Leía Minus y la química entre ellos me encantó.
Fue un movimiento rápido, bastó un par de segundos para poder atraparla, envolverla por su cuerpo y protegerla de la explosión inminente ocasionada como último recurso de aquel planeta que estaban conquistando en represalia contra ellos.
Bardock gruñó mientras era alcanzado por la ráfaga de fuego mientras era impulsado por ella varios metros contra los resto de hormigón de un edificio. Todavía en el aire, se giró para que fuera a él para a quien le golpeara.
Hizo un gesto de dolor mientras con su cuerpo ya lastimado en batalla atravesaba el edificio que se derrumbaba, intentó contenerlo cuando se percató que lo miraba, Gine habría sus ojos y arqueaba sus cejas en un gesto impregnado de dulzura que provocó al instante que algo en el estómago del saiyajin se encogiera.
Sus gestos con él tenían un efecto inmediato, efectos que lo desconcertaba pues no era algo que viera en su raza, que pudiera entender pues jamás los había sentido, muchos de ellos le debían ser desagradables, pues le hacían sentir más débil y un guerrero no podía serlo.
- ¿Estás bien? - preguntó con preocupación.
Los pies del saiyajin se posaron en el piso con fuerza y la miró, intentó hacerlo con desdén, con desprecio, pues era el comportamiento que se esperaba, durante el asedio ella se había contenido, lo que había costado recursos y tiempo, que eran cruciales. Esa mujer le había suplicado clemencia por los sometidos y lo más terrible de todo es que él había accedido terminando por dejarlos escapar con vida buscando recuperar respeto amenazando que los mataría si volvían, no podía negarle nada, ni siquiera aquella sonrisa leve pero significativa que le brindaba.
- Estoy bien- contestó de manera seca y la bajó para que se pusiera de pie.
Lo adecuado en este caso, era una llamada de atención, un castigo, una degradación, una tanda golpes incluso, Gine lo había desobedecido siendo su superior, el planeta había sido depurado y estaba por entregarse, pero ella decidió salir y buscar cualquier posible sobreviviente que hubiera quedado rezagado antes de que las fuerzas de Freezer llegaran, se había puesto en riesgo y lo había hecho arriesgarse a él, no solo de manera física sino su estatus como capitán.
En lugar de eso la observó de arriba abajo, con aquel mismo gesto duro que siempre llevaba la miró para revisar que no tuviera heridas y notó como esto la enrojecía, tomó un mechón de su cabello y lo retiró de su rostro, ella se mordió el labio inferior.
- Gracias por salvarme- indicó tímidamente la chica mientras se aproximaba a él hasta una distancia íntima.
Él retrocedía desconcertado cubriendo con su mano su rostro, entre su raza la razón más común para que alguien se aproximara tanto a otro era para golpearlo, aspectos como el amor o el cariño no tenían cabida en la raza de los guerreros.
Ella con un gesto de molestia de terminó resultándole enternecedor, le retiró con un golpecillo su mano y lo tomó del rostro con ambas manos, besándolo, bastó un roce de aquellos suaves y húmedos labios para que Bardock sintiera en su cuerpo recorrer la misma adrenalina que una batalla, su cuerpo se estremeció de misma manera cuando acertaba un ataque, cuando salía vencedor, al mismo tiempo sus piernas flaquearon, las fuerzas parecían abandonarle como si Gine fuera una especie de bruja y de esta manera le arrebatará todo, debía serlo pues a él no le importaba que ocurriera.
Con brusquedad la atrajo hacia él, haciendo que ella se sobresaltara, reclamándole más. En la sociedad de los saiyajin era simple, el poder lo era todo, ella tenía poder sobre él de maneras en las que no podía explicar.
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Amor en tiempos saiyajines
FanficEn este anime también hay amor y es de más de un millón de kiris.