿Por qué dice que le estoy gustando demasiado? Todo es tan confuso y siento un viento frío en mi estómago, no sé, mi estómago se siente como si tuviera una gran burbuja fría que cambia a calor y así sucesivamente.
Estoy pensando en todas las consecuencias de mis actos mientras veo como mis labios y el de él se mueven sin pudor. ¡Esto está mal!
Oh no, me tomó de la espalda; Me está acercando más a él. ¿¡Y si termina en actos sexuales!? Espera... ¡Somos hombres! Es imposible hacer eso, o ¿Sí? No, no, no. ¿¡En qué me he metido!?
Esta vez los besos son más intensos y estoy verdaderamente asustado por lo que pueda pasar después. No es que yo sea virgen, bueno, sí lo soy, pero no es el punto. Me falta aire, tengo que parar, no aguanto y Naruto aún me sigue ahogándome con ellos y dejándome lelo. Mi cabeza se está quedando blanca y eso no es una buena señal.
Puse mis manos en sus hombros para alejarlo, casi sin fuerza porque una jodida parte de mí quiere seguir. No puede ser, ¡Me estoy volviendo maricón! ¿Qué dirá mi mamá respecto a esto? Mi mamá no me ha educado así y estoy a punto de revolcarme con un hombre. ¡Esto se oye tan desvergonzado y yo solo tengo quince años! ¿Cómo escapo de esta? ¡Me cago en la puta!
—Naruto... — Nombré con una voz temblorosa.
Se separó de mí y vi que una línea de saliva unía nuestras bocas. ¿¡Qué mierda!? ¿¡En serio hicimos un beso francés!? ¡Literalmente me estaba comiendo la boca! Cómo llegué a esto...
—Creo que me pasé un poco, perdón. — Sonrió tímido.
Sí, un poco o no crees que ¿¡Te pasaste demasiado!? ¡Por qué nunca me puedo quejar verbalmente y solo insulto en mi cabeza! ¡Unas ganas de mandar todo a la verga y no puedo! No, a nadie le importa lo que pienso yo, a nadie le importa si tengo miedo o algo parecido. A nadie putas le importa que no quiero ser gay para no decepcionar a mi mamá y a la gente que me rodea. ¡Estoy hasta los cojones de los sentimientos que tengo con Naruto!
