Un Día Para Sobrevivir

Capítulo 5

La puerta de la habitación fue abierta, él peligris se encontraba asustado por las voces que se escuchaban ya que eran varías, por las rejillas del armario podían ver claramente lo que estaba pasando.

Habían entrado dos alfas arrastrando a una Omega, la aventaron a la cama riéndose de la apariencia de la chica, tenía aproximadamente 18 años y los dos tipos más de sus treinta, el olor a feromonas inundaba la habitación, él peligris trato de mover su cuerpo, quería ayudar a la mujer, era claro que ella estaba influenciada por las feromonas de los Alfas aunque su cuerpo y olor demostraban lo contrario su cara estaba llena de dolor.

Fue detenido por él castaño, lo agarro fuertemente de la cintura manteniendo su otra mano en la boca del chico.

Quería protestar pero se detuvo cuando los hombres quitaron la ropa de la mujer, traía uniforme escolar de la preparatoria A, está se ubicaba a unas cuadras de la universidad que estudiaba, era un lugar que solo asistían mujeres de cualquier género secundario.

-Siempre te miraba en la clase usando esa pequeña falda provocando que fantaseara todo el día en lo que se encontraba abajo -habló él más grande de los dos, traía un traje café desaliñado y unas gafas gruesas, miraba a la chica mordiéndose los labios, Ron se sintió asqueado por las palabras del hombre ya que por lo dicho podría tratarse de un maestro.

-Y ahora aquí estas gimiendo bajo nuestro cuerpo -él otro Alfa dijo mientras golpeaba leve la mejilla de la estudiante.

Había estado tan ensimismado mirando la escena que ocurrió frente a él que había ignorado las feromonas que flotaban alrededor de él, cuando se dio cuenta ya estaba lo suficiente afectado, un Omega puede entrar en ciclo de calor a causa de las feromonas de un Alfa y ocurre más cuando nunca se ha tenido un celo, como no es un Omega normal casi nunca trae consigo supresores.

Mientras él peligris procesaba lo que están ocurriendo con su cuerpo, los Alfas ya no podían esperar para marcar a la chica como suya, había sido una suerte que la ley suprema fuera activada cuando estaban terminando las clase, fue más fácil poder secuestrar a la Omega pero habían tenido que atravesar el caos de la ciudad, ni siquiera podían creer que seguían vivos en este momento solo deseaban tener a esa hermosa pelirroja entre sus brazos.

Él Alfa de lentes tentó la parte inferior de la mujer, tocando un punto que esperaba fuera él primero en estar ahí, y como fue, la resistencia para entrar y la pequeña barrera que había le confirmaba que eran los primeros.

-Umm así que no eres tan pura como lo parece -Se burló de la chica  introduciendo un dedo, la chica gimió de incomodidad pero fue callada con la boca del Alfa rubio -mira como aportas mi dedo, ¿tanto te gusta sentirme?.

Seguía diciendo cosas vulgares haciendo su labor, él Alfa rubio  callaba cualquier quejido que salía de la chica distrayendola, besandola y tocando su parte superior.

Ron trato de voltear la cara para no mirar, ya se había resignado que no podría ayudarla, la mano que sostenía su boca se alejo tomando su quijada con fuerza obligando voltear al frente.

-¿Qué haces? -Le susurró  al castaño por su repentina acción.

-Debería agradecerme estoy formando tu carácter -contestó casual, él peligris no entendía que es lo que le pasaba por la cabeza del castaño pero un gemido realmente alto interrumpió lo que le contestaría.

La Omega estaba casi gritando por la intromisión a su entrada  por él alfa con lentes, sentía su entrada expandiéndose centímetro a centímetro, era extremadamente lento logrando que doliera mucho.

-Siento que tu agujero me esta asfixiando -decía el alfa mirando como la parte inferior trataba de tragarse todo su pene. -Mírate te estás mojando cada vez más, ¿tanto te gusta ser forzada?.