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Pov Hai

—¿¡Dónde "mielda" está Poni!? —grité desesperado por la radio mientras me cubría para que no me dispararan.

—Hai tranquilizate, han abatido a Toni pero se lo están llevando los EMS —informó Salinas, eso solo hizo que me pusiera más nervioso.

—¿¡Cómo que lo han abatido, dónde!? —grité exaltado.

—Por lo que estoy viendo solo le han disparado en un hombro y el abdomen pero está estable por lo que me están diciendo —respondió Salinas de nuevo, yo suspiré aliviado de que no hubiera sido en ninguna arteria ni órgano vital.

—Está bien, luego "ilé" a visitarle al hospital —dije para salir y seguir disparando a los policías abatiendo a dos.

—Hai, no puedes ir al hospital, sería demasiado sospechoso e inmediato, lo mejor será que Carlo y yo os vayamos informando de como está —advirtió Salinas.

—Voy a "il" a donde me salga de los huevos y si tengo que "il" al hospital "pala" "visital" a Poni "ilé". —decidí para luego apagar la radio y así Salinas no me desconcentraba, el tiroteo aún no había acabado.

(.....)

Pov Toni

Desperté con un leve dolor de cabeza y desorientado, intenté girarme pero sentí unas punzadas en mi hombro y abdomen haciendo que soltara un quejido, giré la cabeza como pude y miré a mi alrededor.

Estaba en un hospital, no llevaba camisa y tenía un parche que cubría parte de mi abdomen, también tenía vendaje en el hombro afectado, intenté hacer memoria y me acordé del tiroteo, salí de donde estaba para reanimar a Jose y después de eso todo era negro, supuse que me habían abatido.

Me sobresalté al notar como algo se movía en el borde de la camilla, miré mejor tañando mis ojos y pude diferenciar en la oscuridad la silueta de una persona, con el pelo aparentemente negro.
Me removí un poco inquieto intentando acomodarme sin despertarlo.

Gran error, eso solo hizo que despertara.

—Mhnmmm —musitó moviendo levemente la cabeza, yo me quedé pétreo.

Al final para mi mala suerte acabó despertándose, yo a pesar de no ver su rostro sonreí tontamente.

—¿Poni? —dijo aún soñoliento, yo noté como el pulso se me aceleraba al haber reconocido esa peculiar voz.

Él al ver que no respondía se levantó y encendió la luz de la sala, haciendo que achinara mis ojos por la repentina iluminación.

—¿Cómo has entrado? —pregunté con voz ronca.

Él suspiró y se acomodó sentándose a un borde de la cama.

—"Pol" el día no dejaban visitas que no "fuelan' ni tu "helmano" ni Salinas, así que "espelé" a que se "hiciela" de noche "pala" "entlal" —explicó.

—¿Pero no mataste a nadie no?

—Bueno, tuve que "dejal" inconsciente a un "pal" de "gualdias" "pelo" "solo" eso —dijo como si fuera lo más normal del mundo, yo no pude evitar reir levemente—¿Cómo estas?

—Diría que bien, solo siento un poco de dolor en el abdomen y hombro pero por lo demás estoy perfectamente.

Hubo un silencio por unos minutos.

—¿Qué hora es?

—Las "cuatlo" de la mañana —respondió mirando su reloj de pulsera dorado.

¿Solo un Sugar daddy? ||| HANI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora