Entre nervios y noticias

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-Respira, exhala...respira, exhala...-se repetía la pelirosa, nerviosa, frente a la casa de los pares del moreno. Le temblaba todo, desde el cabello hasta los pies. 

El vuelo haba ido de lo mejor, con algunas de las interrupciones de Itachi, obviamente, pero mas allá de eso, todo había ido muy bien. Luego de eso, tomaron un taxi hasta el lugar e donde pasarían su fin de semana, y ahora estaban allí, aguardando a que alguien abriera la puerta. 

-Tranquila, Sakura. Mis padres no van a comerte.-le susurro Itachi, divertido. Sasuke lo miro molesto, pero no hizo nada. Estaba seguro de que, ahora que estaban en territorio de sus padres, si le hacia algo al mayor, el que terminaría perjudicado seria el. En la casa Uchiha, Itachi era muy sobrestimado, así que llevaba las de perder si le hacia algo. 

Cuando la puerta se abrió, detrás de ella apareció una mujer algo grande, de cabello negro como la noche, y ojos iguales a los de su novio y cuñado. La mujer parecía ser inofensiva, con una sonrisa en la cara y muy amable.

Eso la alivio.

Un poco.

-¡Hijos! ¡Sakura-Chan! Buenos días, queridos. Pasen, los estaba esperando.

Luego de darle un beso en las mejillas a los tes recién llegados, todos entraron en la casa, Itachi yéndose a la cocina y Sasuke tirándose en el sofá. Sakura siguió a su novio.

-Sasuke me ha contado cosas muy linda sobre ti, Sakura-Chan. Mi nombre es Mikoto, querida. ¿Como estas? 

-Muy bien, señora Mikoto. El viaje fue cansador, pero entretenido.-respondió la pelirosa, ahora mas confiada. 

-Me alegro. Y tu, Sasuke-Chan, ¿Como te ha ido?

-Bien, dormí casi todo el viaje así que creo que estuvo bien.-respondió Sasuke, tomando una botella de agua que se encontraba en la mesada.- ¿Fugaku donde esta?

-Esta arriba. Estaba hablando con uno de sus socios por teléfono, pero enseguida baja. Tiene muchas ansias de conocerte, querida Sakura-Chan. 

Sakura palideció. ¿Su suegro quería conocerla? Teniendo en cuenta sus antecedentes, Sakura cada vez temblaba mas. Si ya sabia que el padre de su novio era exigente y estricto, si quería conocerla debía ser por algo.  Tal vez quería ver si era apta para su hijo, o algo así...

Siguieron hablando, Mikoto era muy buena, le había contado anécdotas de cuando sus hijos eran pequeños, de las travesura de su "Sasuke-Chan", sobre cosas que a Sakura le causaban risa. Itachi se había unido a la conversación, burlándose de su hermano menor en todo momento que podía,  mientras que el menor intentaba meter la cabeza bajo la tierra de tanta vergüenza. 

Sakura se sentia mas relajada, a medid que pasaban los minutos se sentía mejor y mas segura. La hospitalidad de la familia de su novio la hacia sentirse mas cómoda y podes soltarse un poco mas.

En un momento, se oyeron pisadas que venían del piso de arriba. Por las escaleras apareció la figura del gran patriarca de la casa, Fugaku Uchiha. Sakura lo observo, reanudando sus nervios. El hombre tenia un porte seguro, decidido y voraz. Era alto, muy parecido a sus hijos, con el mentón cuadrado y rostro serio. Con solo verlo se daba cuenta de que era un tipo hecho y derecho. 

Fugaku se adentro a la sala, saludando a su familia, para luego acercarse a Sakura. Ese trance de tiempo la joven se decidía en que decir, que hacer. No seria fácil caerle bien al padre de su novio, era medio seguro que no la querría, pero haría el intento.

Sonrio y le tendió la mano a Fugaku, muy educadamente.

-Me llamo Sakura, un gusto en conocerlo.-trato de no titubear, y al parecer lo logro. El mayor acepto su mano y se dieron un saludo formal, pero este no dijo nada hasta unos segundo después.

-Gusto en conocerte. Mikoto me ha hablado mucho de ti. Ojala te sientas a gusto en los dias que te hospedes con nosotros.-sin decir mas, el hombre se fue y se sento junto a su esposa. 

Sakura suspiro, viendo como todos sus nervios se iban poco a poco. Por lo menos el tipo no la había echado. Algo era algo. 

-¿Quieren tomar algo?-pregunto súbitamente Mikoto para dejar pasar el momento incomodo. Como casi todos asintieron, se fue a preparar el te.

-Mientras vamos a dejar los bolsos arriba.-dijo Sasuke y se puso de pie, buscando as valijas. Sakura lo siguió.

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Despues de tomar el te, en una charla muy amena, cada uno fue a hacer sus respectivas cosas. Sasuke y Sakura decidieron dar un paseo, para que la pelirosa pudiera despejarse de tan cansador viaje. 

De un momento a otro, Sasuke empezó a reír. Extrañada, Sakura lo miro; ninguno había dicho y hecho nada que fuera para tomarlo con gracia. 

-¿Que te causa tanta gracia?

Sasuke la miro y siguió riendo.

-¡Sasuke!

Pero Sasuke seguía a las risas.

-Sasuke....-La voz de Sakura se volvió tenebrosa.- Dime o me vuelvo a la Universidad. 

-Es que...Es que...-Sasuke intentaba recomponerse.- Tu cara cuando entro mi padre fue tan cómica, tendrías que haberte visto Sakura...

- JA JA JA-Sakura rió falsamente. Sakura estaba por replicar, ero su teléfono sonó.- Hola Hinata, ¿como estas? ¿que pasa, por que lloras? 

Sasuke miro a la pelirosa con atención.

-Espera, Hinata, toma aire. ¿Quieres que nos veamos? Dime donde estas e iré. Aja, si, esta bien. De inmediato iremos.

Sakura colgo y oservo a Uchiha. 

-¿Que paso?

-No lo se, pero parece ser grave. Hinata no podía ni hablar. Debemos ir al Starbucks de la calle Independencia.

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Ya en el lugar, Sakura miro hacia todos lados buscando a su amiga. En una de las mesas del fondo del ligar, vio a la joven de cabellos negros, que tapaba su rostro con las manos.

Rápidamente se acerco a ella, con Sasuke a su lado.

-¡Hinata! ¡Por el amor de Dios!  ¿que te sucede?

Hinata levanto su rostro, lleno de lagrimas. Pero no hablo.

Siemplemente se acerco a Sakura y se colgo de sus brazos. 

-¿Hinata?-Sakura se estaba empezando realmente a preocupar.

La Hyuga respiro, y miro a un punto fijo. Después de eso, tomo la mano de su amiga, y después: la coloco en su vientre. 

Tanto Sasuke como Sakura comprendieron lo que pasaba.

Hinata estaba esperando un bebe.







The University //Sasusaku, Naruhina, Saino, Shikatema, NejiTen//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora