CAPITULO 11

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CAPITULO 11

"La duda es una enfermedad, donde quieres obtener respuestas sin importar que"

Owen:

Me quite la camisa y empecé a quitarle el vestido a Maisha, era muy hermosa, empecé a acariciar todo su cuerpo, tenía unos pechos normales pero hermosos, cuando baje mis manos para seguir acariciándola le pregunte

-¿Tomas algún tipo de anticonceptivos?


Maisha:

Fue inevitable reír  -¿A estas alturas quien no lo haría?- pregunte divertida, me miro levantando una ceja -No quedare embarazada Owen no te preocupes, además no quiero que uses preservativos- se levantaron las comisuras de sus labios en una sonrisa, lo empuje quedando encima de él ahora, besándolo y quitándole los pantalones quedando en bóxer.


Owen:

-bueno me parece buena idea- no había nada más sexy en eso que una mujer encima de un hombre -entonces enséñame lo que sabes chica mala.


Maisha:

Lo mire picara y empecé a besarle el cuello, luego baje a sus hombros y sus abdominales, mi vestido estaba medio puesto así que me lo saque encima de mi cabeza, me estaba examinando toda, y se le veían los ojos llenos de deseo. Mordí su labio inferior y me cogió las cadenas, me acerque a su oído besándole el lóbulo

 -Nademos en el lago- dije susurrando sexy y gimió levantándome rápidamente y llevándonos hasta allí con mis piernas en su cintura.


Owen:

Camine hasta el lago y cuando entramos la bese y me sumergí con ella, la tenía abrazada a mí, no la iba a soltar en un rato, cuando subimos a la superficie por faltaba aire, la seguí besando tan salvajemente como la fuerza de mi deseo por ella. La agarre de las caderas y le quite su bikini que tenía, subí mis manos hacia el sujetador y también se lo quite, empecé a besarle los pechos y ella emitía pequeños gemidos de placer.

Maisha:

Cada caricia, cada beso, era algo totalmente diferente de lo que había sentido con alguien, es algo nuevo que quieres probar y es adictivo, solo gemía del placer que me producía tenerlo tocándome, lo agarre del cabello y suavemente hice que me mirara

 -Hoy eres mío- dije entrecortadamente, y lo bese toda la cara tiernamente, su frente, nariz, mejillas y pase mi lengua por sus labios provocándolo.


Owen:

-soy todo tuyo- le dije mientras ella me besaba, la acaricie y cuando ya no pude más, la prepare para poder entrar dentro de ella, cuando lo hice soltó un suspiro y empecé con movimientos lentos, para que se fuera acostumbrando a mí, era muy linda verla con las mejillas encendidas de un rosa hermoso, sabía que lo que hacíamos sólo era el inicio de algo que todavía ninguno de los dos estaba preparado para dejar.


Maisha:

Movía mis caderas y apretaba más fuerte mis piernas haciendo que entrara más a fondo y dijera mi nombre, haciendo que el ritmo fuera más rápido y arañara su espalda de lo cerca que estaba a venirme abajo.


Owen:

La apreté más a mí e hice mis movimientos más rápido y fuertes, ella gemía mi nombre y eso me excitaba más, empecé a sentir como se tensaba y después su liberación, después de unas embestidas llegue al clímax y la abrace, esperando que nuestras respiraciones se controlaran para poder salir del lago.

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