𝗖𝗜𝖭𝖰

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RenJun alzó sus brazos y se lanzó sobre ambos alfas, haciendo que los tres cayeran al suelo, los tres rieron, para que luego el omega se acomodara sobre ambos y luego se levantara para recostarse a un lado y abrazara son sus brazos y piernas a JaeMin. JeNo rió y se levantó del suelo haciendo que el omega frunciera el ceño.

— No~ —Se quejó, para luego gatear sobre JaeMin y sentarse frente a JeNo para abrazarlo.— No puedo —Hizo un puchero y se sentó nuevamente, alejándose de JeNo. El omega simplemente quería estar junto a ambos, pero nos sabía como hacerlo.

JaeMin se acercó al mayor y lo abrazó, haciendo que JeNo hiciera lo mismo, provocando una pequeña risita en el omega ya que había quedado en el medio de ambos alfas y eso le gustaba en cierto modo. Ambos alfas sonrieron enternecidos al ver lo pequeño que se veía el mayor entre ellos, para luego alejarse y ver como el mayor se recostaba en el suelo con sus brazos extendidos mientras reía bajito. Ellos nunca pensaron que iban a necesitar ver de esa forma tan tierna al mayor, y no es que este no fuera tierno, pero normalmente intentaba ocultar ese lado de ellos luego de que le dijeran que era tierno. Al parecer el orgullo del omega fue golpeado esa vez, pero eso no quitaba que le gustaba que ambos alfas se lo dijeran de vez en cuando. 

RenJun se levantó de su lugar y corrió hacia la habitación, haciendo que ambos alfas fruncieran el ceño y luego vieran al omega arrastrar un gran oso de peluche marrón haciendo que ambos rieran, ese había sido un regalo de ellos hacia el mayor, pero usualmente nunca lo veían por el departamento del mayor. RenJun lo movió hasta el medio de la sala y se sentó en el suelo mientras acomodaba parte de su cuerpo y cabeza sobre el gran oso.

— ¿Le pusiste nombre? —Preguntó JaeMin, haciendo que el mayor asintiera repetidas veces— ¿Cómo se llama?

— Se llama J, porque sus nombres empiezan con esa letra —Sonrió mientras señalaba a ambos alfas y se ocultaba en el oso para evitar que vieran su sonrojo. 

Ambos alfas sonrieron, ambos creían que podían morir de ternura en ese momento, y eso que aún quedaban cinco días más para que el efecto del celo se fuera por completo. RenJun se sentía cómodo con ambos alfas, y eso era realmente lindo.

𝗣𝗘𝗤𝗨𝗘Ñ𝖮 𝖮𝖬𝖤𝖦𝖠 ; NORENMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora