MEW.
Decir que me pasé la mañana entera alterado era poco, no podía siquiera pensar en otra cosa que no fuera Gulf compartiendo casa con Kao. Sentía mi cuerpo temblar cada vez que pensaba en ello, solo quería salir corriendo e ir a casa a cuidar a mi bebito.
Así que en cuanto me topé con la montaña de trabajo acumulado, las ganas de brincar por la ventana me sobraron, sin más solo me limité a hacer todo lo que pudiese y en la hora del almuerzo volar a casa.
Y así lo hice, mi mente quedo absorta en trabajo haciendo que me sobresaltara cuando el reloj marcó las 12 e hizo su típico y molesto ruido de despertador. Tomé mis cosas, ignoré a todos y corrí como pude al auto para emprender el camino de regreso a casa.
Al llegar, estacioné el auto de una manera rara y simplemente salí, ni me interesaba si terminaba multado. Respiré hondo, demasiado hondo, debía sentirme listo para cualquier posible situación. Caminé con paso firme hasta la entrada, saco las llaves de mi bolsillo y entro con cuidado a la casa.
—¿Qué?— Musité confundido dejando caer mis cosas al encontrarme con sangre en todo el piso, mi mente rápidamente pensó en lo peor y corrí sin pensar a la planta de arriba. —GULF.— mi voz salía rara y ni siquiera llegó a ser un grito, sentía como la desesperación subía por mi cuerpo mientras iba habitación por habitación en busca de mi pequeño mientras repetía su nombre una y otra vez.
—MEW, VEN RÁPIDO. — Gritaron desde mi cuarto, sin dudas no era la voz de Gulf si no que era la de Kao. No podía sentirme enojado, solo confundido, si él le habría hecho algo no me estaría pidiendo que fuera. Caminé sintiendo todo mi cuerpo como gelatina hasta mi cuarto donde entré y no pude evitar soltar un grito.
La habitación estaba completamente teñida de rojo, las sabanas tenían manchones de sangre, las cortinas parecían arrancadas y las mesas de luz se encontraban tiradas con los veladores rotos. Mild se encontraba en una esquina inmóvil con su ropa repleta de sangre, parecía no respirar y el miedo me envolvió enseguida. Gulf no se encontraba a mi vista pero sus sollozos se hacían presente en la habitación, así que caminé hasta el otro lado de la cama donde se encontraba mi pequeño siendo agarrado y examinado por la cara preocupada de Kao.
¿Qué pasó aquí?— Pregunté en voz baja mientras me agachaba para agarrar a Gulf en brazos, su carita estaba lastimada y solo lloraba sin abrir los ojos, con miedo. —Amor, estoy aquí, soy yo. — Susurré pegándolo a mi pecho.
—Me fui a comprar ropa y cuando llegué me encontré con esto.— Susurró Kao con cara de mosca muerta. —Gulf dijo que intentaron robar y no se quién es el niño de allá.— Señala a Mild con la cabeza.
—Minnie. — Murmuró Gulf comenzando a llorar con ganas e hipidos incluidos. —Ma...ma...mató a Mi...minnie. — Tartamudeó entre llanto. ¿Muerto? ¿Mild estaba muerto? Rápidamente pensé en Hun, en lo enamorado que estaba de aquél niño y mis ojos se llenaron de lágrimas. Mild se había convertido en familia en todo ese tiempo, no debía ser posible que ya no lo sería más.
¿POR QUÉ NO LLAMAS A LA POLICÍA? ¿EH?— De la nada estaba enojado conmigo mismo por no haber estado en ese momento. Kao se sobresaltó por mi grito y tomó el teléfono saliendo de la habitación ya que los llantos de Gulf no lo dejaban escuchar.
—Gulf, calma, aquí estoy, soy Mew. — Acaricié la poca parte de su rostro que no estaba lastimada intentando tranquilizarlo.
—Daddy. — Continuó lloriqueando mientras se aferraba a mi chaqueta manchándola con sangre. —No...no...no le...le cre...— No pudo terminar la oración porque sus ojos se cerraron quedando inconsciente, sacudí su cuerpo despacio intentando despertarlo pero no funcionaba.
—TRAE LA AMBULANCIA RÁPIDO. — Grité lo más alto que pude para que Kao pudiera oírme del otro lado de la puerta y solo me quedé balanceando a Gulf en brazos.
Mi mente no era consciente de lo que pasaba a mi alrededor, no quería procesarlo, no quería pensar en Mild que se encontraba detrás, ni en Gulf que estaba en mis brazos, mis oídos se taparon dejándome completamente aturdido. No sabía en qué momento un par de señores agarraron a Gulf sacándolo de mis brazos y alumbraron mis ojos con pequeñas linternas, intentaban llamarme pero el aturdimiento era más grande y a pesar de que se encontraban a pocos centímetros de mí, los escuchaba súper distante.
Lo único que logró que volviera en mi fue la pequeña vocecita de Gulf llamándome desesperadamente, lo busqué por toda la habitación encontrándolo en manos de los paramédicos, caminé como pude hacía ellos contemplando como se llevaban al pequeño Mild en una camilla, tragué saliva para intentar deshacer el nudo de mi garganta ¿Cómo le diría eso a Sehun?
—Aquí estoy.— Atrapé a Gulf en brazos ya que se había soltado del agarre de los médicos y se había tirado sobre mi. — ¿A dónde lo llevarán?— Le pregunté a los altos hombres vestidos de blando.
—Al Centro médico Asan. — Respondió sin más revisando una pequeña agenda.
—Yo lo llevaré entonces. — El hombre asintió y palmeó el hombro de su compañero que se encontraba contemplando el cuarto.
—Encárgate de llamar a los familiares del otro muchacho.— Le dijo, haciendo que Gulf volviera a llorar de nuevo. —Lo siento. — Hizo una pequeña reverencia en forma de disculpa y salió del cuarto con su compañero pisándole los talones.
—Todo estará bien, confía en mi, pequeño. — Tranquilicé a Gulf acariciando su cabello intentando que dejara de llorar, sin más dejé de intentarlo y lo abracé para que llorara todo lo que debía llorar, sin dudas sería difícil para él a partir de ese momento. Sin Mild, Gulf sufriría mucho.
WOW CHICAS YA FALTA POCO PARA EL FINAL LES DIGO ME ESTOY LEYENDO LA HISTORIA JUNTA PERO ESTO CAP NO LOS PUEDO LEER POR QUE ME PONE MUY SENCIBLE.
NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y COMENTAR😢☔
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~Yes, Daddy [MEWGULF] Adaptación~
FanfictionAhora? Mew sonríe al ver las acciones de su menor. -Ahora me haces tuyo, Daddy- Gulf sonrojado comienza a desprenderse la camisa." →Portada hecha por Titi bby ♥ →Contenido %100 homosexual (Si no te gusta, no critiques) esta historia le pertenece a @...