Kimetsu no Yaiba one shots (pedidos abiertos)

Sanemi Shinazugawa

Palabras: 980

Esto es años antes de que apareciera Tanjiro

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Todos sabían tus sentimientos hacia el pilar del viento, menos él. Por más que intentabas conquistarlo con indirectas no funcionaba.

Eras su aprendiz, desde que te había salvado de unos demonios quisiste ser como él. Primero fue admiración que se convirtió en amistad y finalmente te enamoraste, pero no contabas con que el peliblanco tenía a alguien a quien amar, y no, no eras tú.

Un día finalmente quisiste decirle lo que en verdad sentías, los buscaste por toda la finca pero al no encontrarlo salirse en su búsqueda.
Cuando por fin lo encontraste, viste una escena que no querías ver. Tu maestro y amor platónico se estaba besando con la pilar de las flores, Kanae Kocho.

Claro, ella era mucho mejor que tú, era más bonita, cuerpo perfecto, incluso podría enamorar a cualquiera si así lo desea, pero no te ibas a dejar caer por eso.
Regresaste a la finca para seguir practicando con la espada como si no hubiera pasado nada y cuando él llegó lo fuiste a saludar como siempre lo hacías.

- buenos días, Shinazugawa-sensei

Sanemi- ya te dije que sólo me llames Sanemi- te regañó

- sí, lo siento. Por cierto cuando fuí a mi última misión le traje esto- fuiste corriendo a tu cuarto para regresar con ohagi, su comida favorita- aquí tiene

Sanemi- gracias- dijo secamente- he escuchado que te gusta alguien, ¿Es cierto?- esa pregunta hizo que te sintieras nervios y empezaras a temblar

- eh s-sí, pero no es nada importante

Sanemi- puedo saber quién es?,

- b-bueno es...- empezaste a pensar hasta que por fin hablaste- es Giyuu-san

Sanemi- ese idiota?- preguntó molesto

- no tiene nada de malo

Sanemi- ¿Cómo te puede gustar ese maldito emo?- te agarró de los hombros

- Sanemi, con todo respeto esto no le importa, yo puedo enamorarme de quien sea- le respondiste saltando su agarre- si me permite seguiré entrenando- saliste dejándolo solo- idiota, ahora sí te preocupo.

Desde ese día ya no hablaban como antes, él iba más seguido a la finca de Kanae mientras tú entrenabas. Éste no va a ser como otras historias donde te vuelves fría, no. Tú seguiste siendo la misma que siempre, no ibas a dejar que nadie te cambie por amor.

Pasaron sólo días para que pudieras crear tu propia respiración, te sentías demasiado feliz, tanto que ibas a decirle a Sanemi si no estuviera con la pelinegra así que los dejaste como un secreto.
Fuiste hacia la finca del patrón el cuál se enteró y te convirtió en pilar, así empezabas un nuevo camino por recorrer. Regresaste a la finca del viento y como siempre, él no estaba así que sacaste todas tus cosas para irte de ahí no sin antes dejar una carta de agradecimiento.

Todos siguió con total normalidad hasta que tu cuervo te avisó que la chica que se había robado el corazón de tu ahora compañero había fallecido, al escucharlo no dudaste en ir con Sanemi el cual estaba destrozando todo.

- Sanemi- lo llamaste y volteó a verte- lo siento- fue lo único que dijiste

Sanemi- no necesito tu lástima, es más, ¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar con tu noviecito?- preguntó enojado, pues cuando te convertiste en pilar pasaste más tiempo con el pilar del agua

- no es lástima, sólo quiero saber cómo estás

Sanemi- ¡¿Te parece que estoy bien?!- te gritó- acaba de morir Kanae y quieres que esté bien?! Piensa un poco TN!!

- vine para poder hacer que supere esto y así me responde?!- dijiste ya harta de sus gritos- sólo quiero quiero que esté bien porque me preocupo por usted!!

Sanemi- ahí está Giyuu, ve a ayudarlo también- dijo enojado- de seguro él es más importante que yo no?

- Giyuu nunca me gustó- respondiste- el quien me gustaba eras tú- te vió sorprendido- pero después supe que estabas enamorado de Kanae, así que dejé de intentar enamorarlo, ¿Sabe qué? Esto ya no tiene sentido, mejor me voy- y antes de que él te agarrara te fuiste.

[...]

Los años pasaron como si nada, tú seguías siendo la misma chica, Sanemi te había pedido perdón y claramente lo disculpaste.

Les habían informado que un cazador estaba viajando con un demonio y los habían agarrado para darles un juicio.
El cazador despertó y empezó a buscar a la demonio que era su hermana, él se iba a levantar, pero Sanemi apareció con la caja, él iba a atravesarlo, sin embargo no pudo ya que le quitaste dicho objeto.

- no deberías hacer eso Sanemi, al patrón no le puede gustar- sonreiste

Sanemi- dámelo TN, es un demonio y necesito matarlo

- ohh~ un demonio, ¿Cómo se llama?- le dijiste al chico pelirrojo

X- Nezuko- contestó

- nee~ Nezuko-chan, ¿Puedes escucharme?- pegaste tu oreja a la caja para escuchar mejor y sí lo hiciste, escuchaste dos golpes- me respondió- dijiste contenta

Sanemi- TN, aléjate de eso puede atacarte- tú le hiciste caso omiso y te pusiste de cunclillas frente al cazador

- confío en ti- le susurraste mientras ponías la caja a su lado

[...]

Sanemi- no entiendo cómo pudiste hacer eso, ¿Qué hubiera pasado si te atacaba?

TN- confío en ellos

Sanemi- ¿Y por eso tenías que poner tu vida para que confiaran en ellos?

TN- claro, sé que jamás lo hará, si no confías en ellos entonces confía en mí- sonreiste y de pronto sentiste como sus labios chocaban con los tuyos a lo que abriste tus ojos

Sanemi- te amo- susurró cuando se separaron- empecé a amarte desde que ibas conmigo para ver si estaba bien por la muerte de Kanae, sé mi...- ésta vez tú lo besaste sin dejarlo terminar

TN- yo igual te amo Sanemi, nunca dejé de hacerlo

Sanemi- entonces sé mi novia- te agarró de la mejilla- ¿Quieres?- asentiste- prometo amarte hasta que muera

- sé que lo harás- lo abrazaste