[17]

2.5K 429 27
                                        

Cuando YoonGi llegó a Seúl aquella mañana, lo primero que llegó a su mente fue que necesitaba dormir en su cama por lo menos, veinticuatro horas seguidas. Había sido demasiado estrés, demasiada carga pesada sobre sus hombros, y un sinfín de responsabilidades que lo habían dejado noqueado más de una vez.

No iba a mentir que salir de gira era algo que amaba, el amor que podía sentir de parte de su fanaticada lo impulsaba a buscar dar todo de sí para que esa noche, sea la mejor noche tanto de ellos, como de él mismo, no obstante; el pesado ambiente que se vivió con las excesivas normas que había puesto la empresa lo habían hecho querer abandonar todo e irse al carajo.

— Quita esa cara de gato amargado. — Mencionó Hoseok a su lado. YoonGi rodó los ojos cuando sintió el flash de una cámara impactar contra ellos. — Nadie necesita saber que no has dormido bien, te llamaran la atención. — Musitó el contrario preocupado. YoonGi se encogió de hombros.

— Que se jodan todos. Lo necesitan, yo lo necesito. — Expresó el pálido mientras soltaba un bostezo. — Dos días de contrato me quedan, me iré a la mierda y van a llorar por mi ausencia. — Mencionó seguro el mayor de ambos. — ¿Qué tal tu agencia? ¿Crees que me quieran? — Hoseok rió.

— ¿Estás dispuesto a soportar a JungKook todos los días en tu estudio? — YoonGi se encogió de hombros.

— Él es agradable, durante la gira cuando fue a visitarnos me llevó café al estudio y se portó bastante bien cuando grabamos juntos en muchas ocasiones, puedo con ello. — Hoseok asintió.

— Le informaré al CEO para que no dude en ir por ti.

...

Independiente de las noches cálidas bajo las bromas con NamJoon y HoSeok, YoonGi no pudo evitar sentir que le faltaba algo. No tenía que ser adivino ni demasiado inteligente como para saber que era. No sabía si era costumbre, quería decir que era eso para negar lo que sabía a la perfección y con lo cual viviría para siempre.

O por lo menos, una eterna y larga temporada.

Lo que sentía, era algo tan básico pero de igual forma, difícil de definir. Estaba seguro que al principio, todo había sido la emoción del momento. Cuando conoció a JiMin, simplemente vio en el un rostro bonito y un hombre bastante guapo, le interesó desde el primer momento en que lo vio y no dudó en ir por él.

Sin embargo; los primeros días de tratarlo y coincidir con él, el interés que había nacido había crecido en otra dirección, se encontró pensándolo tanto que hasta llegó a revisar las redes y tendencias en la cual estaba incluido el menor.

¿Amor a primera vista? Quizás no lo era, aunque equívocamente quizás lo idealizara así en días y meses atrás, tal vez, era algo mucho más profundo que eso.

Solo estaba destinado a ser, de la forma que fuera.

Ahora que no estaba al lado del menor, se sentía tan similar con la luna y el sol, dos grandes estrellas destinadas a estar separadas, siendo tan inmenso lo que los separaba pero a su misma vez, siendo el mismo lugar en donde ambos podían ser lo que eran.

— Y te extrañaré por siempre. — Susurró el pálido cuando reconoció una de las chaquetas de JiMin sobre el sofá de su apartamento.

— ¡YoonGi-Hyung! — El grito de JungKook lo hizo saltar del susto y el menor no pudo hacer más que reír completamente divertido de la expresión aterrada del mayor. — ¡Bienvenido!

— ¿C-Cómo entraste aquí? — Cuestionó aturdido. JungKook rió.

— Tú me diste la contraseña para que regara las plantas y durmiera aquí tres días por la semana. — YoonGi frunció el ceño. — Recuerda que te dije que fumigarían y que me mudaría a tu habitación de invitados mientras tanto.

— ¿Cuándo pasó todo eso?

— Hace cinco meses cuando te emborrachaste conmigo, nos hicimos mejores amigos, vomitaste en mis zapatos y yo también en los tuyos. — Sonrió animado JungKook. — ¿Por qué no me dijiste cuando llegarías? ¡Pude ir a buscarte o prepararte el desayuno!

— ¿Sabes cocinar?

— Preparo un buen cereal. — Mencionó el menor encogiéndose de hombros. YoonGi rió dejando su maleta a mitad de camino y dirigiéndose a su habitación.

— No hagas ruido, caeré en coma por unas horas, prepara una cena decente por si despierto.

— Que exagerador eres YoonGi-Hyung. — Rió el menor. YoonGi volteó a verle.

— Nos vemos en diez años.

...

Gukkie.🐰

Buen día hyung.

YoonGi regresó hoy. ¿Haremos algo con nuestros tontos amigos o nos vamos al cine?

TaeHyung rió divertido cuando divisó el mensaje de JungKook. Su mirada curiosa recayó en JiMin en medio de la sesión de fotos, para luego regresar al teléfono.

Haremos algo definitivamente.🙋‍♂️

¿Cuándo?

La respuesta no tardó en llegar.

Dentro de diez años, hyung dijo que caería en coma y que no me acerque a su habitación o me matará.😭

Y lo dijo muy serio.

TaeHyung rió negando.

Debe estar muy cansado, dejemos que descanse y pronto... Muy pronto los volveremos a reunir.

— ¡TaeHyung! — El grito de JiMin lo sacó de su ensoñación. — Tu turno, idiota. — El menor puchereó mientras avanzaba hasta donde se encontraba el mayor. Para TaeHyung era demasiado adorable ver a JiMin ahora con el cabello rosado, sentía que no había mejor color para él que ese.

— Esto es maltrato laboral, te denunciaré. — JiMin rió

— Ven acá señor oscuro, necesito que salgamos de estas fotos de una buena vez por todas.

— ¿Tienes afán? — Indagó Kim curioso. JiMin negó.

— Solo quiero ir a dormir mientras veo alguna pelicula, ¿te animas o ya tienes planes? — TaeHyung asintió.

— Me animo. — Sonrió tratando de ignorar la pequeña capa de tristeza que brillaba en los ojos del mayor.

Estaba decidido. Entre él y JungKook ayudarían a YoonGi y JiMin.

...

¡Hola! Gracias por la espera.

Dentro de poco finalizaremos.

Muchas gracias por leer y por el cariño.


Adore you » Yoonmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora