Un día común

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Papá es quien hace todos los deberes de la casa. Se levanta muy muy temprano, él se encarga de levantar a la familia, empezando por mamá hasta despertar al gato.

Papá no es tan buen cocinero, pero le pone ganas cada día. Lo único que no mejora es la "comida de dios"

Pedir que papá cocine mejor está bien, pedir que mejore la "comida de dios" es avaricia.

Papá me ayuda a bañarme, no es que sea sucia, es solo que creo que no es necesario bañarse diario. Mi miss dice que gota a gota el agua se agota, pero papá dice que mi miss es una tonta.

Papá es el tonto.

Papá me lleva a la escuela y lleva a la guardería a Tommy. Luego, papá trabaja en una pequeña cafetería hasta el mediodía. Él tiene desde el mediodía hasta la una para cocinar y limpiar la casa, por segunda vez. Nos recoge y nos da de comer.

Luego jugamos lo que queda del día hasta que tiene que limpiar por tercera vez.

Mientras tanto, mamá tiene que venir antes de las seis o antes de que Tommy despierta. Tommy tiene mamitis. Él siempre, siempre, siempre quiere pecho después de levantarse y cuando no ve a mamá, él llora.

Cuando estamos todos juntos, mamá nos cuenta como le fue en el trabajo. Ella es bióloga, siempre tiene algo que contarnos. Papá y yo solemos molestarla cuando fingimos estar durmiendo mientras ella habla. En el fondo, yo la escucho. Mamá es increíble y ella ama lo que hace, ver su rostro lleno de felicidad es todo lo que necesito para agradecer a Dios por darme unos padres tan geniales.

Los fines de semana, mamá y yo hacemos la tarea que acumulé. Papá dice que es un mal hábito, pero mamá le dice que bajo presión los Zoe trabajamos mejor.

¿Soy más Zoe que Ackerman?

Welcome to your lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora