[Narra Nicole]
Ale y yo llevábamos como cinco minutos sentadas en la parada del autobús buscando camisetas en internet para Nico mientras este llegaba, ya que se había quedado en clase buscando su libro de matemáticas.
-Mira- le di un pequeño codazo para que prestara atención a la pantalla del móvil -¿Te gusta esta?- Ale hizo una mueca de desagrado y señaló una camiseta azul oscura que había más abajo.
-Creo que a Nico le va ha gustar más esta, ¿Cuánto cuesta?
-Cuesta quince euros, pero la azul no la hay de tu talla - le informe ya que pretendía comprarse una igual para ir los dos conjuntados.
-Pues...-se quedó pensativa durante unos segundos -Puedo comprarme una de esa talla y luego recortarla a modo de top.
-Es buena idea, no lo había pensado- comente con una sonrisa y gire la cabeza hacia el otro lado de la calle para ver si el autobús estaba cerca. -¿Esta tardando mucho hoy no?
-Quién, ¿Nico o el autobús?- preguntó Ale confusa.
-El autobús- aclare soltando una pequeña carcajada y me centré de nuevo en la ropa.
-Creo que lo voy a llamar- dijo Ale pasados unos minutos.
-Tia se habrá entretenido hablando con alguien, que ya conoces a Nico- la tranquilicé- Además que el autobús tampoco ha llegado y según pone en el horario de Internet es porque ha pillado atasco.
-Puf...- resopló agachando la cabeza.
-¿Estás bien?- la miré curiosa.
-No, he dormido super mal esta noche y estoy cansada- se quejó cruzándose de brazos.
-¿Y eso?, que pasa que Nico no te ha dejado dormir- bromee para animarla y vi como se sonrojaba.
-Que va tonta ha sido por culpa de una pesadilla- argumentó con una pequeña sonrisa.
-Ya, ya... por ahí viene tu monstruo- dije señalando a Nico, que venía corriendo hacia nosotras. Ale al verlo se levantó y le dio un beso corto en los labios.
-¿Lo has encontrado?- preguntamos las dos a coro.
-Que va, en clase no está y en objetos perdidos tampoco- nos informó Nico recuperando la respiración.
-Seguramente te lo hayan robado- supuso Ale algo apenada.
-Joder, mis padres me matan...- dijo llevándose una mano a la cabeza.
-Toma anda- le ofrecí mi libro- fotocópialo entero y mañana me lo das, que hoy no lo necesito.
-Gracias Nicky, eres mi salvación - dijo guardándose el libro en la mochila.
-De nada despistado- le respondí riendo y me levante al oír el pitido del autobús, que se estaba aproximando a la parada.
Cuando se paró entramos de uno en uno y después de pagar nos sentamos los tres en los asientos del fondo. Yo me coloque en el lado más cercano a la ventana y Ale y Nico a continuación. Como el trayecto no era muy largo y Ale y Nico se pusieron ha hablar de sus cosas decidí, como casi siempre, escuchar música para relajarme por lo que abrí la mochila para coger los auriculares y ya de paso saqué las llaves del bolsillo más pequeño. Al cabo de un rato vi de reojo como la pareja se empezaba a reír exageradamente.
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La rosa y la daga
Fiksi RemajaAitor, Nico, Alejandra, Noah y la recién llegada Nicole pensaban que el comienzo del curso para algunos en Fr. Lauderdale sería duro, pero lo que no sabían era que estaban muy equivocados. Las complicaciones típicas de un adolescente más una oscura...