The Neighbor- Larry Stylinson

Capítulo 8

"No sonrías así, me haces sentir náuseas"

Desde aquella vez en la iglesia Harry y Louis se hicieron un poco más cercanos a visión del rizado, Louis iba las noches a su cuarto antes de que se durmiera y pasaban el rato hablando hasta que Harry no podía ni abrir los ojos. Su mamá lo miraba más cansado y había llegado tarde a las clases dos veces, eso no estaba bien en un ataque de desesperación le preguntó a Harry si estaba consumiendo drogas a lo que el rizado muy indignado le contestó que no pero su mamá no le creyó ocasionando un desorden en su cuarto, buscó en todas partes tirando su ropa y algunas otras cosas pero todo fué peor cuando Thomas llegó escuchando cómo su mujer le decía que Harry estaba muy mal, que probablemente estaba consumiendo sustancias ilícitas pero ¿Cómo iba a conseguir eso si jamás salía? ¿Por qué haría eso?.

Thomas no quiso escucharlo y sólo recibió un golpe en el rostro para que dijera el por qué estaba llegando tarde a las clases, Harry no les iba a contestar con la verdad porque si lo hacía eso implicaba no ver otra vez a Louis. Prefería los golpes de su padre por un rato a no ver el rostro de Louis nunca más.

Esa noche su madre y padre durmieron en su cuarto, Harry rezó para que Louis no fuera, sabía que las visitas de su amigo no eran siempre pero él llegaba de la nada tenía miedo de que hoy fuese una de esas veces pero gracias a Dios o a Satán eso no pasó.

Pero tampoco pasó la noche siguiente.

Ni la siguiente.

Louis no fué con el durante una semana dos días, Harry los contó. Louis no fué con él y sus sábanas dejaban de oler a su perfume, Louis no fué con Harry y Harry comenzó a pintarlo a escondidas para pretender que estaban juntos.

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│ "𝕋𝕙𝕖 𝕟𝕖𝕚𝕘𝕙𝕓𝕠𝕣"
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—Saldremos a hacer las compras— dijo su madre

—Con cuidado por favor— dijo Harry antes de mirar cómo sus padres salían de la casa.

Suspiró tallando su rostro, un domingo aburrido, el sol estaba a todo lo que da y juró escuchar a algunos niños reir mientras gritaban no entendía cómo sus padres iban al supermercado con ese horrible calor afuera. Al menos salían ¿No?, Ni siquiera preguntaron a Harry si gustaba ir, jamás lo hacían.

—Una semana tres días— susurró el rizado— ya me acabé todo mi azul y tú no vuelves.

Sólo le quedaba esperar a sus padres, la televisión estaba desconectada y ellos habían escondido el control "para que no mirara nada malo", era tan agotador tener que buscar la aprobación de la pareja de adultos cada que hacía algo. ¿Dónde estaba aquél chico de ojos azules que lo hacía sentir no-aburrido?

Al parecer lo invocó ya que minutos después escuchó golpecitos en su ventana que lo hicieron saltar del sillón para correr al cuarto abriendo rápidamente la ventana esperando la llegada de Louis pero no había nadie, se convenció de que probablemente había Sido su imaginación la que le había jugado una sucia broma. Volvió a escuchar ese ruido en la ventana, se puso de pie y regresó a su cuarto abriendo ésta sin encontrar nada así que se fué nuevamente a la sala pero no pudo ni sentarse cuando ese ruido seguía haciendo que Harry se molestara. ¿Por qué seguía ese ruido? ¿Algo chocaba con su ventana?.

Esas preguntas se respondieron cuando abrió por tercera vez la ventana y un chico de cabello raro le gritó en la cara asustandolo. Retrocedió hasta sentarse en su cama sin quitar la vista de la ventana mirando el cuerpo de Louis entrar con facilidad pero éste se colocó de espaldas confundiendo al rizado pero esa posición no duró mucho ya que se dió la vuelta, llevaba una chamarra de mezclilla y una playera negra junto con uno jeans negros muy, muy ajustados.