Todo el pueblo de Kattegat murmuraba, ya todos sabían lo que el vidente le había dicho al nuevo y preocupado rey. Una mujer estaba destinada a domar la bestia que contenía en su interior, y todos se preguntaban ¿Quién sería la que tuviera la valentía de domar a ese demonio? Era bien sabido que Ivar, hijo menor del gran Ragnar, no tenía buen genio.
En la cabeza del joven rey solo cabía una pregunta ¿Qué tan probable era que una mujer se quedara con un lisiado como él? Si algo no había aprendido con el tiempo era a quererse tal y como era. Solo su madre había visto en él, lo que nadie más vio, aunque estaba seguro que ella se quedo con él solo por el hecho de llevar su sangre.
Su mente no paraba de pensar, todo lo que había conseguido, parecía que estaba a punto de caer por un precipicio. Los reinos a los alrededores consideraban que Kattegat era un reino fácil de tomar. Y si, podría ser una bestia en el campo de batalla, tener el mejor ejército y una buena protección, pero había algo que no podía tener, un hijo.
Kattegat necesitaba un heredero, y él ya no sabía qué hacer. Había recurrido al vidente en un momento de desesperación, en busca de algunas respuestas que no supo entender. El hombre de avanzada edad solo dijo que tenía que esperar ¿Pero por cuánto? Ya había varios que querían derivarlo.
Fue sacado de sus pensamiento cuando entraron algunos de sus guardias en su búsqueda -¡Mi rey! ¡Hemos encontrado a alguien en el bosque!- Por su mente solo se le paso la idea de algún intruso, pero que lejos estaba de la realidad.
-¿Quién es?- se paró con ayuda de su muleta. El guardia lo miro con miedo. Todos en su reino le temían, y eso para él no era algo nuevo.
-No lo sabemos mi rey- bajo su mirada, esperando la reacción de su superior.
-¿Cómo que no lo saben?
- Es que cuando la encontramos estaba inconsciente- ¿Qué hacia una mujer cerca de su pueblo? ¿Sería alguien enviado por Ladgerda? Ya había mandado a varios guerreros en su búsqueda, pero no tenía noticias todavía.
- Tráiganla, yo me hago cargo- ordeno. No sabía que iba a ser, solo estaba decidido a sacarle toda la información que pudiera. Pero ese plan se vino abajo cuando la vio.
La chica tenía un cabello largo y negro como la noche, algo poco común, y su piel era blanca, casi tan blanca como la nieve. La observo de lejos, pudo darse cuenta que algo no iba bien ¿Qué era lo que llevaba puesto?
-Llévenla a mi habitación- Todos lo miraron sorprendidos, esperaban otra reacción de su rey, hasta el mismo se sorprendió de su reacción, pero algo le decía que esa chica no iba a causarle ningún daño- Consigan ropa limpia- Ordeno a las esclavas que observaban todo sorprendidas.
Ya para el otro día todos en Kattegat hablaban de lo sucedido el día anterior. Ivar había pasado la noche observando a su visitante, al pasar las horas y ver que no despertaba mando a buscar a la curandera del reino. Esta no le pudo ayudar mucho, y solo le dijo que tenía que esperar- necesita descansar, cuando ella crea que es suficiente va a despertar- pero eso no ayudo a calmar al joven rey.
En la noche salió en busca del vidente, había algo que lo tenía inquieto, y muchas preguntas que le rondaban en su mente.
-¡Mi rey! ¿Qué lo trae por aquí?- pregunto el vidente al verlo entrar.
-Creo que usted sabe porque estoy aquí, ¿No es así?- contesto- Dígame, la chica que está en mi habitación es...
El vidente no lo dejo terminar- ¿De quién te hable? Me temo mi rey que eso lo va a tener que averiguar usted mismo.
Esa respuesta no le servía de nada. Ivar volvió a su habitación con más dudas que respuesta, y con la esperanza de que la mujer que se encontraba durmiendo allí sea la mujer de la que hablaba el vidente.
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A Través del Tiempo- Ivar The Boneless
FanficEl vidente lo había visto, una chica de pelo negro como la noche y ojos verdes como la hierba se acercaba al pueblo de Kattegat, y con ella venia la tranquilidad, no solo de su nuevo rey, sino que también de sus seguidores.