Elaine es una escritora que se esconde en el mundo del anonimato, las letras fueron lo único que le quedaron después de esa trágica noche que ella lucha por olvidar.
Deneb es un estudiante de arte que sueña en algún día convertirse en uno de los má...
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Estoy jodida.
Conocer a alguien no solo trae cosas buenas, también trae malas. Y no puedo dejar de pensar en todo lo malo que puede pasar si sigo dejando que las sensaciones y emociones que siento por Deneb continúen.
Podría ser lo mejor que me ha pasado o todo lo contrario.
Y es que las heridas no sólo se pueden tocar y sentir, a veces las peores heridas son las que no se ven, las que te acuchillan cada día. Hacernos daño a nosotros mismos, no es la respuesta, sin embargo cada día pienso como sería vivir sin pensamientos intrusivos, sin inseguridades, sin miedo, sin preocupación, sin insomnio.
Quizá así podré ser un poco más feliz, mi corazón no dolería como lo hace todos los días y tampoco tendré que fingir que todo está bien. Hay días en los que creo poder continuar, me miro en el espejo y me sonrió varias veces tratando de engañarme a mí misma "todo estará bien" me repito, pero la sonrisa se desvanece hasta convertirse en muecas de lástima y tristeza.
Por favor, ¿cuántos años me he repetido lo mismo? Nada está bien, las pesadillas me carcomen cada noche, a veces ni siquiera quiero levantarme de la cama, no puedo mirarme al espejo sin sentirme asqueada, no puedo evitar llorar cada vez que me acuerdo de ese día, desconfío de toda la gente y constantemente soy una masa de nervios.
Me digo palabras de aliento esperando tener una vida mejor, prometiendo cosas que sé que en realidad terminan siendo promesas rotas.
Y por primera vez quiero hacer las cosas bien.
Quiero arriesgarme a que probablemente me destrocen el corazón.
Quiero sentir que es que alguien me ame por una vez en la vida.
Quiero poder confiar en alguien sin que me juzgue.
Y estoy jodida, de nuevo, porque Deneb comienza a gustarme.
No.
Me gusta Deneb.
Ok, lo dije. Bueno, en realidad lo pensé, ahora viene la parte más difícil, decírselo a él. Y, ¿qué es lo peor que puede pasar?
No sé qué hacer con todo esto que siento, incluso es un poco abrumante. Constantemente siento esa sensación de querer gritarlo, de quitarme ese secreto de encima sin importar las consecuencias.
Estar con Deneb se siente como entrar en un libro con una historia derrochante de romance, demasiado bonito para ser real. Tal vez nuestro camino tiene un destino descarrilado y no importa el camino, aún así me da miedo arruinarlo, pero cada vez que trato de alejarme algo me regresa a él.
Y si me lo preguntas, podría vivir en una felicidad momentánea siempre y cuando sea con Deneb.
Pero esta no es la historia en la cual el poder del amor arregla todo, porque los problemas siguen ahí solo que los olvido por un rato, las heridas siguen ahí aunque las puedo tapar con un curita y resistirán por un momento.
