Renacimiento de la pequeña nuera en los 80 - Parte 1

Capítulo 63: Desayuno abundante

Chu Molin no pudo reír ni llorar cuando escuchó que Qin Xue regañaba al gamberro.

Esta realmente agraviado, ¿Quién diría que usaría ese tipo de ropa? ¿No lleva esta mujer solo un poco de tela?

¡Llevar esto equivale a intentar seducir a alguien!  No se pone algo así  cuando no está en casa, ¿verdad?.

Si alguien llama a la puerta, ¿ abre la puerta para ver a la gente usando este tipo de ropa?

No, tenia que decirle mañana que no se le permitirá usarlo y  después debe tirar esa prenda a la basura. ¡Es realmente algo vulgar!

Si Qin Xue sabe lo que piensa Chu Molina, seguramente se enojaría, donde se ha vuelto vulgar, ¡esta hermana nadaría en bikini con sus compañeros de clase en su vida anterior y no era vulgar!.

No importa lo que pensaran los dos, Qin Xue se alivio y se dio una palmada en la cara con agua fría.

Abrió la puerta y estiró la cabeza para echar un vistazo. Después de no ver a Chu Molin, corrió de regreso a la habitación a una velocidad de 100 metros por segundo, cerró la puerta y se fue a la cama.

Estaba confundida en este momento, aunque estaba asustada, todavía no podía resistir su somnolencia y  Qin Xue se  quedó dormida casi instantáneamente cuando cayó en la cama.

Chu Molin dio lástima, se pellizcó la nariz y levantó la cabeza mientras escuchaba el movimiento del exterior, cuando todo se calmó, echó un vistazo a cierta parte de su cuerpo antes de abrir la puerta y tomar una ducha  con agua fría.

¿Cuándo fue tan malo su control? Obviamente, esta mujer solía colgarse frente a él para seducirlo, pero no  sentía nada.

Ahora solo echó un vistazo y tuvo una hemorragia nasal, no diga más, Xiao Molin todavía se mantuvo de pie durante mucho tiempo, ¿El perro se ha comido el entrenamiento anterior?.

Cuando el calor disminuyó con agua fría, Chu Molin regresó a la habitación y caminó hacia la puerta, escuchando el silencio de la habitación, suspiró impotente y entró a su habitación, ¡qué mujer tan despiadada!.

En este momento, Chu Molin no estaba de humor para escribir un plan, ¡y se fue a la cama a dormir!

Pasaron unos minutos y Chu Molin abrió su par de ojos fríos y  se quejo de la  mujer.

Chu Molin no podía calmarse y dormir, ¡la apariencia de Qin Xue seguía en su mente!. Chu Molin quería golpear a alguien ahora.

Ya que no puedes dormir se levantó y escribió un plan de entrenamiento.

¡Tan pronto como sonó el  despertador, Chu Molin se cambió de ropa y volvió a su  apariencia militar.

¡Va a reunir a todos para entrenar!

Qin Xue escuchó el  despertador, se dio la vuelta, tomó la colcha, se cubrió la cabeza y continuó durmiendo.

Eran las siete y media cuando se despertó, y no vio a Chu Molin cuando se salió de la habitación, pero al ser temprano probablemente  aún no había salido al trabajo.

Entró a la cocina y vio, oh, este hombre es tan bueno, él también sabe  limpiar los platos y la cocina, ¡y hasta tiró la basura!.

Jeje, parece que este hombre es simplemente frío y de buen corazón.

Ahora que todo está limpio, comenzó a preparar el desayuno. Es solo que no puede descubrir que debe hacer. ¿Qué le gusta comer a Chu Molin y qué no le gusta comer?

¿No lo sabe en absoluto?  ¡Olvídalo, haría algo!

Qin Xue  cocinó un poco de avena, cocinó diez huevos  y también seis panqueques de cebolleta. ¡El desayuno está listo!

La guarnición es solo un plato de pepino encurtido y una berenjena fría.   Bueno, es realmente bueno, el color y la fragancia son deliciosos, ¡la artesanía enseñada por su abuela no se pierde!.

Lo que Chu Molin vio cuando entró por la puerta fue que su pequeña esposa vestía una falda blanca hasta la rodilla, inclinada y entrecerrando los ojos para oler el aroma del desayuno, su rostro estaba intoxicado y era muy encantador.

La comisura de la boca de Chu Molin se dobla inconscientemente, y se da cuenta de que la pequeña esposa que vio cuando regresó esta vez estaba particularmente sonriendo y entrecerró los ojos cada vez.

Chu Molin no lo había notado por sí mismo. Desde que regresó esta vez, sus ojos siempre siguen inconscientemente a Qin Xue, ¡y se rió cuando la vio sonreír!

Cuando Qin Xue escuchó la puerta abrirse, se volvió para ver que era el hombre que regresó y dijo:

"¡Has vuelto, lávate y desayunemos!".  Agarro un tazón de avena y lo colocó frente a ella. Chu Molin tenía un tazón vacío en su posición.

Cuando salió Chu Molin, Qin Xue ya estaba comiendo papilla.

Chu Molin tiró de la silla y se sentó sin hablar. Qin Xue levantó la cabeza y lo miró sin prestar atención. Se comió su propia papilla, pero explicó:

"No sé qué te gusta comer, así que hay muchos estilos, pero la cantidad no es grande, ¡debería ser suficiente para ti!".   Después  terminó de comer con un trozo de pepino en escabeche, ¡estaba crujiente y crujiente!

Chu Molin miró el abundante desayuno y no dijo nada. Cogió el cuenco y lo llenó con un cuenco de avena. La avena estaba muy pegajosa y el sabor era perfecto.

Tomó un panqueque de cebolleta y le dio un mordisco. Era  fragante, con relleno de carne y el sabor es muy fresco.