Renacimiento de la pequeña nuera en los 80 - Parte 1

Capítulo 108: Gu Xuelin

Chu Molin vio la mirada profunda de Qin Xue y dijo en su corazón, su esposa no pensaría lo que le pasó a él y a esta mujer, ¿verdad?

La voz fría que puede congelar a alguien se desbordó: "Lo siento, no quiero ser tu amigo, ¡ya estoy casado y tengo esposa!, ¿Quieres pagar la factura? Si quieres llevar la ropa, contaré el dinero por ti. Si no pagas, por favor apártate, para que los clientes que están detrás puedan pagar. "

Las otras personas que querían hablar con Chu Molin dejaron de pensar. Solo Gu Xuelin sintió que este era el hombre que estaba buscando y continuó, ¡Era guapo y tenía una voz agradable!

Originalmente, Gu Xuelin escuchó de un amigo que una tienda de ropa llamada Chenxi abrió en este condado, ¡y la ropa está de moda y es hermosa!

Así que quería echar un vistazo, pero no esperaba encontrarse con un hombre de tan alta calidad, ¡eso es realmente bueno!

En el pasado, esos hombres que la vieron se apresuraron hacia adelante, solo porque podía mirarlos, no le gustaban.

Ahora que vio a este hombre que le ha gustado, pero la rechaza, ser tan indiferente hacia ella ha despertado su temperamento inquebrantable.

No importa lo que dijo el hombre, talvez sólo dijo que esta casado para rechazarla.

"¡Voy a pagar la cuenta! ¡Aquí!". Gu Xuelin vio como Chu Molin tomaba la prenda.

Chu Molin tomó la ropa y le gritó a Qin Xue: "Esposa, ¿cuánto cuesta este vestido?"

Después de escuchar esto, todos miraron a Qin Xue, ¡resulta que este hombre está realmente casado!

Es falso decir que no están decepcionadas, ¡así que el hombre guapos ya está con alguien!

Solo Gu Xuelin miró a Qin Xue y pensó:

Esta mujer se ve linda, pero está embarazada, hay algunas personas que roban pescado, además, ¡es un hombre tan guapo que es el dueño de esta tienda!

Entonces, con sus métodos y apariencia, ¡no creía que no podía derribar a este hombre!

Qin Xue miró el vestido de princesa en la mano de Chu Molin, se acercó, lo recogió y echó un vistazo: "¡88 yuanes! ¿Lo llevas?"

Después de preguntar, empujó a Chu Molin hacia atrás y golpeó el estómago de Chu Molin con el codo cuando no estaba prestando atención. ¡ Este tipo llamó a la abeja y la mariposa! .

"¿Tan caro?". Aunque Gu Xuelin no tiene problema con el dinero, no esperaba que tal prenda costara 88 yuanes, ¡que es casi lo mismo que el salario de un mes de un trabajador común!

"¿Es caro? No creo que sea caro. Mira este estilo, tela y mano de obra, ¿Qué no es bueno? . ¡Mire dónde va a encontrar esa ropa toda la ciudad del condado!, teniendo en cuenta estas cosas, no ganamos mucho dinero. ¡Todos hacemos negocios con pequeñas ganancias!, ¡Así que esto ya no es caro! ". Qin Xue resopló en su corazón. Si no miró a su hombre, aún podría darle un descuento.

Chu Molin, que estaba detrás de Qin Xue, vio a Qin Xue sentirse amargada y sintió que su esposa se enojó mucho esta vez, ¿Qué debe hacer?.

Es todo por esta mujer, ¡solo creó problemas!

Fue muy difícil lograr que la esposa lo aceptara lentamente, ¡pero estaba enojada por la mujer!, tenía muchas ganas de echar a esta mujer.

"¡Envuélvelo!". Gu Xuelin tomó cien yuanes y los tiro en el mostrador, mientras habló con arrogancia.

"Está bien, espera un momento, ¡lo cobraré!". Qin Xue sostuvo los cien yuanes y habló con buena voz, no se pudo escuchar el tono de la ira en absoluto.

"¡Este es tu dinero, esta es tu ropa, por favor tómalo!". Qin Xue encontró doce yuanes y se los entregó a Gu Xuelin con la ropa.

"Chico guapo, recuerda que mi nombre es Gu Xuelin. ¡Tú y yo, Gu Xuelin, seguro que ganarás!, ¡Vendré a ti de nuevo! ". Gu Xuelin le dijo a Chu Molin y se fue con el dinero y la ropa. ¡Un montón de personas se quedaron mirándose unas a otras!.

"Está bien, no mires. ¡Aquellos que van a elegir la ropa, eligen la ropa, y los que tienen que pagar pagarán la cuenta!". Qin Xue sonrió y saludó a los otros clientes en la tienda.

¿Qué hay de malo en esto? ¡Alguien le dijo a Chu Molina algo y demostraba que su hombre era excelente! Ella sigue teniendo su orgullo, ¡y un hombre tan bueno sólo le pertenece a ella, Qin Xue!

Estuvieron ocupados durante mucho tiempo antes de despedir a estos clientes. ¡Era hora de dar un suspiro de alivio!