El sol

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Lance había muerto.

Había muerto y revivido. Si estuviera de humor lo compararía con Dios, ese también había resucitado, pero Keith no estaba de humor y tan pronto tuvo a Lance a la vista corrió para abrazarlo. Lo sujetó tan fuerte como pudo, estaba temblando del miedo que sentía. Keith estuvo a punto de perderlo, de perder a su mundo entero y la sola idea era suficiente para dejarlo sin dormir.

Lance era un sol, era un rayo del luz en la vida de todos y cualquiera que lo conociera quedaría encantado. A Keith muchos le veían como la luna y terminaban llamando a su peculiar relación como la relación de la luna y el sol, pero Keith lo veía de otra manera, le gustaba verse de otra manera.

Para Keith todos eran girasoles, todos menos Lance, Lance era el sol, era esa persona que a todos agradaba y era su don, un don que no muchos tenían y uno bellísimo. Un don bello para una persona bella. Y es que Lance era la personificación entera del sol, con su piel bronceada y risas eternas, dios Lance emanaba calor y luz. Y Keith era suyo. Había decidido que Lance podría hacer de él lo que le plazca y le daría las gracias. Keith era un girasol más, que pasaba sus días buscándolo y pensando en él, solo que Keith no solo quería tenerlo cerca y gozar de su luz, Keith quería quemarse.

— Ya viste que se siente horrible. — dijo Lance con una sonrisilla

—¿Qué?

—Enterarse que el amor de tu vida estuvo a nada de morirse, a qué no es nada lindo eh

Keith no pudo decir nada, así que lo abrazo más fuerte. Nunca había sido mucho de palabras y no importaba porque sabía que Lance lo entendía. Siempre lo hacía.

***

Ahora parecía un momento de penumbra, Lance estaba rodeado de su gente, y los demás lloraban. Keith había llorado también, había llorado de alivio porque Lance seguía vivo, y había llorado por Allura que se había sacrificado, pero sobretodo de alivio. Si no hubiera tenido tanta suerte, de no haber sido por Allura, en estos momentos estaría destrozado, quebrando todo lo que se le cruzara y quebrándose su cabeza al mismo tiempo porque definitivamente no podría seguir sin Lance; estaría como Coran. El pobre de Coran ni si quiera se había podido despedir de Allura, ni siquiera una mirada. Coran estaba. No había otra manera de decirlo, era como si no estuviera en mente, solo en cuerpo, tenía la mirada ausente como si estuviera en otro mundo, no sabía cómo regresaría o si era mejor dejarlo soñando a que regresara a su pesadilla en vida: una vida larga y sana sin Allura. Definitivamente estaba aliviado que no fuera si caso, Keith tenia a su sol.

Pasó un tiempo para que les dieran el alta en los hospitales, todos querían checar al cien que estuvieran en excelentes condiciones tanto físicas como psicológicas, aún con el alta tenían que ir a ver a un psicólogo cada semana, pero estaba bien.

Hunk había dicho que se iría por toda la galaxia a ver recetas, que se iría con Shay, su novia extraterrestre, era buena para él lo había seguido hasta la tierra solo para ver cómo estaba y no se había despegado de él. Shiro había estado destrozado al enterarse de la muerte de su novio Adam, había estado aislado de todo, pero después de un tiempo había empezado a hablar con la gente. Pidge se quedó con su familia, no se despegaba mucho de ellos a menos de ser necesario, también había iniciado cosas de ciencia, la verdad Keith no tenía mucha idea de que hacía y la mayoría de las veces parecía científica loca, pero ella era feliz entonces estaba bien.

Keith no sabía que quería hacer con su vida, solo que quería pasarla cerca de Lance. Los dos habían comprado una casa, aunque de comprado no había mucho puesto que el gobierno estaba casi regalándoles todo lo que necesitaban si estaba a su alcance. Era una casa linda, en el campo y con miles de flores a toda vista, con muchas ventanas para que siempre tuviera luz del sol y un campo donde estaba la Vaca de nombre raro de Lance... si un día llegaban a decidir tener otra mascota o algún hijo sería él quien eligiera los nombres.

Lance pensó mucho sobre si quedarse de granjero y por suerte Keith lo saco de la idea, se notaba que quería seguir sus sueños en el espacio, lo había convencido de que podrían regresar siempre que quisieran y esta vez no dejaría su lado ni aunque hubiera otra guerra.
Lance también empezó a dar clases en Garrison, era un maestro estupendo, trataba a los estudiantes con el debido respeto y nunca los hacía sentir menos o tontos ni nada por el estilo. Keith visitaba orfanatos y llenaba de historias el ambiente, nunca lo admitiría pero tenia una debilidad por los niños.

Fueron años después, llenos de aventuras por el espacio, de generaciones de graduados que Lance y Keith se aventuraron a dar otro paso. Iban a adoptar a un niño. Y entonces otra aventura iniciaba.

N.A.
Bueno va a ser apresurado o lo que sea pero ya no sabía cómo seguirle y me harté, entonces hice esta cochinada y ajá

Igual en algún momento le doy un buen final pero idk no esperen mucho.

Tho subí Libertad después de la condena un two shot que eso sí prometo esta bueno, ya lo tenía escrito bien y esta muy chido según yo.

En fin los quiero mucho besos! <33

Silence Donde viven las historias. Descúbrelo ahora