CAPITULO 20

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"Lo que amas si no te destruye te mata"


Maisha:

Me desperté a la madrugada por otra pesadilla y vi que Owen no estaba, me puse a llorar de nuevo, no quería sentirme sola, no sé qué tiempo pasó hasta que otra vez me dormí.

(...)


Escuche a Owen caminar de un lado a otro y me levante, eran las 6 am, ¿a qué horas llegaría? ¿Dónde estuvo?, fui a la sala y estaba en la cocina tomando una cerveza y se notaba que había llorado, mi estómago se retorció y me volví al cuarto, ya no sabía que decirle


-Maisha, espera-dijo él y me voltee a verlo.

Owen:

-sé que esto te duele tanto a ti como a mí, y que es una mierda, no soy la mejor persona del mundo Maisha, pero por ti y por ese bebe lo seré cada día, seré un buen padre, tío lo que sea para tu bebe porque te amo y no voy a renunciar a ti, por que algún día tendrás ahí dentro a mi hijo y yo querré al tuyo como si fuera de mi sangre, sé que he sido un tonto por haberme ido pero necesitaba pensar, aclarar toda esta situación - la mire, ya no quería verla sufrir, quería ser feliz y que ella lo fuera también- y me ha servido, porque yo no puedo dejar a la mujer que amo, no te dejaría aún que me obligaran a hacerlo, nunca te dejaría, te amo demasiado tanto así que duele- me acerque a ella y la abrace para que sintiera que mis palabras eran sinceras.

Maisha:

Tenerlo en mis brazos de nuevo y que me dijera que me amaba a mí y a mi bebe me hizo soltar las pocas lagrimas que me quedaba, sonreí de lo feliz que me sentía, era mío y no me iba a dejar, lo mire

-Demuéstramelo, o por lo menos hoy quiero volver a sentirte y decirte cuanto te amo- me miro ilusionado y sabía que todo este tiempo me estaba esperando hasta que estuviera lista. Nos empezamos a besar pero de una manera tierna como si tuviéramos miedo de lastimarnos, me llevo a la cama y me acariciaba tan suave por mi cara y cabello -Ámame- dije y asintió con una sonrisa para después volverme a besar.

Owen:

Profundice el beso y empecé a amarla, se sentía un poco diferente, tenía miedo de hacerle daño, no sabía cómo reaccionaría así que fui despacio, la acaricie, la bese y cuando noté que estaba lista la penetre, me moví con movimientos lentos y cuando noté que ella estaba disfrutando me moví un poco más fuerte y rápido, buscaba su placer y el mío, cuando sentí que se tensó y luego de ella salió un gemido liberador supe que había llego al límite así que me deje ir y los dos acabamos acostados en nuestra cama cansados por el maravilloso orgasmo que habíamos sentido, la abrace a mí y le dije palabras bonitas hasta que se volvió a quedar dormida al igual que yo

- te amo pequeña- dije en un susurro.

(..)

Maisha:

me levante con una sonrisa en mi cara, amaba a este hombre que estaba al lado mío, lo acariciaba suavemente por su rostro y contemplaba lo hermoso que se veía dormido abrazándome, le di besos suaves en su nariz, mejillas, mentón pero sin despertarlo, me pare y fui al baño, me quede mucho tiempo mirándome y acariciando a mi vientre, pensé en todo lo que me había dicho, seria afortunada o afortunado por dos papas que lo amarían, sonreí ante el recuerdo de ayer y como me tocaba tan suave, vi el reflejo de mi chico detrás de mí, se acercó y me beso el cuello para luego abrazarme y nos quedamos mirándonos por el espejo

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