𖠲𖡺¡Maldito calenturiento!𖠲𖣯𖤐

ᴄᴜᴀᴛʀᴏ

Narra Asui ______

Volvemos a la misma mierda, me desperté ahí sentado en la silla, con los pantalones abajo, todo mojado, parece que me había meado.

Me intenté parar, y lo logré aunque me temblaban las piernas; limpié la mesa y me limpié también a mi. Fui a la cafetería porque hace hambre y ni cené por mis putos deseos sexuales de mierda, al llegar pedí lo que hubiese y me senté a comerlo, al momento llegaron los dos putos que me dejaron casi inválido.

- Ey ____, feo y horrible _____; ¿Ya me das mi suéter? - preguntó el peliazul.

- No, y si a eso vienen váyanse a la mierda - continúe comiendo.

- ¿UuH? Kiss kiss - Yuri-kun se acercaba intentándome dar un beso.

- Yuri-kun no tengo pan pudín, por si eso es lo que querías - igual plantó un beso en mi frente.

- ¿Y si tenemos sexo, nos devuelves nuestros suéteres? - al escuchar eso casi me atraganto, tosí un poco.

- ¿Quieres verme caminar, hijo de puta? - me mostré enfadado - Mírame - me levanté de mi asiento agarrando mi desayuno.

Me puse a caminar aunque era algo pesado y difícil por el dolor aún presente.

- ¡Ay! camina chueco - se reía - Ay camina chueco cosita fea - me seguía mirando mientras intentaba escapar.

Intenté correr, y lo logré los primeros segundos, fue en vano, me caí pero salvé mi comida, todos seguían hablando y algunos se burlaban.

- Más patético no pudiste verte - dijo Tamura-kun para proceder a quitarme los suéteres, pero me agarre fuerte al suéter.

- Suéltame, suéltame ¡TAMURA! - empecé a golpearlo.

- Pero qué desobediente saliste ____ - dijo Tamura con una tono un tanto enojada.

- O si... y merezco un castigo por eso, aceptaré lo que sea - respondí de forma provocativa y mordí mi labio inferior para después tomarlo de la barbilla para plantar un beso en sus labios.

Beso que se intensificó por parte de él y que correspondí con mucho gusto, lleve mis manos hasta debajo de su camisa, cosa que también el hizo tal vez intentando quitarme los suéteres. Nos estaban mirando todos, pero no me importa me estoy calentando y eso en público no es tan bueno.

De un momento a otro se detuvo el beso y los movimientos con sus manos, lo miré y estaba sonriendo de una forma malvada.

- ¿Qué pasa? -

- Ese es tu castigo - se acercó a mi oído - dejarte a medio calenturon - susurró, se levantó y se fue.

- Maldito... Sabe muy bien que es la puta cosa que más me enoja y me frustra y ahora estoy como idiota tirado en el suelo.
Pensé.

Comencé a comer ahí tirado en el suelo, y después con mucha dificultad me levanté y caminé hasta mi aula, me senté y por obra de magia sonó la campana dando inicio a las clases. Aburridas las clases como siempre y les contestaba a los maestros y compañeros con palabras no muy "aptas".

Era la última clase antes de receso y apareció la persona que por el momento no quería ver.

- Buenos días jóvenes, les escribiré la actividad sobre las palabras que van a escribir a Kanji, quien tenga todas bien, se gana un punto extra - todos se sorprendieron - jaja claro que no, pero ganan aprendizaje - prosiguió a escribir en la pizarra.

Yo me iba a dormir en su clase, realmente no me importa el maldito Kanji.

- ______ necesito que vengas conmigo - eso captó mi atención.

Me paré de mi asiento con dificultad y obedecí siguiéndolo.

- ¿Y? ¿Qué quiere hablar conmigo? -

- Sobre tus faltas a esta institución, tu avance en mi clase y cómo tratas a los demás - se mostró serio.

- Oh ya, mi actitud de mierda, ya veo -

- En primera eso, en segunda ¿se te hace fácil el Japonés? Y en tercera, estás en un problema por tus actitudes y comentarios innecesarios - soltó un suspiro.

- Me va bien con el Japonés y no sé de qué comentarios estás hablando - solté sin ninguna dificultad.

- Escuché el comentario que le dijiste a tu compañero de que - se aclaró la garganta - se veía muy sexy o algo así -

Agarré los huevos que me faltan y me mostré valiente.

- Ahh eso, no era para mi compañero, era para usted, y pensé que lo estaba pensando, pero no - me sonrojé un poco y él me miró.

- Si te parezco sexy tal vez podríamos - guardó silencio - ya sabes, tener sexo; además estás en el club de fotografía -

- ¿Me va a subir la nota si lo hago? - lo miré.

- No, o tal vez si, depende de lo que hagas y como lo hagas - respondí con un "bien".

Nos fuimos al salón de nuevo, ya habíamos elegido una fecha para que le rogará porque me diera más, ya en clase hice como que hacía algo pero no lo hacía y así; pedí permiso para ir al baño, igual ya casi terminaba la clase.

Era hora de sastifacerme para estar de buen humor, me fuí al cubículo de hasta el fondo, me quite mi pantalón y mi bóxer; puse mi mano alrededor de mi verga, comencé a mover mi mano violentamente de arriba a abajo.

Comencé a soltar gemidos y sollozos, no tenía miedo de que alguien me encontrará en esa situación, pues quién se estaría jodiendo serían ellos. Al imaginarme él como sería el profesor en la cama me prendió más, lamí mis dedos y los llevé a abajo y los moví dentro.

Esta vez gemía ahogadamente ya que no quería que sonarán tan fuerte y llamará tanto la atención.
Escuché que alguien había pasado por la puerta y caminaba. La adrenalina me aumentaba mi excitación. Tocaron la puerta de mi cubículo.

- ¿Estás bien? - preguntó una voz fuera.

- Mierda no cerré bien la puerta.
Pensé
Terrible error no haberlo hecho.

Abrió la puerta encontrándose a un pequeño _______ metiéndose sus dedos con un sonrojo muy notable.

- ¿Que mmierda estás viendo? VEN Y PONLA DENTRO - le ordené y me hizo caso.

La puso dentro, estuvo moviéndose un buen rato, lo hacía bien, era suficiente para sastifacerme; la metió toda con cada estocada y esto hacía que sonará como aplausos, de corrió dos veces y se detuvo.

- Muchas gracias por esto ehh, ¿Cómo te llamas? - respondí.

- Vamos en el mismo salón, soy Reiki, un gusto - sacó su pito - lámelo - puso su pene frente a mi y ¿Cómo no iba a aceptar darle una mamada?.