El Más Fuerte | BNHA / One Punch Man Fanfic

II

Recuperando uno de los sentidos, escucho un ventilador de techo mas nada, esta todo silencioso.
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Voy recobrando el conocimiento. Poco a poco empiezo a abrir los ojos con dificultad, cegado por la gran iluminación del lugar.

Estaba vivo, lo supe desde el momento en que pude ver, estaba acostado en una camilla, reconocía el olor a hospital y el techo de este.

Aliviado, vuelvo a cerrar mis ojos unos segundos solo para volver a abrirlos, pero esta vez con la cabeza apuntando hacia mi izquierda, donde se encontraba una ventana, dejándome ver la ciudad.
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Ah, despertaste.

¡¡¡AAAAAAAAAAHHHHHHHH!!! - Doy un gran salto hacia atrás, asustado por la repentina voz viniendo desde mi derecha, sintiendo gran dolor por mis heridas en estado de recuperación.

Estando a punto de caerme de la camilla una mano me alcanza a afirmar de la bata de hospital que llevaba puesta.

Cuidado, no te vayas a caer. - Dice el que ahora reconocí como un hombre por la voz, sin embargo, no se me hacia para nada conocída. Sobre todo porque no conozco a ningún hombre mayor.

Q-Q-Q-Quién eres tu- Digo mientras rápidamente me doy vuelta todavía inundado de susto.
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Lo primero que vi al darme vuelta, fueron unos guantes rojos de vinilo, un traje amarillo... Todavía sin creerlo sigo viendo y lo veo, su cabeza reflejaba el sol que pasaba a travez de él ventanal. Era el, no había duda.

El que estaba adelante mío ahora mismo era el héroe de un golpe.
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-¡¿Qué pasó?! - Gritaria un Doctor entrando a la pieza, dando un portazo en la acción, esperando lo peor.

-Oh, nada señor; Midoriya ya despertó. - Diría el calvo mientras su cabeza apuntaba hacia el doctor.

-Oh, que bueno, le haré unas pruebas, no es necesario que salgas- Comunicaría el doctor ya menos alterado al pelón.

-Ta bueno- Diría el, mientras se alejaba un poco con su silla y se me quedaba viendo.

El doctor empezaría a hacerme pruebas, tomarme la presión, medir mi temperatura, cosas de doctores.

-Menos mal y no era nada malo, me había alterado pensando que le podía haber pasado algo al paciente.- Exclamaria el doctor mientras guardaba los objetos con los que me acababa de hacer las pruebas.

-Si, se asustó porque al parecer estaba muy relajado y yo le hablé de la nada, causando que reaccionara de esa manera- Seguiría el desconocido héroe, sin quitar sus ojos de encima mío.

No se que decir, estoy un poco nervioso ya que la única persona mayor con la que he hablado es mi madre.

-Bien, ya terminé, esta todo correcto. El proceso de sanación sigue, pero ya esta casi. Mas o menos en una hora ya le daremos de alta. - Diría el doctor quien ya estaba en la puerta.

-Muchas gracias doctor - Diría el calvo despidiéndose de él mientras veia como se iba.
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Bien, esto es incómodo. Tengo a un tipo que no conozco al lado mío, MIRÁNDOME.

¿Será pedofilo?

No, un asesino serial.

No, no explicaría el por qué me salvo y me trajo hasta aquí.