Capítulo 22

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Otro día había llegado, Jin sentía su cuerpo arder en fiebre, pues si, después de su agitado encuentro con JungKook había salido del gremio constructor a toda prisa, se sentía mal por lo ocurrido con el azabache, por lo que en cuanto la lluvia empezó a caer no quiso tomar un taxi para regresar a casa, decidió regresar caminando sin importar que un aguacero torrencial cayó sobre Seúl, cuando llegó a casa no había nadie TaeHyung había llevado a Sora al cine porque mañana iría a Busan durante todo el día, así que el departamento se encontraba solo, motivo por el cual no había tomado importancia el ducharse o siquiera quitarse la ropa húmeda, así como estaba se dirigió a su recámara para dejarse caer en su cama, no quería saber de nada.

Mala fue su suerte al despertar sintiéndose terrible, parecía que había sido atropellado por un tráiler, se sentía mareado y el cuerpo arder, cuando su hijo lo vio se preocupo y quiso que su papi se quedará en casa, sin embargo para SeokJin esa no era un opción ya que hoy sería la junta para anunciar los puntos para participar en la licitación de las Galerías de Corea, el mayor proyecto de este año. Reuniendo todas sus fuerzas se arregló para ir a la junta, le prometió a su pequeño que de sentirse mal le marcaría por teléfono a él o a Jeni para que fueran por él, bajo esa promesa tomó un taxi para ir al gremio.

El camino fue horrible su fiebre empeoraba, quería pasar a la farmacia a comprar un antipirético, pero por tardar en casa el tiempo le estaba pisando los talones, no quería volver a vivir lo sucedido hace meses en la junta de resultados de la licitación del centro comercial, por lo que desechó la idea de pasar a la farmacia.

Al llegar a la sala de juntas, se sentó en el primer asiento que vio vacío, su cabeza ya le daba vueltas, sentía sus mejillas tan calientes que pensaba que si colocaban un huevo sobre ellas de seguro lo cocería.

JungKook llegó temprano a la junta, esperaba que SeokJin llegará tarde otra vez para burlarse de él, sin embargo grande fue su sorpresa cuando lo vio entrar a la sala antes de que incluso NamJoon llegará, aunque eso no fue lo que realmente le sorprendió, sino el ver al doncel con un semblante pésimo, las mejillas completamente rojas y la vista perdida, parecía que en cualquier momento caería desmayado, quiso acercarse a Jin pero en ese momento entró Nam, evitando que se moviera de su lugar, por un lado agradeció eso ya que a él no le importaba lo que le ocurriera a SeokJin, si estaba enfermo era su problema, y el no tenia porque meterse.

-Buenos días, agradezco mucho su asistencia a esta junta, se que ha sido inesperado, ya que se había comentado anteriormente que la licitación de las Galerías de Corea sería en unos meses más adelante, sin embargo por tratarse de un proyecto de índole nacional se ha decidido sacar la convocatoria en estos momentos y con ello esperamos que sea mayor el tiempo que ustedes tengan para dar la mejor competición- NamJoon decía cada palabra con convencimiento, quería que este proyecto fuera uno de los mejores.

-Me gustaría también felicitar a Kim Constructions por haber ganado las últimas tres licitaciones que se han presentado, es un gran logro CEO Kim SeokJin, por lo que pido un fuerte aplauso-

Jin al escuchar su nombre solo pudo levantarse ligeramente de su lugar, su situación iba empeorando, sentía su cuerpo cada vez más caliente y su vista nublarse. Se terminaron los aplausos y NamJoon prosiguió.

-Bien, ahora me gustaría iniciar con el programa de esta reunión, ya que es importante que cada uno de ustedes comprenda la importancia de este proyecto y lo que conlleva está licitación-

Durante toda la junta Jin no logro entender nada, su cuerpo se sentía frágil como si en cualquier instante alguien pudiera tocarlo y partirse en pedazos, sus manos empezaban a temblar, los escalofríos estaban aumentando, por Dios quería salir de ahí, su vista se nublaba cada vez más.

Volver A Pintar El Cielo | KookJin | AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora