Capítulo 7

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Veía el techo de su cuarto que era adornado con hologramas del cielo estrellado, ya estaba mejor pero aún no tenía ánimos de ir a la escuela, se sentía extraña con ella misma y no sabía por qué.

-Morgan, amor ¿Puedo pasar?.- Su papá toco la puerta.

Rápidamente se hizo bolita en su cama ocultándose con sus cobijas.

Al no recibir respuesta abrió la puerta, vio que estaba a oscuras excepto por la luz de los hologramas, tomo un peluche del piso y haciendo una voz chillona fingía que el muñeco hablaba.

-Princesa es hora de desayunar para ir a la escuela.- Morgan saco su mano de las cobijas y tomó al peluche.- Vamos amor, ya estás mejor y tienes que ir a la escuela.

-No quiero ir.

-Lo sé es molesta y puede ser aburrida, pero si no lo haces tu padre se enojara con los dos, yo te dejaría faltar pero no quiero que ambos estemos castigados.- Sonría con nervios pensando que si no iba a la escuela su hija lo dejarían sin donas.- Además hoy hay pizza para desayunar y hamburguesas tus favoritas.

La pequeña se fue destapando la cara y su papá le sonrió y le besó la frente.

-¿Con papas y alitas?

-Si y ensalada dulce y pay y jugo de naranja.

Los dos sonrieron y bajaron a comer para la sorpresa de todos Tony en esta ocasión se había despertado antes para pedir el desayuno de sus hijos y así su amado no llegaría a preparar desayunos y estaría tranquilo.

-Tony, Morgan se acaba de recuperar y le vas a dar comida chatarra.- El súper soldado veía con reproche a su esposo.

-Si ¿Algún problema?.- El cap no cambiaba su mirada seria.- Mi bebé estuvo comiendo pura comida de enfermo por días, se merece algo que le gusta, además ¿No dicen que barriga llena corazón contento? Quiero que mis bebés estén contentos.

Antes de que pudiera protestar sus hijos estaban entrando al comedor, sorprendidos por la comida agradecieron a su papá por que era obvio que Steve en la vida les haría esa comida insana para desayunar, al ver a sus hijos disfrutando de sus alimentos Tony le enseñó la lengua a su esposo.

Morgan observaba a su familia, sus padres amorosos, que en ese momento tenían una discusión de juego, a sus hermanos que reían ente la escena de sus padres y su hermana que aún se veían sus marcas de la pelea. Una sensación de calidez y tristeza se mezcló en su corazón, estaba muy feliz detener a su familia pero al mismo tiempo tenía muchas dudas.

Ese día fue especial, de las escasas veces que su padres los llevan a la escuela, Tony y Steve tomaron una foto de ese hermosa mañana, sonriendo todos a la cámara.

Los primeros en llevar a la escuela fueron Harley y Peter, se despidieron de sus padres con un beso en la mejilla y les desearon un gran día en la escuela, las niñas antes de salir del auto fueron detenidas por sus padres.

-María por favor, ya no golpes a los niños.- Hablo Steve.

-Amenos que se lo merezcan.- Aclaro Tony.

-Las amamos, vendremos por ustedes a la hora de la salida.- Steve estaba a punto de dejarlas ir pero Tony volvió a hablar.

-Antes de que se vallan, les tengo un regalo.- Les extendió una caja hermosa mente decorada, a cada una y ambas con curiosidad y sorprendidas abrieron las cajas, eran teléfonos.- Ya tienen el número de sus hermanos, de nosotros, de sus tíos y de Happy.- Eran de esos teléfonos plegables "viejitos" al estilo Stark.

Las niñas agradecieron a sus padres y salieron del auto para entrar a la escuela y fueron a sus respectivos salones.

Morgan estaba emocionada viendo si celular, revisando todo lo que tenía, juegos, música, todo lo que le gustaba además tenía internet.

La profesora llegó y la clase empezó, explicaba como funcionaba la genética y como era que algunas veces se parase a los padres o no pero se parecen más a otros familiares. Morgan estaba tan maravillada por la clase que en su mente empezó a ver los rasgos que tenía con sus padres, su cabello castaño era como el de su papá Tony y amm su piel era blanca como su padre Steve, en su cabecita le empezaron a encajar algunas cosas pero el saber que los bebés nacían de las mujeres a un no entendía como había nacido en una relación de dos hombres. Se acordó de sus hermanos y siguió comparando los rasgos, notó que realmente no se parecían tanto a sus padres salvo por el color de cabello, ojos y piel, pero así como ser muy parecidos en cara no, y no podía compararse con otro pariente pues su padre Steve era el único y de su padre Tony igual aunque pudiera ver sus fotos en el internet o en unos muy, pero muy escasos álbumes familiares que conservaba su papá no era lo mismo.

La hora del almuerzo llegó y Morgan salió antes por a ver terminado su trabajo, fue al salón de su hermana, no la vio, pensó que tal vez ya estaba en el comedor así que fue a buscarla, pero no tampoco estaba, volvió a pensar en otro lugar donde pudiera estar y la idea de que estaba el baño le pareció que era razonable, igual que antes no estaba, decidió que era mejor esperarla en la cafetería.

Se sentó en el lugar más cercano a la entrada por si la veía le hablaría, comía feliz un sándwich de atún, pensando en dónde estaría su hermana, el tema de la clase le seguía dando vueltas en la cabeza, dejo su comida en la charola y saco su nuevo teléfono para buscar, pensarán que al ser tan pequeña no sabría usar un teléfono, pero la tecnología no era algo ajena a ella ni a sus hermanos pues su papá es el dueño de la más grande compañía en tecnología más avanzada del mundo. "Como 2 hombres pueden tener bebes" al dar inicio a la búsqueda aparecían muchos artículos, "Matrimonio gay legal en Canadá", "Se aprueba la adopción de niño en parejas homosexuales", "Puerto Vallarta un paraíso para los homosexuales", era demasiada información, no sabía por donde empezar. Estaba a punto de darle a un artículo cuando escucho a su hermana.

-Morgan.- María estaba acompañada de una niña.

-¿Donde estabas y quien es ella?.- Pregunto sin dejar de observar a la acompañante de su hermana.

-Ella es Lilian, es mi amiga.

-Hola, somos compañeras del club de música.- La niña de hermoso cabello quebradizo le sonrió amablemente.

María estaba nerviosa, con miedo ante la reacción de su hermana, Morgan estaba sorprendida, pues ella no recuerda que su hermana estuviera en ningún club y ahora estaba con una niña que no conocía.

A Morgan no le es fácil socializar, era muy tímida y eso empeoró con el acoso que sufría por el grupito de Joel, lo que la hizo temerosa y desconfiada. Y ahora su hermana le presentaba una desconocida. Se sintió remplazada, se sintió triste, enojada.

Problemas en el Paraiso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora