Año 1: Hogwarts, el pequeño mortifago y la piedra filosofal

Capitulo 09: Adiós mi vieja vida

Finalmente el tiempo dentro del castillo Rosier había finalizado para William y era tiempo para su ingreso en Hogwarts, un mes de espera no era corto pero comparándolo con los fanáticos que jamás tuvieron la oportunidad entonces esto no era nada. No había mucho que decir, se despide de Vorona y le pidió que cuidara de su habitación mientras él no estaba, arreglo los baúles y maletas preparado para salir cuando noto que su abuelo estaba esperándolo.

"Es hora de que tomes el expreso a Hogwarts, sujétate de mi brazo y recuerda mantener todas tus extremidades cerca, esta vez no puedo regenerarte en medio de todas las personas"

Otra vez utilizaron la aparición, William no estaba muy cómodo usando ese método de viaje pero al haberlo experimentado la primera vez ahora no parecía ser tan incómodo como antes, claro eso no quiere decir que fuera cómodo.

"Aquí estamos" la voz apagada de lord Rosier no era nada fuera de lo normal en cambio el tren frente a William era lo especial. Había muchas personas en la estación lo que incomodaba al anciano Rosier pero William no tenía intenciones de preocuparse por el anciano y solo camino al frente con sus pertenencias sobre el carro.

"la plataforma nueve y tres cuartos" murmuró William sorprendido y emocionado, tenía el cerebro lleno de ilusiones sobre su vida escolar y todos los hechizos que aprenderia, ahora mismo era lo más similar a un niño con un videojuego nuevo, impaciente por entrar pero antes de poder hacerlo fue jalado desde el cuello de su ropa con el bastón de lord Rosier.

"Espera" dijo el anciano deteniendo a William "aun tengo muchas cosas que decir y que no te dije antes en la mansión ya que no eran importantes debido a tu condición, pero debes saberlas antes de subir al expreso"

"Hogwarts tiene cuatro casas eso ya lo debes saber, nuestra familia siempre ha sido residente de la casa Slytherin eso incluye a tu primo Felix Rosier, entraras en Slytherin como se espera pero en el caso de que sea otra casa no habrá mucho problema eres un Rosier después de todo, solo te advierto que te mantengas alejado de los problemas como sabes no somos populares entre los magos" lord Rosier puso sus manos viejas sobre los hombros de William y lo miró fijamente "Y nunca hagas amistades con los sangre sucia, no dejes que el valor de nuestra familia decaiga por tu culpa"

William no era idiota, entendia muy bien a las familias de sangre pura y sabia de sus absurdas reglas, no esperaba romperlas despues de todo era el destino que estuviera en Slytherin, alli no habia personas de sangre sucia, ahora solo tenia que evitar estar en problemas, aquello tampoco era problema, solo tenia que estar lejos de Harry Potter y sus amigos.

William se alejó de su abuelo, no quería estar cerca del anciano y sus costumbres tradicionalistas, la verdad no le importaban las costumbres, ahora que estaba en un mundo lleno de magia lo único que le importaba era la magia en sí.

Una vez dentro del expreso fue fácil acomodarse en un compartimiento vacío, había llegado mas temprano de lo normal por lo tanto aún no habían muchos estudiantes dentro del tren.

Sabiendo que no estaría cerca de los problemas sacó un libro para leer, no había practicado lo necesario debido a su problema con la magia pero sabia que tenia que concentrar sus esfuerzos en la clase de Severus Snape es decir la clase de pociones, siendo un Slytherin tendría cierta protección pero William quería la simpatía de este profesor y la forma de ganarla sería siendo el número uno en su clase siendo de su grupo de estudiantes.

Aun cuando Hermione Granger estaba lista no tenía la oportunidad de ganarse la simpatía de Snape solo por el hecho de ser de la casa Gryffindor.

"Adoraría tener un par de auriculares" murmuró William recordando su vida anterior y su costumbre de estudiar mientras escuchaba música, aquel recuerdo de su vida pasada ahora era muy distante pero de alguna manera también era preciado, lamentablemente aún no se habían inventado los auriculares y en Hogwarts no podían entrar los productos tecnológicos muggles.

La puerta de la nada se abrió revelando la figura de aquel joven que William había visto en la tienda de varitas Ollivanders, el legendario Harry Potter.

"H-hola" saludó Harry nervioso pero logró reconocer al joven recostado a lo largo sobre el asiento, él mismo sabía que era el observador de la tienda de varitas "¿puedo sentarme aqui?" preguntó el niño y William no le puso mucha atención simplemente sacó su mano del libro

"Los asientos no son de mi propiedad, úsalo como gustes" dijo William con un tono aburrido sin quitar su atención del libro, como un estudiante con experiencia sabía cómo lograr concentrarse adecuadamente.

Harry estuvo en silencio un buen tiempo, no dijo nada esperando no molestar a William, el mismo se lograba sentir levemente mal al ver la ropa casual de William, mucho más elegante de lo normal, incluso su tío Vernon y su primo Dudley Dursley no tenían la oportunidad de usar ropas así de elegantes.

Pronto el expreso se puso en marcha, el silbato sonó y la estación se quedó atrás. William aún estaba inmerso en su libro, sabía que había alguien en el compartimiento pero no se había dado cuenta de la identidad de la otra persona, esperaba que fuera solo un extra ya que escogió el lado contrario que el de la película.

La puerta finalmente se abrió otra vez y ahora estaba otro de los protagonistas originales de la saga, esta vez otro miembro de los sagrados veintiocho, sexto hijo del matrimonio Weasley, Ronald Weasley.

"emm... ¿les importa?" pregunto el pelirrojo incomodo "Todos los otros compartimientos están llenos"

Harry miró hacia William pero este simplemente no parecía importarle por lo que Ron entró con tranquilidad y se sentó a un lado de Harry "soy Ron, Ron Weasley, un gusto" extendió su mano hacia Harry quien respondió con una sonrisa al pelirrojo.

"Yo soy Harry Potter" devolvió el apretón de mano sorprendiendo tanto al pelirrojo como a William quien estaba en su libro y simplemente se sentó en el asiento maldiciendo su suerte en su mente.

"por las barbas de Merlin, eres tú" mencionó Ron sorprendido "¿realmente eres ese Harry Potter, el que tiene eso..?"

"¿eso?"

"Ya sabes..." Ron señaló su propia frente "la marca"

Harry respondió levantando su cabello para mostrar la marca hecha durante su tiempo de bebe, William también vio la cicatriz pero en cambio sólo pudo bostezar debido al sueño.

"¿cual es tu nombre?" pregunto Harry mirando a William, Ron finalmente puso su atención en la persona frente a él y solo pudo hacer una expresión de terror, la apariencia de Will era básicamente la misma apariencia de su padre.

"William Rosier, un placer" se presentó el niño con una leve sonrisa llena de aburrimiento, no quiso agregar ningún comentario halagador hacia Harry ya que este mismo no era especial al cien por ciento y de hacerlo solo genera molestia en Ron, lo que menos necesitaba ahora mismo eran problemas.

"¿tú eres ese Rosier, verdad?" pregunto Ron

"¿ese?" devolvió la pregunta mirando al sexto Weasley

"ya sabes, el heredero de la familia, el que se dice que no tiene magia, mi papá me habló del asunto" mencionó Ron.

William no pudo evitar reír en silencio, tener a un squib como heredero simplemente era una bofetada en la cara para una familia tan arrogante como son los Rosier, William podía imaginar la vergüenza que sintió su abuelo pero también debe haber estado contento cuando se enteró del despertar de la magia en el interior de William, ahora tiene sentido el por que dejo que obtuviera el libro que quisiera.

"Si, soy ese Rosier y como puedes ver tengo magia, justo en el tiempo que hacía falta" William abrió el libro en sus manos "ahora como pueden ver tengo que estudiar para ponerme al corriente del curso, no quiero ser el hazme reír de todos por no saber nada, siendo un tanto famoso pero claro no tanto como el señor Potter"

Harry miró fijamente a Will y pareció darse cuenta de su error, tampoco sabía nada sobre la magia y el simplemente estaba allí perdiendo el tiempo, claro no tenía mucho por hacer ya que sus libros estaban en el compartimiento de carga.

"No tienes que preocuparte Harry, somos de primer año, las clases comienzan enseñando lo básico, no es como si tuviéramos un examen de entrada" Ron dijo contento mientras le daba unas palmadas en el hombro a su nuevo amigo, Will solo pudo suspirar en respuesta, al parecer Harry Potter no se salvaría de la humillación de parte de Snape.