Capítulo 7

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A primera hora de la mañana después de haber dormido poco por la manera en la que iba abordar sus sentimientos y declararle su amor a Mallori, el marqués decide proponer que lo acompañen a desayunar Gisele y Mallori.
Gisele a pesar de haber intentado de mil maneras posibles demostrarle al marqués sus sentimientos, él se ha mostrado recto en su decisión, por lo que sin quedarle de otra acepta perder para siempre al hombre que ama.

Los tres se encuentran sentados en la mesa, Mallori no ha dicho nada durante un buen rato pensando que cuál sería la información tan importante que debe darle el marqués aunque para ella está más que decidida de irse de la mansión.
En mitad de un silencio algo incómodo, Mallori empieza hablar.

— Disculpe señor marqués, pero me gustaría anunciarle que he tomado la decisión de marcharme hoy mismo de su mansión. Lamento comunicarle de que mi familia estará preocupada y no quiero agravar más ese incentidumbre de pensar que algo me haya ocurrido.

— No sé preocupe mademoiselle, su familia fue informada por mí mismo donde se encuentra y como se encuentra. Por lo que tuve el atrevimiento de invitarles a venir hasta mi mansión. Espero que no le incomode mi apresurada invitación.

— No, pero tampoco termino de entender por qué ha invitado a mi familia a venir hasta aquí.

— Deseo darles una noticia. Pero antes debo comunicársela a vos. — Yannick respira hondo y sin apartar su mirada negra de la mujer que lo tiene hechizado le habla de su intención de casarse con ella.

— Disculpe señor marqués, su petición me ha dejado sin palabras, de hecho no esperaba viniendo de usted que me pida en matrimonio.

— Ya le comento que estoy interesado en vos, y me haría muy feliz de que acepte ser mi esposa. — Impaciente espera el sí de ella.

Sin embargo, Mallori no está muy convencida de querer casarse con el marqués después de haber presenciado como besa a la vizcondesa.
Aunque siente algo inexplicable hacia el marqués, Mallori prefiere levantarse de la mesa comunicándole con un hilo de voz muy segura de su decisión de no querer casarse con él.
Podrá sentir atracción hacia él, pero no iba a dejarse pisotear su orgullo.

— Lo siento señor marqués pero estoy muy agradecida por su interés en querer convertirme en su esposa. Mi respuesta es de no querer casarme con vos. Tengo mis motivos para rechazarlo y no estoy arrepentida de mi decisión.
Para mí el matrimonio no es juego, ni una posición social, significa amor, confianza y fidelidad.
Me da pena rechazarlo y estoy muy agradecida por todo lo que ha hecho por mí. — Alzando su barbilla con orgullo, Mallori desaparece ante la mira más oscura de un hombre que ha sido rechazado por primera vez por una mujer.

— Yannick, no te preocupes yo misma hablaré con ella. Estoy segura que la terminaré convenciendo para que te acepte.

Gisele se levanta de la mesa y va en busca de Mallori, donde se encuentra sentada en el jardín mirando su reflejo en la fuente.
Gisele se pone al lado de ella pensando en las palabras que le va decir y cómo le están lastimando por dentro creciendo el dolor de alejarse del marqués para siempre.

— Marjorie, disculpa mi atrevimiento. Vengo para hablar sobre la petición del marqués. Pienso que te equivocaste en rechazarlo. Conozco a Yannick desde hace dos años y es un hombre generoso, galán y apasionado.
Un hombre que cualquier mujer en tu lugar lo aceptaría con gusto.

— ¿Quién es Yannick? — Mallori se queda asombra de haber descubierto el nombre del marqués.

— ¿No sabes que el marqués de llama Yannick?

— No. De hecho no me interesado por su nombre de pila. Solo quiero hacer las cosas a mi manera sin salir perjudicada.

— Marjorie, mirame a los ojos, soy mujer como tú y puedo entender que trates de evitar tus sentimientos por mí culpa. Pero ya todo se acabó entre Yannick y yo. Él mismo me lo ha pedido y yo debo aceptar que aunque lo quiera no puedo estar a su lado. Él te ha elegido a ti. Una joven hermosa con buenos modales y pura.

EL SENTIMIENTO DEL NOBLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora