𝑷𝒆𝒓𝒅𝒐́𝒏𝒂𝒎𝒆

Parte 8: Nuevos aliados

-Buenas mañanas -dijo bostezando.

-Señorita Dupain-Cheng  -la llamó Gabriel, serio-. ¿Por qué sigue en pijama? -le preguntó  haciendo que la azabache se mirase, avergonzada, a la ropa que llevaba.

Adrien echó unas  risillas mientras Marinette, sonrojada, corre a su habitación para  cambiarse. La azabache estaba tan cansada que no se había dado cuenta ni  de lo que llevaba encima. Solo deseaba que todo aquello fuese una gran pesadilla pero... no lo fue.

-Padre -le llamó Adrien a su padre justo después de que Marinette abandonase el comedor.

-¿Qué pasa, Adrien? -le preguntó, serio.

-¿Hay algo que me ocultas?

-¿Qué te tendría que ocultar?

-Pues... -Adrien desvió la mirada a otra parte- sobre mamá, por ejemplo.

Gabriel abrió los ojos como platos y se volvió hacia su hijo para mirarlo fijamente, estupefacto.

-Adrien... ¿a dónde quieres ir a parar? -le preguntó, sospechoso.

-Padre, -Adrien se levantó y se acercó a él- explícamelo todo.

Gabriel tragó saliva mientras sus manos empezaron a sudar.

-¡Hola, ya estoy vestida! -exclamó Marinette, sonriendo y alegre, entrando por la puerta que llevaba al comedor.

-Por los pelos... -susurró Gabriel mientras Adrien se sentó en su asiento.

-Mmm... ¿me he perdido algo? -preguntó la azabache, sentandóse en su asiento y mirándolos uno al otro.

-No mucho -se limitó a contestar Adrien.

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Recordaba esos días... Sus primeros días en París. Todo estaba normal, sin ninguna inquietud. La ciudad del amor estaba protegida por los famosos héroes Chat Noir y Ladybug, también conocida como Marinette Dupain-Cheng, quien fue descubierta por... una cámara.

Fue gracioso ver cómo había gente que se decepcionó viendo la superheroína de París, admirada por muchos años y después de tanto tiempo que la hayan descubierto por una simple cámara, por un descuido. ¿Cómo fue posible que la superheroína siendo audaz y previendo ataques casi imposibles de preveer pero luego que no se percatase de una simple cámara que estaba grabando en el mismísimo sitio toda la batalla?

Fue demasiado fácil. Sus planes fueron más fáciles de lo que ella pensaba. Todo transcurrió como ella planeó en un principio.

FLASHBACK

-¡Señorita, señorita!

-No puede hablar ahora mismo. Está en directo, ¿no la ve? -le dijo la que controlaba la cámara de la pelea del sentimonstruo de los dulces que Ladybug estaba atacando.

-Pero tengo algo para enseñaros... -insistió Zoé a la de la cámara.

Ladybug terminó derrotando al sentimonstruo y fue directamente a una columna donde pocas personas se percataron de aquello.

-Vale, ¿ahora qué quieres? -le preguntó la reportera quien terminó su trabajo.

-Seguidme. -Zoé guió a las dos trabajadoras hacia la columna donde Ladybug se escondió.

-¿Por qué estamos aquí? -preguntó Nadja Chamac, la reportera. Más personas, sin entender por qué, siguieron a las chicas cuando Marinette salió de la columna, siendo vista por todo el montón de personas.