DEADLY ROMANCE CAMREN

Episodio 7: ABRE LA BOCA

LAUREN

Se acercaba diciembre cada vez más, esperaba pasar la última estación del año acompañada, haciendo un recuento de las últimas semanas tras haber revelado mi inconformidad hacia Mike Jauregui, no voy a tratar de mentir, tras las paredes que me rodean, eh temido más de una vez, no por mí, sino por Camila, pese a que eligió estar a mi lado, me preocupaba que se cansase de esta vida, pues al dar un giro inesperado, me asustaba que se marchara, o descuidos en donde ella dejase de respirar, me oprimía el pecho, mi mente viajando a escenarios totalmente repudiables.

No existían más personas a las que le pudiera confiar mi vida o la de Camila que a Vic y Verónica, quienes se las han visto de todas con su padre adoptivo, están amenazados, me pesa que ellos no tengan la consideración de querer aceptar mi ayuda, quiero protegerlos, hoy no está siendo una buena tarde.

Camila ha llegado molesta, traspaso la entrada de mi estudio, por la mañana yo tenía que hacer revisiones de currículos sobre mí para empezar algo nuevo. Lo había prometido, se lo había prometido, pero al dar las 5, las puertas se azotaron contra la pared y una muy enfadada Camila entraba por ellas.

-¿Qué sucede? – Pregunto asustada. La había examinado con cuidado, su rostro estaba contraído en una mueca, pero sin lesiones, su cuerpo en perfecto estado, ¿Entonces qué pasaba?

-La atención es lo que sucede – Ella gruñe y detrás, dos cuerpos gimiendo por aire y sudando de cansancio se posaban detrás de ella.

-Explícame – Le exijo pues sigo sin entender.

-Lauren, ellos no pueden acompañarme a cada sitio que voy, es decir, si al bufete, no completamente dentro de él. – Ahí tuve que intervenir.

-Ustedes retírense, cierren la puerta por favor. – Ellos asintieron, temerosos.

Mi atención fue directo a ella, a mirarla directo a los ojos, no quiero que piense que quiero controlar su vida, de ninguna manera, pero no puedo correr el riesgo de que algo le ocurra, que difícil era esta mujer.

-Por favor Camz, siéntate y hablemos – Ella dudo, pero lo hizo.

-¿Tienes una idea de la preocupación que paso todos los días que sales al trabajo? De pensar siquiera a que algo, por más mínimo que sea. No quiero que pienses que quiero controlar tu vida, yo... - Me interrumpió.

-Basta, no trates de usar <<Eso>> que haces, manipularme con lo que digas, mi disgusto es muy claro. – Suspire.

-Está bien, si, lo entiendo, están invadiendo tu espacio – Esta vez, mi mirada sería un poco diferente, creí que proyectaría mi preocupación, no pude evitar un tono bajo.

-Lauren, entiendo, yo también lo entiendo, sé que quieres que este segura – Asentí, me levante de mi asiento y camine hasta quedar frente a ella, tome sus manos y le di un beso los dorsos de cada una.

-Quiero que entiendas lo importante que es tu seguridad para mí, estoy empezando algo nuevo, algo honesto contigo, pero estas en peligro, no puedo dejar que nadie te toque para hacerte daño, tu bienestar es lo primero que debo cuidar, ¿Sabes por qué?, porque te amo, hablare con ellos.

Ella soltó un suspiro y dio un pisotón. Se abrazó a mí y me estrecho muy fuerte.

-¿No lo harás, cierto? – Yo sonreí y me separe de ella, no sin antes darle un beso fugaz.

-No, claro que hablare con ellos, no estarán dentro, invadiendo tu espacio, pero a la primer sospecha, harán lo que sea necesario, yo no estoy jugando.

-Eres imposible – Negó con la cabeza, rendida, en lo que llevábamos juntas viviendo aquí, no habíamos chocado mucho, mi intención es cuidarla. – Mmm hay algo más.