Angels like you [VMin]

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La habitación blanca se iluminó a causa del Sol molestándole en los ojos. Se despertó y observó una habitación blanca y no celeste como la suya.

Cuando cayó en cuenta de dónde se encontraba se asustó y aún más al ver a un chico desnudo a su lado.

Con cuidado levantó la cobija y miró que su compañero estaba desnudo de la parte de abajo también. Se cubrió la boca sorprendido y lo volvió a tapar.

No lo podía creer y como una película los recuerdos golpearon su mente.

—¿Qué te parece si subimos? hay demasiado ruido aquí —había preguntado el chico de forma coqueta.

—Sí, vamos.

Se jaló los cabellos, preguntándose por qué se dejó llevar, ni siquiera estaba tan borracho como para aceptar así de rápido.

Miró por un momento al chico a su lado y cuando lo vio abrir los ojos, entró en pánico sin saber qué hacer.

¿Qué sigue después de algo así? ¿Más sexo? ¿Una relación? ¿Amistad sincera? Fueron preguntas que se le vinieron a la mente.

—Ah…  sigues aquí —dijo tranquilo. Hubo un incómodo silencio para Jimin y el chico se levantó sin importarle estar desnudo. Buscó su ropa y le entregó a Jimin la suya.

—¿Quién eres? —preguntó Jimin sujetando su ropa.

—Taehyung, pero eso ya lo sabías —dijo sonriendo—. Ayer me hiciste muchas preguntas antes de hacerlo. Además no estabas ebrio no vayas a querer hacer un escándalo por esto.

Jimin lo miró con desconfianza.

—No recuerdo mucho así que no estoy seguro.

—Tomaste una droga después del sexo y después volvimos a tener sexo, quizás sea eso —Jimin lo siguió mirando con desconfianza—. Realmente no sería capaz de abusar de alguien ebrio, ¿te duele algo?

Jimin se sentía mal, su primera vez había sido con alguien que no conocía y no recuerda mucho sobre eso.

—Te creo —dijo y se vistió avergonzado. Tomó sus cosas y antes de salir le dio una mirada a Taehyung que la sintió eterna.

—No le diré a nadie si es lo que te preocupa.

—Gracias.

Jimin salió muy avergonzado.

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Jimin se sintió observado por todos en la escuela. No usó el celular el domingo ni en la mañana, se sentía un poco decaído.

Había preocupado a su mejor amigo, pero ya pasaría. Su problema era que no podía olvidar esos hermosos ojos que lo tomaron aquella noche. Cuando el recuerdo se volvió más claro, no pudo evitar pensar en él de manera romántica y eso le asustaba.

—No vuelvas a hacerme esto —dijo Hoseok tomándolo del brazo—. Pensé que te había pasado algo malo.

—Tú fuiste el que me dejó solo en una fiesta donde no conozco a nadie.

—Apuesto a que te divertiste —Hoseok suspiró—. Nunca sabes que puede haber en fiestas de esas.

—Me acosté con alguien —dijo de pronto. Hoseok se atragantó con su saliva.

—¡¿Tú?! ¿Con quién? —preguntó sorprendido, miró a Jimin bajar la mirada—. ¿Namjoon?

Jimin negó con la cabeza, la suerte no estuvo a su favor ese día.

—Fue con Taehyung.

—No lo conozco —dijo Hoseok serio.

—Ni yo.

Hoseok hizo un puchero y después esbozó una sonrisa.

—¿Te mirabas ardiente?

—Era perfecto para que Namjoon me mirara —Jimin miró al suelo y sintió sus ojos picar. Estaba tan molesto consigo mismo—, pero este chico me habló y comenzó a coquetearme, me hizo caer y acepté.

—Está bien —Hoseok acarició el cabello del rubio y peinó los cabellos de su frente a un lado—. Mi primera vez fue en un baño público y con alguien tocándonos la puerta.

—Qué vergüenza.

Jimin quiso dejar de hablar de su primera vez, así que mejor habló sobre la música de la fiesta y el ambiente. Había mucha gente que sintió mucha fricción mientras bailaba, quizás por eso había aceptado ir con Taehyung.

—Me hubiera gustado ir, pero mi mamá no me dejó. Tienes suerte de vivir con un compañero.

—Yoongi no hace mucho, en realidad se la vive estudiando. No se preocupa por mí, ni siquiera me llamó cuando no llegué a casa.

—Yo sí lo hago te llamé como veinte veces.

—Perdona por ignorarlas.

—No importa —Hoseok pasó su brazo por detrás de sus hombros y caminaron—. Me pregunto qué habrá hoy de almuerzo.

Jimin miró confundido a una chica que pasó a su lado que se le quedó mirando sorpresiva y a otro chico que se rió al verlo.

Un miedo le recorrió el cuerpo.

—¿Estás bien, Jimin?

Él negó con la cabeza. Se había esforzado tanto en pasar desapercibido en la escuela y todos estaban mirándolo y señalando.

Quiso correr, huir de toda crítica, burla o lo que sea que estaba pasando. Se soltó de Hoseok y avanzó directo al baño. Cerró la puerta con llave y se lavó la cara, sintió sus ojos picar.

Sabía lo que estaba pasando y eso le daba mucho miedo, ser visto de una manera y que las personas lo señalaran.

¿Y si su madre se entera? Estará en graves problemas.

¿Y si Namjoon ya lo vio? Su vida ya estaba acabada.

Lloró en silencio y después volvió a lavarse la cara.

Salió del baño dispuesto a aceptar cualquier cosa. Hoseok lo miró con preocupación.

—Los grabaron y lo subieron —dijo Hoseok apenado—. Lo publicaron en la página de la escuela una cuenta anónima.

—Lo supuse —suspiró.

—¿Por qué harían eso? Es decir, no está bien, deberías denunciarlo.

Jimin se encogió de hombros, quería desaparecer, ahora todos hablarían cosas de él, ni siquiera había dado su primer beso y en esa noche hizo de todo lo que jamás se atrevió.

—¿Jimin? —sintió escalofríos al escuchar esa voz tan encantadora. Se giró lentamente y miró al hombre detrás de él.

—Taehyung —dijo en un hilo de voz.

Quería vomitar, no se sentía bien. ¿Por qué estaba él allí? Su presencia le hacía arrepentirse de todo lo que se la pasó recordando el domingo.

—Estaba buscándote —dijo serio.