No más panadera

Negociación

Nette estaba realmente cansada, llevaba días en los que su mejor amiga intentaba negociar de todas las formas posibles el que volviera a la vida de Marinette, sabia que le costaría entenderlo, pero estaba siendo realmente pesado.

Sumándole el hecho de que "el amor de su vida" ,como había llamado a Chat Noir desde que se dio cuenta de que estaba enamorada de el y su teoría conspirativa sobre que los portadores de la creación y la destrucción estaban destinados a estar juntos, llevaba también varios días sin salir a patrullar, lo que realmente la preocupaba y agradecía que no hubiera habido ningún akuma.

Salió a patrullar, estaba realmente estresada, le faltaban muchas cosas por entender del grimorio, afortunadamente los kwamis estaban cada vez menos insistentes en el hecho de volver a ser Marinette, tal parecía que el único que apoyaba su decisión era Su-Han, el cual decía que su vida común la desviaba del camino para poder ser una buena guardián y heroína.

Corriendo por los tejados de Paris se encontró con Rena Rouge también de patrulla, se sentaron a conversar un rato, afortunadamente para la moteada su amiga no tenia tantas intenciones de persuadirla, estuvieron platicando un poco sobre su día, claro que la de naranja tenia mucho mas que contar, como las clases que había tenido, el proyecto de Kim que termino explotando el celular de Sabrina, su cita con Nino, pero hubo un detalle que preocupo a la oji azul.

-Nuestra cita fue algo deprimente- respondió la pelirroja a la pregunta de su amiga sobre que paso en su velada.

-¿Por?- eso jamás lo había escuchado, ellos se querían mucho y sus citas siempre solían ser divertidas.

-Es por Adrien, Nino esta realmente preocupado por el, lleva días sin ir a la escuela, no contesta por ningún medio y aunque vaya a su casa no le dicen nada, ni siquiera Chloe sabe algo de el- finalizo la morena.

-Es una pena, es un buen chico y era el mejor amigo de Marinette, aunque yo también extraño a alguien- dijo en un susurro que su amiga apenas alcanzo a escuchar.

-A cierto gatito ¿o me equivoco?- pregunto Rena rouge con intenciones de molestar un poco a su amiga.

-Si, es solo que nunca había faltado a una patrulla, y menos sin avisar, me preocupa que este mal-.

-Hey tranquila, el es muy responsable, talvez solo tenga una emergencia en su vida civil y este muy entretenido, ya veras que en cuanto este libre, no vive sin su Lady- comento con una sonrisa picara.

Logrando su objetivo de sonrojar a su compañera siguieron con su platica/patrulla por un par de horas hasta que decidieron que era tiempo de volver cada una a su hogar.

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En un lugar en otra zona de Paris, se encontraba un chico rubio apenas despertando, apenas podía abrir los ojos y veía todo borroso, no podía distinguir bien los sonidos, le tomo un par de minutos poder sentarse y distinguir bien las formas, se quito la mascarilla de oxigeno y volteo hacia los lados sin distinguir el lugar donde se encontraba.

-¿Donde estoy?- pregunto dándose cuenta de que se le dificultaba un poco hablar por lo reseca que estaba su garganta.

-¡Adrien!- el chico no se dio cuenta pero en una maleta puesta sobre una silla se encontraba su pequeño kwami, que al verlo reaccionar voló rápidamente para abrazarlo en la mejilla.

-Wow, ¿Plaga te encuentras bien?- pregunto el chico no acostumbrado a ese trato de su kwami pero aun así enternecido por el gesto.

-Yo soy el que debería preguntarte eso niño, ¡Me asustaste! No despertabas así que puse tu alarma al máximo para llamar la atención de Nathalie y que así te trajeran al hospital, me pude esconder y no te deje ni un minuto- contesto el kwami orgulloso.