Cause i'm not leaving | l.h

Capítulo 2

Narra Crystal

-¿Estás seguro de que era ella?

-Ya te he dicho que sí. Estaba en el club de la calle principal, subida en una tarima bailando. Si no llega a ser por Ashton y Calum que se acercaron ni la habríamos visto.

-Tengo que ir a buscarla -llevé las manos a mi cabeza, agarrándome el pelo y tirando hacia atrás de él.

-Te acompaño.

-No, tengo que ir yo sola. Probablemente ni quiera verme.

-Está bien. Yo iré al estudio con los chicos, luego vendremos.-asentí con la cabeza y salí de casa no sin antes despedirme de él.

Tenía la dirección del bar, así que sin dudar me monte en el coche y puse rumbo al lugar. Al llegar pensé que me encontraría un club de mala muerte pero realmente no estaba tan mal.

Entré y enseguida pregunte por Abi. -Ahora no está, trabaja por la noche.- Un hombre, que parecía ser el responsable del lugar, me dio la información que necesitaba. Al parecer vivía no muy lejos de aquí, por lo que volví al coche para ir a la nueva dirección.

Estacioné frente a un bloque de pisos, cuyo aspecto era un poco antiguo. Al pie de la puerta había un gran parque con un una explanada de césped. Me bajé del coche con la intención de acercarme a la puerta, pero una chica saliendo del edificio se me adelantó. Era ella.

-No dudé en llamarla. -¡Abi!- no estaba muy lejos por lo que pude ver cierto desconcierto y nerviosismo en su rostro.

-¿Qué haces aquí?

-Fui a buscarte a tu trabajo, me dijeron que vivías aquí.

-¿Qué? ¿Cómo sabes dónde trabajo?

-Michael y los chicos salieron anoche y te vieron. -se llevó las manos a la boca un poco sorprendida- Abi necesito que hablemos por favor.

-¡Mamá! -¿qué?

Narra Abi

-¡Mamá! -mierda.

Me giré y vi a lo único que me hace feliz en esta vida venir corriendo hacía mí. Me agaché para quedar a su altura y recibirla con un abrazo.- Hola mi amor. ¿Qué tal?

-Bien, ¡la abuela me ha comprado un helado!

-¿Abi? -cerré los ojos y suspiré.

-Seguía agachada dándole la espalda a Crystal, por lo que no podía verme. Me levanté y la miré. -Crystal, esta es Faith -tragué saliva- mi hija.

La cara de Crystal desde luego que era un poema. Esta fue una de las razones por las que ayer fui a su casa. Quería contárselo, que conociera lo increíble y maravillosa que es Faith, pero en el último momento no fui capaz por ello salí corriendo.

-Pero... -se arrodilló a la misma altura que mi hija, y con los ojos aguados le acarició la mejilla un poco dudosa.- Es igual a ti.

-Claro que no, mamá es mucho más guapa que yo. -Faith me agarró con su manita la mía y una lágrima cayó por la mejilla de Crystal.

-¡Faith! -me giré y vi a Nana venir hacia nosotras- Hola Abi cariño -me abrazó fuerte, como siempre suele hacer. Cuando se percató de la presencia de Crystal se separó un poco sorprendida, pues sabía quién era, y con una dulce sonrisa saludó- Hola.

-Nana ella es Crystal, mi hermana. Crystal esta es Nana. -Crystal seguí callada.

-Faith ve arriba con la abuela, enseguida subo. -le di una mirada a Nana y entendió a lo que me refería. Cuando ya estaban más alejadas volví a girarme hacia mi hermana.