. ☁︎ ࣪ . 𝗱𝗲𝗲𝗽 𝘄𝗲𝗯 ⋆ chanlix/felix harem ‹3

Chapter thirteen

❝ ¿Así de maravilloso se siente el amor? Es que joder, siento las malditas mariposas en el estómago cuando le muerdo los labios hasta sangrar y siento un placer inexplicable cuando lo hago llorar.❞

Seungmin alzó su cabeza encontrándose con el rostro sonriente de Han Jisung, Felix se estremeció ante el hombre que rondaba por su casa anteriormente acosando con sus cartas.

—Hola, manzanita prohibida. He pecado para tenerte.

Felix comenzó a hiperventilar cuando notó que el hombre grisáceo se acercaba a ellos de manera peligrosa, negó efusivamente. No quería irse con ese tipo, tampoco era como si quisiera quedarse con Seungmin pero particularmente Han le hacía sentir escalofríos. Más que cualquier otro de los tipos, era aterrador.

—No dejes que él me lleve, Seungmin. —Susurró el pelirrojo con temor, el castaño negó rotundamente mirando nuevamente a Jisung.

—¿Qué quieres, Han? No te lo entregaré si eso es lo que buscas.

—¿Y quién te lo está pidiendo, Kim Seungmin? Estás siendo muy maleducado, le diré a tu mamá.

—Tú eres el maleducado por no pedir las cosas.

Jisung fingió estar apenado y hizo un ademán de disculpa.

—Tienes razón. ¡Lo siento demasiado, Kim Seungmin! ¿Puedes dármelo amablemente, por favor?—Cuestionó pasándose una mano por las hebras grisáceas que lo hacían resaltar, se humedeció los labios unos segundos y luego esbozó una descarada sonrisa. —Es mejor para ti. Además si me lo entregas ahora, te invitaré a un rico buffet.

—Si claro, yo seré el buffet. —Le respondió Seungmin con enfado, Han río con ganas.

—Bien, lo admito. Me descubriste.

—¡Déjate de juegos, Han!—Gritó Lee desde la puerta, a un lado de él se encontraba Woojin con la nariz sangrante por el anterior golpe de Seungmin.

—¿Escuchaste? Esa es mi señal, no quiero ser grosero pero en serio tengo que obtener ese fruto prohibido o Adán se pondrá histérico.

—No creo que sea Adán. —Le dijo Seungmin entre dientes, Felix miró a través del hombro a Jisung que estaba a nada de enfadarse.

—Lo que sea, entrégame al niño ahora. —Ordenó duramente, al parecer si existía alguien que pudiera hacer enfadar al caníbal y ese era Seungmin.

—No te daré nada, ya te lo dije.

Jisung sacó una de sus navajas del pantalón y se mordió los labios mirándole todo el cuerpo a Seungmin.

—¿Alguien te ha dicho que estás bueno? Aunque tus muslos no están tan rellenos como los de la manzanita prohibida.

Seungmin apretó la mano de Felix y intentó avanzar rápidamente, Jisung frunció el ceño tomándole del cabello bruscamente.