¿Qué pasó?

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Rose
La cosa es que una tarde iba yo tan tranquila por la calle andando con Bella. Íbamos hablando de la preparatoria cuando de repente oímos un ruido y vimos a una chico a lo lejos golpeando a una mujer. Yo no pude hacer nada, debido a mi problema solo pude quedarme viendo la sangre brotar de la chica cada vez que el chico le golpeaba. La sangre me hipnotiza.
- Rose! - la voz de Bella me sacó de mi trance - hay que hacer algo - pero yo no podia dejar de contemplar a sangre - oh mierda Rose ahora no
Salió corriendo a llamar a la primera persona que vio para que hiciera algo. Aviso a un hombre robusto que estaba pasando por ahi en esos momentos.

El hombre agarro al chico por detrás pillándolo desprevenido. El chico le proporcionó un puñetazo al hombre pero este apenas se inmutó.

Tras varios minutos de forcejeo el hombre consiguió inmovilizar a chico y llamo a la policía. Esta llegó y se llevo al chico y llamaron a la ambulancia para que se llevaran a la chica, ahora inconsciente tras tantos golpes.

Y ahí fue cuando decidí a mi próxima víctima.

Empezaba el plan, paso 1: averiguar que ha sido de este chico.

A la mañana siguiente fui a comisaría para ver que podia averiguar.

Me acerqué al primer policía que vi.

- Hola buenos días - yo no solía ser tan cortes, me iba mas un "uh" como saludo pero no era plan que me multaran por faltar a un agente- me preguntaba que ha sido de un chico que arrestaron ayer por herir gravemente a una chica - no pude evitar sonreír un poco al recordar tanta sangre.

- Niña eso no es asunto tuyo - wow, eso había sido realmente grosero.

- ¿Y no me podría dar al menos su nombre?

- No.

- ¿Por?

- porque no - este policía me estaba empezando a tocar los cojones.

- ¿Y me podría decir si sigue aquí? - intenté poner ojitos de cordero, siempre funcionaban.

Cuando el cabrón este estaba a punto de soltar un no mas grande que una casa le interrumpió un segundo policía.

- ¿Qué pasa Jeff?- por lo visto el cabron se llamaba Jeff, igualmente iba a seguir llamándole cabron.

- Nada, que esta niña no sabe no meter las narices donde no debe- si tuviera sentimientos eso me podría haber molestado.

Aproveché que este segundo policía tenia cara de bueno

- Me preguntaba como se llama el chico que arrestaron ayer por herir a una chica y si sigue aquí.

Mi intuición no falló y efectivamente el me respondió - ¿te refieres a Scooter Benner? Si es asi le soltaron esta mañana temprano

El otro le fulmino con a mirada.

-Muchas gracias- y dandole una mirada al cabron de "soy la puta ama y consigo lo que quiero" me marche como la
Diosa que soy.

Paso 1: conseguido.
Paso 2: averiguar dónde puedo encontrar al chico.

Debido a que no sabia nada de él decidí ir al medico para ver si la chica sabia algo de el.

Lo se, soy una mujer de recursos.

Cuando llegué fui al mostrador.

- hola buenos días - volvemos a ser cortes - me preguntaba si podia ver a la chica que ingresaron ayer por ser gravemente herida a golpes.

Por lo visto en el hospital eran más majos que en la comisaría.

- claro, esta en el segundo piso puerta 28.

Me dirigí ahi y una vez frente a la puerta enter sin llamar, no se puede ser siempre respetuoso.

La imagen que me encontré al entrar era una chica llena de morados y de vendas en una cama llena de flores, cartas y regalos. Se ve que esta chica era popular.

- ¿quien eres?- ya me esperaba esa pregunta, pero la ignoré, me gusta ir al grano.

- Scooter Bennet, ¿le conoces?

- Si - esta chica habla, esto será rápido - es mi exnovio -e interesante. Que, me gusta el salseo.

- Bien, ¿donde vive?

- ¿por que debería decírtelo?- tampoco esperaba que fuera tan fácil.

Debéis saber que no soy una mujer razonable, asi que agarre el primer instrumento que vi con el que podría hacerle daño y le golpeé en la cara.

- ¿Por que no?- le dije. Su mirada desprendía miedo, y la adrenalina empezó a apoderarse de mi.

- esta bien, vive en Walt street 13, por favor no me hagas mas daño - recalcó ese más y no debió porque solo me dio ganas de golpearla otra vez, y eso hice.

Después de desahogarme limpie la sangre de el instrumento y lo deje en su sitio. Ya se que estaréis pensando, pero ella ya estaba llena de heridas y sangre, por un poco más nadie se daría cuenta.

Así que empecé a abrir la puerta cuando ella dijo

- ¿como sabes que no le contaré a nadie que me acabas de golpear?- solté una risa sarcástica.

- porque lo volvería a hacer, y la próxima vez no se si sería tan compasiva.

Esa misma tarde fui a la dirección que me había proporcionado la chica. Llame bruscamente a la puerta y un chico alto de pelo marrón oscuro y ojos del mismo color abrió.

- ¿Quien eres?

No tenía tiempo para charlas así que le golpeé con la piedra que había traído para golpearlo y se quedó inconsciente. Le intenté coger pero fue realmente imposible, este tal Scooter pesaba mucho. Así que lo arrastre hasta el coche, obviamente asegurándome de que no había nadie, y la verdad estaba muy vacía esta calle.

Lo metí en la parte de atrás y conducí hasta casa. Mis padres no estaban en casa, para variar, así que sin problema lo baje al sótano, donde mis padres nunca bajaban, si lo hicieran estaría en un lío ya que está lleno de sangre de otros asesinatos. Una vez en el sótano lo maniaté y observé satisfecha la escena...

Lo que no vesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora