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Puedes estar con cualquiera, pero te ves mejor conmigo.
Eran las nueve y treinta cuando hice caso a mi despertador. Me levante sobresaltado al ver la hora, debido a mi auto estaba en el taller tenía que despertarme más temprano.
Deje escapar un largo suspiro mientras apoyaba contra el respaldar de la cama con sueño, ayer me había dormido tardísimo gracias a un trabajo de la universidad y sabía que no podría mantenerme despierto.
Me di una ducha rápida y me aliste para ir a mi clase.
Un bostezo salió de mis labios cuando baje del auto, aún faltaba como veinte minutos antes de que comenzara la clase, así que fui a la cafetería y compre un café bien cargado para despertarme.
Esta era la primera vez que me sentaba en la cafetería de la facultad de música, por lo general siempre estaba en facultad de negocios internacionales o en la Abogacía.
Le di un sorbo a mi bebida y me sentí observado.
En la mesa continua estaba dos chicas susurrando entre ellas mientras tomaban algunas fotos y sonreían.
Deje escapar un largo suspiro y fije mi vista en mi teléfono.
Seung hyung me había envía la lista de todos los nuevos integrantes del club de música y ahora teníamos que preparar el evento de iniciación, este año se iba a realizar un viaje a la playa por una petición firmada que exigieron los hyungs de cada departamento y que el Directo acepto solo por el desempeño que había tenido los club el otro año. Tanto en el concurso de música como en los juegos deportivos.
Un viaje no sonaba nada mal, sobre todo cuando podríamos celebrar nuestro aniversario en la playa.
El timbre del cambio de hora sonó y me levante para ir a mi clase. La mañana se pasó tan rápido entre clase y clase que apenas tuve tiempo de nada. Estaba tan cansado que mis músculos se sentían tan adormecidos y no me respondían.
Entre a la sala de música y ya que estaba vacía me acosté en uno de los sillones y cerré los ojos diciéndome que despertaría para ir a mi próxima clase. Eso no sucedió, mi cansancio era tanto que me quede completamente dormido.
Me desperté por la voz molesta de Seung hyung quien estaba despertándome. Restregué mis ojos y me enderece en el sofá.
— ¿Qué hora es? — pregunte alarmado.
—Doce en punto.
Maldije en voz baja por haberme perdido dos clases
—No creo que te dejen entrar a clases, porque no te sientas y hablas con hyung.
