¿𝑪𝒂𝒇𝒆 𝒀 𝑷𝒂𝒔𝒕𝒆𝒍 𝑫𝒆 𝑴𝒐𝒓𝒂𝒔? [𝑻𝒂𝒎𝒂𝒌𝒊 𝑨𝒎𝒂𝒋𝒊𝒌𝒊 𝒀 𝑻𝒖]

✨ 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 9 ✨

— ¡Amajiki-Sempai! — La chica se encontraba abajo de algunos escombros, no la habían aplastado del todo pero aún así su pierna derecha estaba atascada y no podía sacarla.

Si bien Tamaki había logrado noquear a los tres villanos frente suya, aún así destrozó el lugar sin percatarse de su compañera, este camino donde ella y con mucha vergüenza la ayudó a quitarse los escombros.

— Disculpame. . . Lo siento muchísimo, soy un inútil — Hablo viendo como la pierna de la chica sangraba, ella lo observó.

— No tienes por qué disculparte, la inútil soy yo, tu los noqueaste yo solo te estorbe — La chica bajó la mirada, por primera vez los pensamientos de la chica estaban ocupados de malos pensamientos hacia ella.

Se sentía inútil por no haber podido ayudar a su sempai, justamente se sintió un estorbo en esos momentos, apretó los puños llena de enojo, a pesar de ya estar a un año de graduarse, aún no lograba superar el miedo de enfrentarse a villanos fuertes.

Una mano timida se poso delicadamente sobre la de ella, se relajo un momento para observar a Tamaki, quien con su rostro tranquilo le inspiró calidez, sonrió débilmente y al estar cerca se lanzó a él en un abrazo, por estar pensando cosas negativas no se había fijado en el, el estaba lastimado, y había terminado muy herido y cansado posiblemente.

— Perdoname Amajiki ¿Se encuentra bien? — La chica se separó un poco, pero al ver de cerca el rostro del contrario se separó de inmediato y sonrojada observó otro lado.

Si bien sabía que el era un chico muy atractivo, nunca había estado tan cerca de él, pudo observar mejor sus facciones, sus ojos, su piel, parecía simplemente un dios griego, y cabe decir que la chica se lo imagino como si el fuese uno.

— Me encuentro bien. . . Pero tu. . . Pierna — Este la observó y ella igual — ¿Podrás caminar?

La chica intentó levantarse del suelo, y al ver cómo ella sola fracasa a Tamaki decidió ayudarla, si recordaba bien, afuera de la mansión estarían algunas ambulancias junto a algunos policías.

Ayudó a la chica a levantarse para después pasar sus manos por sus piernas y su espalda cargando la estilo princesa.

— ¡Amajiki! — Esa acción tomó desprevenida a la chica quien nuevamente se sonrojo al ver más de cerca el rostro del azabache.

¿Que le estaba sucediendo hoy?

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¡Hola y adiós!

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