Una extensa travesía, que parcialmente hizo un abrumador cambio en el camino de Mugiwara, todo por culpa de un flamenco estúpido.
* Devuelta en ser escrita (25-09-2022).
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Los indicios de la temporal maldición fue una terrible oleada de sentimientos para los cuidadores del azabache, un manojo de dolores mentales podían percibirse alrededor del día en aquella habitación donde reposaba el pequeño cuerpo del retoño, no se quejaban; después de todo era como si la encargada del castillo se cobrará los favores que les otorgó una vez a cada uno de ellos. No importaba si eran tripulantes o familiares, un favor era un favor.
Las primeras dos noches con el monito fueron un martirio, tenían que estar al tanto de cuidar el insomnio que tenía, las locuras que cometía eran pesadas, tanto despierto como dormido, no se podía sosegar la mentalidad que conllevaba, el efecto de la maldición era grave en una personalidad tan alegre y activa. Shizuka había llegado a la conclusión de que, tal vez, Monkey de tanto sufrimiento cerrado en la burbuja que mantenía, pasaba esos sucesos tan deplorables, crueles por su propia inseguridad de hablarlos con alguien, era sorpresivo sabiendo la "confianza" que la tripulación mantenía con su capitán. Eso daba a entender que no confiaba lo suficiente en alguno de ellos para confesar cada una de sus penas, eso era comprensible, la escasez de seguridad era primordialmente por cuáles eran los acontecimientos que el susodicho no deseaba parlar con aquellos.
Doffy no se molestaba -ya- en cuidar del menor, después de todo era una orden de la progenitora y de quien tenía la accesibilidad de matarlo en cualquier momento, él apreciaba su vida y su reputación como villano, no quería -de igual forma- ser expuesto como "el ex-Shichibukai que se ablando con un mocoso que pretendía derrotarlo", eso iba a ser tan público alrededor de todos los mares. De tan solo pensar aquello, el temor se apoderaba de su cuerpo, temor por regresar al tipo de pasado que lo contagió a una deslumbre tan devastadora por intentar encajar en mundo al cual no pertenecía; conmovedoramente su padre insistía, la maldad yacía en sus venas desde el nacimiento, eso entendia, pero reconocía que había bondad muy oculta en su corazón de roca, la cual no demostraba por puro orgullo y miedo a quedar como su padre.
Solo bastaba con abstraerse de esos pensamientos para demostrar el poco lado humano que resguardaba. No obstante, duda mostrarlo frente a otra persona que no sea Mugiwara, podría exponer a todo tipo de personas, pero sabía guardar un secreto muy valioso. Agradece más que nada que estuviera inconsciente en esos momentos, estaba sedado por la anestesia que le colocó momentos atrás por su pérdida de control. Llorar y meditar el rencor que sentía, eso descubrió el Monkey D. Luffy, sentimientos vagos y tristes, opacos que no iban en su típica personalidad. Intuir en el menor no era de su importancia, pero le llamó la atención las palabras discretas que hablaba en soledad por esos últimos días.
"Si por mi sueño no fuera, yo quisiera haber besado la tierra y pedirle perdon a Ace por lo que paso" recordo, la fragil y quebrada voz resonaba por todo su ser "Ace fue un idiota al dejarse llevar por sus sentimientos, si tan solo no se hubiera dejado ir; entonces el estaria riendo en el mismo mundo que yo, y no estuviera en esta posilga".
