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Taehyung quería sentirse de nuevo normal, porque sobrepensar las cosas no era para nada normal en él.

Fue a casa de Jungkook sin importarle que este estuviera ocupado con algunas tareas.

—Le dejaré de hablar —dijo Taehyung.

Jungkook lo miró sorprendido, pero para nada le creyó. Prácticamente todas sus conversaciones tenían la palabra Jimin y ni hablar de sus actividades.

—Como digas —dijo llevando su atención al libro de historia del arte.

Taehyung no estaba recibiendo buenos consejos de su amigo que al parecer hacer su tarea era más importante que escuchar a su amigo.

—No tengo más que pensar —dijo indiferente y se fue, estuvo ignorando los mensajes de Jimin así como sus llamadas por todo el fin de semana. Se estaba tentando a contestarle, pero su fuerza de voluntad pudo más.

Había llegado el lunes, estaba seguro que Jimin lo buscaría y así fue. Jimin salió de su salón de clases rápido y se apresuró a ir al de Taehyung.

Jimin bailaba de un lado a otro intentando controlar la ansiedad, quería saber qué pasaba, no tenía idea de qué había hecho mal.

En cuanto salió,él se acercó y abrazó su brazo oliendo ese aroma que lo tiene completamente idiotizado.

—Tae —Taehyung hizo como si no estuviera allí—. ¿Hice algo mal?

Esa pregunta, Taehyung se había mentalizado muchas respuestas para cualquier pregunta, pero esa no la podía contestar diciendo que sí, porque Jimin no había hecho nada mal.

—Sé que hemos tenido buenos momentos y hemos reforzado la amistad demasiado, pero esto tiene que acabar —explicó Taehyung.

Jimin lo miró sin poder creérselo.

—¿F-fue por lo del viernes? —Jimin estaba comenzando a desesperarse—. No quise gritar esas cosas, sólo estaba cansando, pero sí me gusta, te lo juro. Yo… —Jimin se puso a llorar.

—Está bien, podrás volver con tus amigos, estoy seguro que Hoseok te recibirá con los brazos abiertos.

—No me hagas esto —Jimin se abrazó a Taehyung—. Por favor, eres todo lo que tengo. No tengo a nadie.

Taehyung suspiró, separó a Jimin y caminó lejos de él. Jimin se tiró de rodillas al suelo y se cubrió el rostro empapado en lágrimas.

Estaba haciendo una escena en medio de todos, pero eso no le importó. Taehyung ya no estaba para él, se había quedado completamente solo.

No podía dejar que terminara de esta forma, se levantó del suelo y corrió hacia su dirección. En cuanto lo vio estaba con sus amigos y lo abrazó con fuerza.

Taehyung suspiró pesado y siguió fingiendo como si no estuviera.

—¿De verdad vas a seguir dejándolo allí? —preguntó Jungkook, al ver que Jimin no se despegaba de Taehyung.

—Qué gracioso te ves —dijo Seokjin—. Debiste dejarlo en cuanto te dijimos.

Taehyung los miró molesto y dirigió su atención a Jimin quién estaba abrazándolo por detrás.

—Jimin, te dije que debemos terminar con esto porque esto te hace daño.

—No… —dijo con voz débil— yo te amo.

Tragó saliva, nadie le había dicho eso, ni siquiera su novio que alguna vez él amó.

—No me amas, no digas eso.

Angels like you [VMin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora