Problemas en el Paraiso.

Capitulo 20

-En otras noticias desde la desaparición del hombre araña los crímenes han aumentado en la ciudad, enseguida entrevistaremos a los ciudadanos.

-El me rescató una vez, casi me secuestran y el lo evito es un héroe, sin duda la ciudad lo necesita, todos hablan de Iron man o de Thor que salvan al mundo pero nadie se acuerda de las personas normales que todos los días nos enfrentamos a peligros, hombre araña si ves esto te necesitamos.

Wade apago el televisor y sirvió la comida en los platos, apagando la estufa y acercándose a la puerta.

-Peter.- Toco la puerta de la habitación pero no hubo respuesta.- Peter amor tienes que comer.- De nuevo, silencio.- No me hagas derribar la puerta, se que estás triste pero no por eso vas a dejar de comer.

-Déjame.- Se escuchó todo triste y demacrado.

Wade suspiro y con una patada rompió la puerta de la habitación.

-¡Largo!.- Grito desde la cama echo bolita todo tapado.

La habitación era un asco, no entraba ni un rayo de luz ya que había bloqueado la ventana, sus cosas estaban tiradas por todos lados, incluso había comida echada a perder.

-No te haré caso, el enojo y la tristeza son los que hablan por ti.- Ya estaba a su lado y le quito la cobija.

Peter al instante lo empujó con tal fuerza que lo estrelló contra la pared rompiéndole las costillas y provocando derrames internos, de inmediato se lamentó por lo echo y se paró llorando de la cama.

-Wade... Yo....- No podía acercarse se sentía un monstruo.

-Esta bien, esta bien, estoy bien no llores amor.- Se despegó de la pared y lo abrazo.- Todo está bien.

Peter no pudo parar de llorar, Wade no lo dejó, se quedó a su lado y una vez estuvo más calmado lo acostó y le llevo la comida a la cama dándole de comer como si de un niño pequeño se tratara, Peter no podía dejar de lamentarse de si mismo y de nuevo las lágrimas salieron de sus ojos, Wade quiso decirle que no debía llorar mientras comía por que se podía ahogar pero lo dejo, dejo que sacara todo lo que sentía en ese momento, el enojo que sentía hacia el mismo y a sus padres, la tristeza por todo lo que dijo, todo.

Cuando termino de darle de comer a Peter limpio la habitación, acomodando las cosas de Peter en su mueble, sacando la ropa que estaba sucia, sacando la comida podrida.

-¿Que te parece si cuando termine de limpiar vamos al cine?.- Metió la ropa en el cesto. Peter no respondió.-¿O quieres ir a dar una vuelta? ¿Tal vez un café?.- Intentaba animar a Peter, que saliera del departamento.

-No quiero salir Wade.- Hablo tapándose el rostro con la cobija.

-Esta bien.- Terminó de separar la ropa y Neo entró corriendo a la habitación subiéndose en Peter y quitándole la cobija como si escarbara le lamio la cara.-¡No Neo!.- Wade tiro el cesto y tomó al can del collar.

-Tonto perro.- Dijo Peter mientras se limpiaba la cara y Wade lo sacaba del cuarto.

-No digas eso amor, el solo quiere animarte.- Con la puerta tirada bloqueo el paso para que Neo no entrara.

-Debes de pensar que soy un monstruo.- Peter se le quebró la voz.

-No, solo eres una persona herida que no sabe expresar lo que siente en este momento.- Wade lo abrazo.- Prepararé el agua para que te bañes.- Le sonrió y salió del cuarto.

Peter vio como Wade salía de la habitación y se sintió mal, se sintió culpable, sentía que lo estaba ocupando cuando sabía que no era cierto.

Wade ayudo a bañar a Peter, por que hasta para eso tenia una flojera y un sentimiento de depresión que ni quería bañarse, mientras Willson lo bañaba noto como estaba más delgado, ya no era el mismo, ya no tenía músculos, se veía pálido, no comer bien en los últimos dos meses le había afectado notablemente, haciendo que se preocupara. Cuando termino de atender a Peter el más joven se durmió ante la depresión que le causaba su situación. Wade suspiro, lo tapó bien y le dio un beso en la frente.