The University //Sasusaku, Naruhina, Saino, Shikatema, NejiTen//

Movimientos

-¡Naruto-Kun!- el nombrado se sobresaltó con el grito de Shion pego cerca de su oreja. Confundido la miro para saber qué era lo que quería. Era poco decir que lo había dejado sordo.

-¿Que necesitas, Shion?-le pregunto, sobándose las sienes, el grito seguía retumbándole en la cabeza.

-Vengo a decirte que estaré de su lado.-dijo sonriendo. El Namizake a miro sin entender lo que estaba hablando.

-¿De nuestro lado?-Naruto seguía desconcertado- ¿Qué lado?

-Por favor. Todo el mundo se enteró de lo que paso con Sakura-San. No me digas que eres el único que no lo sabes.

Ahí Naruto lo entendió.- Ah eso. Está bien, si quieres jugar para nuestro equipo estas admitida.-El rubio sonrió abiertamente.- Pero eso sí. Todo lo que decimos entre nosotros muere acá, ¿Se entendió?

-Se entendió.-Toda la situación a ella le había venido como anillo al dedo. Hacerse pasar por la niña cooperadora y buena le traería grandes beneficios con el rubio.

"Poco a poco te estoy sacando del juego, Hina-Chan"-Pensó divertida, ahora que estaría más cerca de él se encargaría de sacarla del camino, de alguna u otra manera tendría que correrse entre su relación con Naruto, aunque por el momento no hubiera una.

-Ahora.... ¿Me acompañas a comprar algo en el buffet?-Le ofreció el, su estómago rugía a tal punto que pronto se moriría del dolor.

Las esperanzas de Shion crecían cada vez más. Ni loca desperdiciaba esa oportunidad.

-¡Pues claro que sí, vamos!- lo tomo por el brazo y caminaron hasta el bufet, tomados de la mano.

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La clase de Química pasaba muy lentamente. Para Sakura todas las clases eran eternas. Y más las que no le gustaban. Esta era una de ellas, la química y ella no iban de la mano.

-Para mañana traigan todas estar formulas en un afiche.- El profesor escribía en la pizarra un si fin de consignas.- Si terminaron de escribir todo pueden salir.

No lo pensó ni dos segundos que preparo todo y salió disparada de la clase. La cabeza le iba a explotar si seguía con la Química. Lo que había hablado con Sasuke hace apenas dos días la había dejado pensativa.

Cada vez creía que tendría que estar más precavida cuando caminaba por la Universidad. Sasuke ya la había alertado de las futuras humillaciones que tendría, y cuando le dio los ejemplos más conocidos hizo que se estremeciera.

Pero nada podría contra ella. No señor. Ella era de hierro, una guerrera con todas las letras. Ningún pelo de nena y su grupete le bajaría su ego, al contrario, era ella quien les bajaría el ego.

En el camino se encontró con Ino. Hace unos días que no hablaba con ella, y eso que Vivian en el mismo departamento. Sakura veía que la rubia estaba en su propia burbuja, por lo que decidió mejor no molestarla. Sabía que Ino estaba metida hasta al fondo con ese amigo de Naruto, Sai. Mejor esperaría a que la rubia estuviera en mejor estado para ver cómo iban las cosas.

Cruzo los dos pasillos principales y se dirigió a su casillero. No prestaba atención a su alrededor, ella misma estaba metida en sus propios pensamientos. 

Coloco la clave y al abrir la puerta, una bomba de pintura rosa exploto en su rostro. Escupió un poco de pintura, asqueada paso su mano por su rostro, pero casi que era como un pegamento.

Y lo peor vino después; El timbre del receso resonó, las puertas de los salones fueron abiertas y los estudiantes salían en ella, viéndola de la mitad de su cintura para arriba, de color....rosa.

Algunos lanzaban carcajadas hacia ella o burlas y ofensas, pero las ignoro a todas. Respiraba rápidamente, nunca había sentido semejante humillación en su vida.

Con furia cerro el casillero y con su móvil llamo a Naruto. Le dejo un mensaje de voz, ya que el teléfono del rubio parecía estar apagado.

-Necesito que urgentemente te dirijas a las escaleras del cuarto piso ahora, por favor te necesito....

Corto y salió disparada para el lugar acordado.

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Naruto subía las escaleras rápidamente. El llamado de Sakura lo había dejado muy preocupado, por eso había dejado a Shion en el buffet y había salido corriendo a ver qué pasaba. A veces tenía que deshacerse de algunas cosas para ir a lo que realmente le importaba.

Pero al llegar lo menos que me imagino fue encontrar a Sakura de color rosa. Si bien el rubio se había acostumbrado a que su cabello fuera así, no esperaba ver su piel, su rostro, y su ropa del mismo color.

-¿Que te paso, Dattebayo?-pregunto acercándose a ella. Al acercarse vio que estaba llorando. Eso hizo que su corazón se oprimiera.

-Fueron ellos Naruto. ¡Me dejaron en ridículo!-chillo tratando de quitarse las lágrimas, peor eso hacía que la pintura se embarrara más en su rostro.- ¡Todos me vieron así! ¡Quede como una estúpida!

Naruto apretó los puños fuertemente, el no había podido hacer nada porque no estaba en el momento, si no estaba seguro de que los hubiese buscado e iniciado una pelea. 

-No te preocupes Sakura-Chan. Ellos recibirán su merecido.-la abrazo protectoramente, poco a poco su blusa se convirtió en agua, lagrimas que caían como cascadas de los ojos de la pelirosa.

Sakura lloro en su hombro.

El rubio miro al pasillo, absorto en sus pensamientos.

Se podía decir que la guerra había comenzado.

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Naruto, Sasuke, Neji, Shikamaru y Kiba se habian reunido en el gimnasio a decidir cuál sería su próximo movimiento. Todos ya estaban notificados del percance de Sakura, por lo que ahora les tocaba a ellos devolver al golpe, ahora discutían lo que harían, se organizarían y crearían un plan perfecto.

-Lo más conveniente sería dejar pasar un poco el tiempo....-sugirió Neji mientras miraba al techo,- Es mejor que se calmen las aguas y luego atacar. Asi los tomaremos desprevenidos.

-¡De eso nada! ¡Dejaron en ridículo a Sakura!-DIjo Kiba parándose. Sasuke y Naruto le dieron la razón.- Algo tenemos que hacer. ¡No podemos que el tiempo pase, ¿Tú viste las burlas que recibió?!

-¿Qué tal teñirles a todos el cabello? Sería algo muy bueno.-sugirió Naruto, aunque todos lo miraron feo. La idea era un desastre.

-Eso es estúpido.-dijo Sasuke.- Lo mejor sería agarrarlos cuando están en prácticas de fútbol.

-Nada de violencia. Lo último que queremos es que nos sancionen.-les hizo reflexionar Neji cuando vio que todos coincidían con esa idea.

-¿Entonces qué hacemos, Neji? ¿Quedarnos de brazos cruzados, así como si nada?

-No dije eso, pero si algo que no nos involucre directamente a nosotros. ¿Entienden lo que quiero decir?

-¿Tú dices actuar desde las sombras?-Sasuke había entendido lo que había querido decir Shikamaru.- Me parece bien.

-¡Esta dicho! ¡Desde mañana comienzan las batallas silenciosas!

Chocaron lo cinco en significado a estar de acuerdo.

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Hinata e Ino, junto con la ayuda de Temari y Ten Ten, ayudaron a Sakura a quitarse todo rastro de pintura rosa que podía quedar en su cuerpo.

Por las venas de la pelirosa corría sed de venganza, y de revancha. La tomaron por sorpresa en un momento en el que no estaba atenta, pero estaba segura de que se las devolveria, y se las devolvería de una manera cruel, tal como lo habian hecho con ella.

"No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti" Una frase que retumbaba en su subconsciente.

Ellos le habían explotado el rostro con pintura rosa, ella les explotaría el rostro con pintura rosa....