Un Día Para Sobrevivir

Capítulo 1

Narrador Ron

Una llamada nos interrumpió, el alfa saco su celular y se alejó algunos metros para contestar, era intangible lo que decía, miré otra vez la calle, poco a poco los gritos cesaban, eso me hacía sentir temeroso, me aleje de la entrada cuando alguien paso corriendo.

- Malas noticias mi amigo tuvo que abandonar su carro, se quedó varado a unas cuadras de aquí -dijo el chico mirándome, parecía extremadamente preocupado.

-Podemos tomar un carro de aquí -mencioné señalando la entrada.

-No lo entiendes, en el carro traía cosas con la que podíamos defendernos -entendí a lo que se refería, sin armas era imposible cruzar la ciudad, ni siquiera podíamos dejar el callejón sin salir heridos.

-¿Que hacemos? -Me sentía inútil pero que más podía hacer.

-Mi amigo conoce alguien que vive cerca de aquí, nos encontraremos y busquemos una solución para poder cruzar la ciudad, debes hacer lo que yo te diga a pie de la  -me miró a la cara seriamente, asentí repetidas veces, en mi garganta sentía un gran nudo.

No dejaría que fuera atrasado por mi culpa.

-Ven vamos a salir por el otro extremo de la calle -lo seguí por detrás, solo se escuchaba en sonido de nuestros pasos, al llegar a la salida se detuvo, se asomó y me hizo una seña con su mano para continuar, en ésta calle se escuchaba más ruido, había personas de traje corriendo por todos lados, los carros no podían cruzar así que todos los abandonaban.

-Mami mami ven po mí, mami po favo ven po mi, mami mami -en un carro se encontraba un niño pequeño llorando, estaba solo miré a Frank y ya estaba a unos metros lejos de mí, parecía muy concentrado en salir de aquí. No podía dejar sólo al niño.

Crucé la calle y abrí la puerta del carro, el niño seguía pidiendo a su mamá, le quite el cinto de seguridad.

-No llores ya no llores ahorita buscaremos a tu mami -traté de consolar al niño pero no se detenía, lo tome en brazos y busque con la mirada a Frank, no lo encontré estaba entrando en pánico pero trate de tranquilizarme.

-Mami! -el niño gritó emocionado y apuntaba a una dirección, lo seguí con la mirada y una mujer de unos 30 años se dirigía hacia mí.

-¿Este niño es tuyo..? -Sentí un golpe en mi cara, mi nariz comenzó a doler horrible, poco después sentí que me arrebataba al niño de los brazos.

-¡¿Qué querías hacer con mi hijo maldito pervertido?!, ¡¿Qué no tienes madre maldito maricon?! -Exclamó tratando de golpearme otra vez, pero con el peso del niño no pudo darme con tanta fuerza.

-Señora cálmese sólo quería ayudar al niño a buscarla -expliqué sosteniendo mi nariz que sangraba.

-Piensas que no se que intenciones sucias tenías pero ahorita vas a morir maldito pedófilo -la señora saco un arma de no se donde mierda, dí pasos atrás por inercia, quería gritar por ayuda pero un carro salió de la nada y segundos después sentí la cara manchada, no entendía lo que estaba pasando.

Mire mis manos y había sangre, era mucha sangre, ¿por qué tengo mucha sangre?.

-¿Qué carajos paso? -Mire la escena frente a mi y no lo entendía, hace un segundo estaba la señora con su pequeño aquí pero por que, por que están ahí, bajo el auto, alguien salió del carro, y se disperso en la multitud.

Yo...yo el niño, que paso.

Alguien paso junto a mi tomé su mano. Era una mujer ella me miraba asustada.

-Por favor suéltame, por favor -no me había dado cuenta la fuerza que aplique en agarrarla, la solté por inercia y ella cayó de espaldas, traté de ayudarla pero ella se levantó y corrió.