Capítulo 4

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Así pasaron tres semanas, JungKook ya no hablaba para nada con SeokJin, si se veían se evitaban, las clases que compartían juntos prácticamente estaban sentados uno en cada esquina y eso a Jin le dolía, Jimin ya no le hablaba debido a que se enteró que había terminado con JungKook sin razón aparente, el único que se mantenía a su lado en todo momento era Jae Hwan, Jin no entendía esa parte, cómo era posible que estuviese cerca de quién había provocado todo esto, pero Jin sabía por qué, y era porque realmente no podía culpar a Jae Hwan por lo sucedido, no lograba acordarse de nada, así que no podía juzgar lo que no sabía, lo que no recordaba. 

Cada día que pasaba se sentía más débil, cansado, con náuseas, ya había empezado a vomitar, nunca imaginó que un rompimiento pudiese dañar su salud, se sentía tan triste, la vida para él había perdido sentido, sin JungKook, su mundo era gris.

JungKook no se sentía mejor que Jin, le dolía tanto estar lejos de él, todo el tiempo suspiraba; cuando le contó a Jimin lo sucedido, este se molestó tanto con Jin por haber terminado con JungKook sin una explicación coherente, se le hacía que Jin solo estaba haciendo un berrinche y se le pasaría en cualquier momento sin embargo, ya habían pasaron tres semanas así.

JungKook siempre estaba de mal humor, pero solo si estaba Jin cerca sonreía para demostrarle que estaba bien, ya que si Jin era lo que quería entonces sería lo que obtendría, pero a quien engañaba su corazón estaba lastimado, sin embargo mantenía la esperanza de que Jin recapacitara y estuviesen juntos de nuevo, que él volviera a tener al doncel entre sus brazos y poder hacerle el amor como la última vez, todo esto lo tenía mal, quería gritar, destruir todo pero más que nada quería besar a Jin y no separarse nunca de él.

Era la hora de la clase de deportes, Jin se encontraba en la cancha para iniciar con los ejercicios, JungKook lo miraba desde lejos embobado, realmente su doncel era el más hermoso que podía existir en el mundo, sin embargo, ya no era suyo.

Jin comenzó a correr por la cancha, apenas llevaba una vuelta cuando empezó a sentirse mareado, Jae Hwan se le acercó al ver que esté corría más lento, le preguntó si estaba bien a lo que Jin solo asintió, continúo corriendo unos minutos más hasta que su vista se empezó a nublar y cayó rendido al piso.

JungKook al ver desplomarse el cuerpo de SeokJin corrió inmediatamente a la cancha a dónde se encontraba el doncel, Jae Hwan intentó levantar a Jin, pero JungKook lo detuvo.

-No te atrevas a tocarlo- soltó - Jin reacciona por favor- movió un poco al doncel, este no reaccionaba, llegó su profesor con un poco de alcohol y se lo colocaron en la nariz. 

Jin empezó a reaccionar, abrió un poco sus ojos azules y dijo apenas en susurro -Kookie- una sonrisa se dibujó en su rostro, pero volvió a cerrar sus ojos.

El azabache lo tomó entre sus brazos y caminó hacia la enfermería, sin embargo en el camino fue detenido por el profesor quien le indico que le entregará al doncel, ya que tenía indicado por sus padres que si le sucedía algo llevarán al joven al hospital central, no querían que fuera atendido en la escuela, a JungKook se le hizo una estupidez, así que sostuvo a Jin no iba a dejar a su doncel solo,  se dirigió al carro del profesor, ambos subieron y emprendieron camino al hospital.

JungKook llevaba en brazos a Jin mientras empezó a acariciar su cabello, lo pego un poco más a su cuerpo y hundió su nariz en los cabellos castaños, inhaló lo más que pudo de su esencia, se sentía aliviado al oler a su doncel, le daba tanta calma, como extrañaba su aroma, su cuerpo, sus besos, se acercó a su oído y susurro -Te amo- 

Jin abrió solo un poquito sus ojos y con una sonrisa apenas perceptible dijo -También te amo Kookie- cerró los ojos y el azabache sonrió, su Jinnie aún lo amaba, así que no estaba soñando aún había una oportunidad.

Volver A Pintar El Cielo | KookJin | AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora