Como la última vez..
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---Saca a todos estos borrachos de aquí, parecen bultos de papas tirados en el suelo.-- Taehyung bufó luego de arrojar la última botella vacía en una bolsa de basura.-- me estoy muriendo del sueño.---
Ya eran las 06:00 a.m y la fiesta llegó a su fin, la mayoría se fue a las 05 pero típicamente los amigos de Jungkook debían quedarse a fastidiar y continuar bebiendo mientras contaban sus penas como los malos borrachos que eran.
---Es increíble que yo tenga que cargarlos hasta el carro y llevarlos a sus casas.-- Namjoon rodó los ojos luego de haber empujado a Mingyu a un costado.--- ¿desde cuando yo tomé el papel de líder? Ese era Jeon.---
--- Lo tomaste desde el día que decidiste apostar con Jackson sobre si Jungkook y Lisa saldrían, al final se convirtieron en pareja y Jackson ganó el juego, por ende tú y todos los demás, a excepción de Yugyeom, son sus esclavos y deben hacerse cargo de él a menos que quieran pagarle una multa.-- soltó tranquilamente observando al pelirosa, quien enseguida bajo su mirada con vergüenza.--- No creas que no lo sabía, pero tranquilo, no se lo diré a Jungkook ni a Lisa, sólo llevate a estos ebrios.--
---Ugh, genial.--- espetó entre dientes.-- ni siquiera Hyuna está aquí, ella y todas las chicas se fueron y me dejaron a los idiotas de sus novios..---
Taehyung soltó un bifido.
---Solo Jeongyeon que olvidó a Eunwoo, Solar que ni siquiera tiene algo formalizado con Jackson e Irene que no piensa volver con Sunho, el resto no tiene ningún enredo.--
---Según tú.---
---Según yo.-- dijo encogiéndose de hombros y finalmente se dio media vuelta para dirigirse a las habitaciones de la finca, Namjoon se llevaría a sus amigos y el salón estaría vacío y sin botellas al fin del cabo, Taehyung necesitaba dormir.
Luego de una corta caminata por los predios que aún eran cubiertos por la oscuridad de una fría mañana, Taehyung llegó a la habitación donde iba a dormir. En esa finca había bastantes en realidad, pero esta vez no se quedaron nada más que él, Rose, Jungkook y Lisa, quienes seguramente también estaban durmiendo en el cuarto del lado.
Lo primero que sus ojos visualizaron al entrar fue a ese dulce rostro que se encontraba perdido vagando en algún sueño, con esa cabellera marrón desparramada por toda la colchoneta y leves ronquidos saliendo por sus labios cerezas.